M. Rajoy

Ya sé que lo dice la Guardia Civil y no el juez, no hace falta que lo aclarase ayer el mismo Aznar que niega que conoce a Francisco Correa cuando fue uno de los invitados a la boda de su hija. Pero lo dice inspector jefe de la UDEF, Manuel Morocho, y con lo que dice en cualquier democracia rodarían cabezas: el presidente del gobierno español y el principal partido de España habría cobrado más de 300.000 € en dinero sin declarar que venía de las empresas que recibían obra pública.

Pero el problema es una camiseta

No valgo para diseñar portadas, está claro, porque yo habría abierto el diario de ayer con la noticia de “M. Rajoy” y ninguna cabecera lo ha hecho. Es más: la polémica sobre si la camiseta de la selección española tiene una franja azul o morada ocupa más espacio. España es así y parece que no tiene remedio: las instituciones insisten en que no hay guiño alguno a la bandera republicana, y que la criticada franja es azul. ¿Recuerdan el color de quienes dieron un golpe de estado a la II República?

El nivel democrático… de España

Beatriz Talegón saltó a la “fama” política como la miembro de las juventudes socialistas que cantó las cuarenta a sus mayores. Después, no ha hecho otra cosa que dar tumbos y soltar muchas tonterías en tertulias y Twitter. Pero esta semana casi acierta: no se trata de que Catalunya tenga “una cultura democrática muy por encima de la media española”, es que España tiene capacidad para el diálogo político muy por debajo de todas las medias que se nos ocurran.

¿Hablamos o ya no?

“¿Dónde están los de #ParlemHablemos?”, se preguntaba @Ruben, un usuario de Twitter catalán con más de 14.000 seguidores (me sigue sorprendiendo la cantidad de estrellas en esta red social que hay en Barcelona y alrededores). Y la pregunta es buena: salieron vestidos de blanco reclamando una solución templada (siempre que el independentismo renunciara a lo suyo) y han desaparecido con el 155 y las detenciones preventivas. ¿Han cumplido su misión o han renunciado a ella?

280

Jack Dorsey, creador y actualmente gran jefe de Twitter anunciaba el martes por la tarde que ya todos los usuarios de su red social podían escribir tuits de hasta 280 caracteres (hasta el mismo martes el límite era de 140). Personalmente, creo que es un error: la gracia estaba en saber sintetizar. Pero estoy seguro de que usaré esa nueva extensión (es más, ya lo he hecho). Así que, nota mental para mí y todos: tuitear con hasta 280 caracteres es una opción, no una obligación.

Bélgica 1 – 0 España

No sé cómo acabará el partido ni el pulso diplomático, pero de momento es evidente que la justicia belga va ganando a la española manteniendo en libertad vigilada a la parte del govern que no se quedó en Catalunya. En Twitter los de un lado y los de otro han esgrimido estadísticas que ponen peor al sistema judicial español o belga en función de los intereses del tuitero, pero incluso aceptando que son de una fiabilidad similar, parece que en Bruselas miden mejor que en Madrid.

Todos nazis

Ayer también se recrudeció en las redes sociales la batalla por ver quién es más más nazi. Por supuesto, después de conocer la decisión de la justicia belga, en España señalaban a las diferentes instituciones y partidos flamencos, a los que relacionaban, sin tapujos, con el nacismo. ¡Quién va a ponerse ahora a estudiar historia de aquellos partidos! Lo que no deja de resultar curioso es que parte de las acusaciones vengan de un partido fundado por un ministro franquista.

Sensibilidad, la que tiene ahí colgada

María Antonia Trujillo está siendo uno de los descubrimientos tuiteros de esta etapa del procés. La exministra socialista, después de quejarse airadamente de que le sirvieran en Madrid agua Font Vella, ahora defiende a los policías que bromeaban sobre una supuesta violación a Oriol Junqueras: “Osito tampoco es un insulto. Insultos los q nos escupen en las redes” (sic), afirma quien va de sensible feminista con sus fotos sacadas una cámara de 7.000 euros.

Fachin abandona

El secretario general de Podemos en Catalunya ha anunciado que deja de serlo después de que Pablo Iglesias le criticase abiertamente y de que el propio Albano-Dante Fachín denunciara la activación de una campaña de descrédito en su contra, al uso habitual que ya hemos observado en Podemos contra su disidencia interna. ¿Los motivos? Yo lo tengo claro: la desavenencia viene por la ausencia de ideología y la seguridad de que sobran golpes de efecto.

Bego, ¡qué grande eres!

Nuestra compañera de Onda Vasca, Begoña Beristain mostraba en Facebook su medalla después de haber terminado la maratón de Nueva York. En el vídeo, aún sobre el asfalto, deja ver sin filtros su cansancio y su emoción por haber cumplido un sueño, y anima con la energía que solo ella es capaz de transmitir (y por eso la admiramos) a que todos persigamos los nuestros con insistencia, hasta materializarlos. Ese es el verdadero mérito, más incluso que el de terminar la maratón.

Contra qué no debes estar

En El Independiente querían hacer un reportaje enumerando los 14 errores que ha cometido Podemos durante el procés y que, al parecer, ha hecho que la imagen de este partido se resienta… Y les ha quedado un catálogo de piezas de propaganda contra el independentismo sobre las que solo puedes estar a favor. Y si estás en contra, como en el caso de Podemos, palo: no dudar, no acercarse al nacionalismo, no estar en contra del referéndum, aplaudir a los presos…

Todos contra Trump, ¿y qué?

La mayoría de la prensa estadounidense no deja de vapulear a Donald Trump. La portada del Newsweek de esta semana es lapidaria: caricaturas del presidente y sus colaboradores sobre el famosos “Air Force One”, el titular: “Serpientes en el avión”, y un subtítulo lapidario: “La jet-set de la Casa Blanca de Trump puede ser la más corrupta en la historia de EE.UU.”. Vale, me sumo. ¿Y qué? Al presidente le eligió la ciudadanía y su populismo sigue siendo valorado por parte de ella.

Pudo hacer trampa, ¿y qué?

Queda mucho trabajo para aclarar cómo funcionó la trama que, esto parece claro, salió de la Europa más oriental y fue dirigida a EE.UU. durante la campaña contra la candidata Hillary Clinton. ¿Fue un modelo de negocio rápido para un grupo de avispados hackers? ¿Fue una injerencia de Putin al que el enfrentamiento contra un populista la beneficia? ¿Hubo conocimiento, connivencia e incluso colaboración o contratación por parte del equipo de campaña de Trump?

El “nuevo” Facebook

Para los que vivimos de aconsejar sobre cómo disponer marcas en Internet la noticia que adelantan en El Confidencial no es buena: al parecer, Facebook está probando una nueva disposición en varios países (ellos han explorado lo que sucede en Gautemala) que discrimina entre el contenido de los usuarios y el de las marcas, precisamente. Esto es alterable, al parecer, si la marca paga para ser vista en el “muro” bueno, el de los usuarios. ¿Es ese el Facebook que viene?

Buen viaje

Carlos Pando, uno de los guionistas de “El Ministerio del Tiempo” dejaba claro en Twitter que, en efecto, habían decidido despedir la serie a lo grande: “Distopía, género, serie B, viajes al futuro… Al final se va con todo, o no se va”. Para los aficionados a la ciencia ficción la despedida de esta serie es una lástima, y para todos, porque nos quedamos sin este género que, sorpresivamente, emitía la televisión pública española. Un género menos, una tele más pobre.

¡Qué barbaridad!

No sé cómo definir el hecho de que la Audiencia Nacional haya decidido meter a la cárcel, aunque sea de un modo preventivo, a la parte del gobierno catalán que han pillado. El resto, no lo duden, entrarán también por culpa de una justicia que parece capaz de prestarse a disfrazar las injusticias o de ponerse al servicio del cálculo político de quien mira ya a las próximas elecciones generales. ¿Hay motivación política? En mi opinión, eso es indiscutible.

¿Quién da la razón a Lamela?

He hecho varias búsquedas en Twitter sobre todo para buscar opiniones de todo tipo y ofrecérselas en esta columna. Sobre el tema económico hay cierto consenso: el mal dato de desempleo en Catalunya les afecta directa y negativamente. Pero en el tema judicial, también: es muy difícil encontrar a quien avale a la jueza Carmen Lamela desde su propio sector, y las duras críticas de juristas, sin embargo, abundan. Solo “opinadores” de la derecha aplauden sus decisiones.

Lapitz se lo cuenta mejor

Como siempre, Xabier Lapitz lo expresa mejor que yo: él también ha buscado fuentes que avalen esta prisión preventiva y tampoco ha encontrado quien dé la razón a Lamela. Además, muestra su preocupación por la actitud del gobierno español, que opta por comportarse como un estado represor dictatorial, con un fiscal y una jueza que coinciden excesivamente, y periodistas y ex miembros del gobierno que sugieren la necesidad de trucar el resultado electoral en Catalunya.

No necesitamos credenciales

Cierro el bloque catalán de esta columna con lo que no necesitamos: ni nosotros ni mucho menos quienes están en la cárcel o pueden entrar queremos a personajes como Abel Riu que reparten en Twitter carnés de buenos y malos, que miden si apoyas suficiente o no a los presos y al pueblo de Catalunya. Según él, mi titular: “Qué barbaridad” es típico de equidistante. Cuando toda la energía tiene que centrarse en defender la legitimidad algunos prefieren perderla.

#GoazenBeGo

Mi amiga y compañera del Grupo Noticias, Bego Beristain, va a cumplir el sueño de muchas personas (en este caso, no me incluyo): correr el maratón de New York. Y hacerlo, además, como exige la propia organización: con capacidad para competir. Un logro que es el resultado de muchas horas de esfuerzo y trabajo. Otro “runner”, desde Andalucía, me sugería usar el hashtag #GoazenBeGo para animarle este fin de semana. Mañana Bego cumple un sueño y estará bien acompañada.

Blanqueo, no, gracias

Son ya varios los intentos de la izquierda abertzale de aprovechar lo que pasa en Catalunya para blanquear su pasado. Laura Mintegi lanzó un tuit con casi cuatro mil retuits en el que hablaba de “listas independentistas” inhabilitadas en Euskadi, como puede pasar en Catalunya. Pero no es comparable: la mayoría de inhabilitaciones fueron por relación con ETA, ratificadas incluso por Estrasburgo. Y sí hubo listas independentistas legales como en la que ella fue candidata, o todas las de EA y del PNV.

Las cosas por su nombre, sí, por favor

Jesús Cintora conseguía más de seis mil retuits denunciando el acoso al que fueron sometidos los consellers catalanes por fachas españoles. Por lo menos de fachas eran las convocatorias que vimos en Twitter: Hogar Social Madrid y partidos de la “alt right” llamaron a los suyos a avasallar a los políticos catalanes que llegaban a Madrid el miércoles para declarar ayer en la Audiencia Nacional, sin protección policial. Y el blanqueo aquí tampoco cabe: no son defensores de España.

Bulos, tampoco

El dibujante Eneko de las Heras no publicará más en el 20 Minutos porque el medio así lo ha decidido, unilateralmente. El propio humorista gráfico lo hizo público en Twitter poco antes de que empezara a correr como la pólvora por Twitter una viñeta de él en la que denunciaba la violencia policial en España, como motivo del fin de esa relación. De hecho, esa viñeta corrió más que la propia realidad: De las Heras explica que ese dibujo salió en Interviú, donde sigue publicando.

Repetir las ideas

En esta misma columna les traje ejemplos imaginativos y estupendos de páginas web que sortearon la prohibición española para informar de los detalles del referéndum del 1 de octubre. Momento en el que, a los hechos me remito, a los diseñadores del procés se les agotaron las ideas. La deriva les lleva ahora a repetir esquemas sin gracia (ni éxito), para ver si repiten también acierto, por ejemplo, con la web president.exili.eu, anunciada por Pilar Rahola en Twitter.

Lo dicen hasta los suyos

No exagerábamos cuando comparábamos la intervención de Pablo Iglesias en Podemos en Catalunya con el 155 en el Govern: el secretario general del partido morado allí, al que quieren cargarse en Madrid, también lo hace: se siente intervenido y rechaza la convocatoria de unas elecciones (internas) para mover la silla a quien ahora gobierna el partido. Lo que sucede en Podem es el síntoma de lo que pasa en los partidos sin ideología y con líderes promovidos a golpe de popularidad.