Otro preso vasco

Iñaki Urdangarín parece que entrará definitivamente en la cárcel. Solo falta que solicite el traslado a una prisión suiza para estar cerca de su familia, o el indulto, o un recurso a Europa, y que le caiga alguna medida de gracia para que el serial tragicómico sea ya completo. De momento, la cosa va bien: un delincuente entrará en prisión, como corresponde. Y los pesados del “y Urdangarín en su casa” estarán callados durante un tiempo. Pero España deja poco espacio para la esperanza: veremos qué y cómo cumple esos cinco años de condena y, sobre todo, veremos a Juan Carlos en la calle.

Camps, ese buen tío

No sé si Francisco Camps es un buen tío, como asegura Arcadi Espada en su libro sobre el expresidente valenciano, ni lo voy a saber: con la cantidad de novelas que tengo en cola no voy a perder el tiempo con tonterías. Lo que sí sé es lo que dice el juez que ha emitido otra sentencia condenatoria contra la financiación ilegal del PP, José Manuel Vázquez: “No puede omitir este juzgador que varios de los acusados han apuntado la existencia de otras responsabilidades en concreto los Sres. Fco. Camps y Víctor Campos, pero es jurídicamente imposible emitir pronunciamiento alguno”.

Un país mejor

Pasamos de la actualidad de los juzgados a la política y social para asegurar que estamos haciendo un país mejor: el ofrecimiento de Urkullu de acoger a parte de las más de 600 personas atrapadas en un barco a la deriva en el Mediterráneo después de que Pedro Sánchez se mostrara dispuesto a que el mismo atracara en España, es una gran noticia. No podemos seguir mirando para otro lado: tenemos que hacer de la solidaridad la norma, de la humanidad lo habitual, y este tipo de gestos nos ayudan a familiarizarnos con lo que somos: acogedores y colaboradores.

Con personas no tan buenas

En Euskadi no todos abren los brazos cuando es necesario: Yolanda Couceiro, hostelera, periodista, expresidenta de “España y Libertad” y con más de 30.000 seguidores hoy en Twitter, está en su derecho de protestar en esta red social ante la decisión de no dejar morir a más de 600 personas en el mar. Y lo hace: “629 INMIGRANTES A VIVIR DEL CUENTO. Ya sabes para que pagas impuestos. A DISFRUTAR DE LO VOTADO GAÑANES!!!!!!!” (sic) es solo uno de los mensajes que ha lanzado para pedir poner primero a los españoles. Sí, esta gente tiene éxito en Twitter.

Es necesario desmontar los bulos

Posiblemente a Couceiro no le interese el texto de Pepo Jiménez en Vozpópuli en el que desmonta los mitos en los que, precisamente, se apoya la extrema derecha: no hay efecto llamada (los refugiados e emigrantes van a intentar seguir huyendo de su muerte y miseria); no reciben “paguitas” por tocar suelo vasco o español, y si lo hacen como otro ciudadano son de la misma cuantía; un inmigrante integrado, que trabaja y cotiza, aporta más que recibe (como cualquiera); y el argumento: “Pues acógelo en tu casa” retrata y desacredita a quien lo esgrime.

Llarena, déjalo

Xavier Sardà, que ha dejado claro varias veces que independentista no es, escribió una columna en El Periódico (accesible en su web) que firmaría no ya cualquier nacionalista, sino cualquier persona con un poco de sensibilidad y los ojos abiertos. Sardà viene a pedir a Pablo Llanera que pare, a la justicia que sea justa y a los medios que nos fijemos en que el mismo gobierno que disputa si hubo o no malversación el 1 de octubre está “hasta las cejas de casos de corrupción”.

El amarillo no agrede

Salta a la vista, pero la pieza de Magnet sobre cómo no tiene ninguna justificación retirar camisetas o bufandas amarillas a los aficionados del FC Barcelona, hay que leerla: los jueces han dicho que un abucheo o un silbido son formas pacíficas de protesta, UEFA y FIFA solo regulan los mensajes que emiten los jugadores en el terreno de juego (levantándose la camiseta, por ejemplo), no el público en la grada y, por supuesto, no había motivo justificado para requisar prendas de ese color.

Faltaba Fariña

La cuenta en Twitter de la editorial, Libros del KO, también lo recordaba, pero los más expresivos fueron los de Jot Down Magazine: “Falta ‘Fariña’ en Sant Jordi. Que no se nos olvide”. Así es: con la serie en un momento estupendo de trama y audiencia, Fariña habría sido este 23 de abril uno de los libros más demandados y regalados, pero la censura funciona, ¡vaya que sí lo hace!, y la editorial y el autor están perdiendo muchísimo dinero que les permitiría seguir investigando.

¡Que no se nos pase!

Ni el gran problema catalán ni sus expresiones más sonrojantes (o así deberían de ser) para España como la prohibición de camisetas o bufandas amarillas, ni el desastre judicial de Fariña, ni otros casos que seguimos como el de Altsasu o “la manda” deben hacer que perdamos de vista que “la policía nacional descubre que el Gobierno murciano del PP colaboró para que ACS consiguiera rendimientos del 60.000% desplazando todos los costes y riesgos a las arcas públicas” (El Confidencial).

La Infanta lista

Cristina de Borbón siempre había sido considerada más inteligente que su hermana hasta que ella misma prefirió quedar ante el juez y la sociedad española como una mujer incapaz de leer lo que firmaba y que hacía caso a su marido sumisamente. Ahora sabemos, además, que Elena de Borbón cobra casi el doble que su hermana (300.000 contra 170.000) por un trabajo equiparable, cada una en una Fundación, y lleva una vida mucho más tranquila (siempre que Froilán se lo permita).

No contribuyamos

La turba ha revivido gracias a Internet. En el caso del supuesto asesinato de Gabriel Cruz, es evidente: mensajes de WhatsApp, tuits y textos o fotos en Facebook absolutamente falsos (como que con un número de “likes” la justicia será más severa), y una agresividad que ha regado la impunidad del anonimato. Hoy cualquiera puede decir lo que le dé la gana, amenazar, insultar y dar por cierto lo que cualquier descerebrado o irresponsable diga. Qué valioso es saber quedarse callado.

Innenarity en estado puro

Siempre es interesante escuchar o leer a Innenarity. En Letras Libres recogen una entrevista al filósofo, que acaba de publicar “Política para Perplejos”, solo con sus reflexiones acompañadas de titulares sencillos. Así apreciamos mejor las dudas y los atisbos de certeza de un hombre informado y que reflexiona. Sobre Internet, por cierto, también tiene una idea apreciable: “Se ha convertido en una cámara de eco capaz de confirmar nuestros prejuicios hasta unos extremos inéditos”.

Todas son empresas

Me gusta el titular de La Información porque creo que empieza excepcionalmente bien: “Esta empresa pretende revolucionar la educación (sin ofrecerte ningún título)”. Udemy ofrece vídeos con formaciones on-line y su modelo de negocio es haber hecho posible que incluyamos en el currículum lo que hemos aprendido viendo tutoriales de YouTube. Pero lo más importante es que se trata de una empresa, como en casi todas las iniciativas disruptivas que van de molonas.

Cristina podría estar deprimida

Cuando Pedro J. Ramírez anunció que su medio digital daría una vuelta al periodismo pensé que, si hay experiencias como la de Ignacio Escolar que han dado pasos interesantes, alguien con mucho dinero y experiencia podía ir más allá. Pero me temo que no va a ser el de El Español, de momento: su digital sigue siendo, entre otras cosas, cortesano, el rasgo del rancio español. Su preocupación por la depresión de Cristina de Borbón si Iñaki Urdangarín entra a la cárcel es muy significativa.

También esto es fútbol inglés

Somos muchos los que admiramos la Premier League porque vemos que han sabido conjugar el gran negocio del fútbol con las mejores tradiciones de este deporte incluso reduciendo la violencia en las gradas (también es cierto de que partían de niveles de violencia muy altos). Pero tiene sus miserias: en La Media Inglesa relatan muy bien las del West Ham, ese club que ha cambiado de barrio (eso en Londres es toda una traición) y de estilo por marketing, y ha hundido a una hinchada.

¿Y para los demás, Patxi?

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Suscribo cada línea de la propuesta que ha hecho Patxi López a los socialistas para que los partidarios de los proyectos del propio López, Díaz y Sánchez, debatan en Internet de un modo constructivo. Ojala hubiera dado esas mismas recomendaciones a sus “activistas” en redes cuando fue lehendakari y candidato: anonimato, insultos, mentiras y trampas siguen formando hoy la dieta comunicativa de los pocos trolls que quedan en el PSE, movidos ya solo por sus propias obsesiones.

Podemos también nos presiona, ¿y?

Según la Asociación de la Prensa de Madrid, miembros de Podemos presionan a los periodistas y eso está mal. Es cierto, ¿y qué? Podemos, como cualquier otro partido político intenta que la prensa pase por su aro. ¿Sus formas son un poco agresivas? Bueno, peor lo llevan los que tienen que aguantar a Donlad Trump. Personalmente, celebro que cronistas parlamentarios en Madrid como Jorge Bustos, lejos de Podemos, también acepten esas presiones como parte del juego.

¿Cómo lo hace?

El problema es que Podemos intenta presionar (insisto, como todos los partidos del mundo) en público y en Twitter. Y es verdad que aporta una novedad que es el denominador común en las piezas de El Confidencial y El Independiente: muchos usuarios acríticos y anónimos dispuestos a zarandear a quien señalen Iglesias o Echenique. Pero antes también había trolls, y políticos con blogs que ponían nombres y apellidos de periodistas (el mío aparecía recurrentemente en el que escribía un concejal de Bilbao desde la oposición).

El mundo del toro, feliz

Si la bajada del llamado “IVA cultural” se consuma, entre los sectores que se verán beneficiados podremos encontrar al de la tauromaquia. Y no dudan en celebrarlo en la web Mundotoro.com, en la que recuerdan: “La bajada del IVA de las entradas taurinas era uno de los compromisos que PP y Ciudadanos acordaron en el pacto de investidura”. Mientras tanto, las cuotas de los trabajadores autónomos suben y el IVA de otros sectores se mantiene.

La Infanta Cristina es “la Eva”

No es un beneficio particular de la familia real: en la base de datos de la jurisprudencia española se modifican todos los nombres de las sentencias para preservar el anonimato de los sentenciados (o absueltos). Así, la infanta Cristina es “la Eva”, e Iñaki Urdangarín pasa a ser un tal “Julio” que consigue contratos por sus lazos con la Casa Real española. Me imagino que leer hoy la sentencia tiene que ser desternillante. Por suerte, está la hemeroteca para recordar qué y a quién se juzgó.

Gobernar con críticas es inevitable

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Espero que Ada Colau, por lo menos, se haya sorprendido cuando haya recibido el tuit de @Txell, una catalana que le ha enviado una imagen de su factura del agua en Barcelona: 0,91 € de consumo que suponen un pago de 59,54 €. ¿Por qué? Por el abono de diferentes tasas e impuestos. Ese abono de impuestos es necesario, por supuesto, pero sirve para recrudecer una realidad. ¿Qué puede hacer Colau? Exactamente lo mismo que todos sus predecesores y el resto de alcaldes: administrar y olvidar cierta demagogia.

¡Que me borren el rastro!

Algo parecido habrá exclamado la Infanta Cristina en este plazo que se está dando para pensar qué va a hacer, una vez absuelta del “Caso Nóos”. Primero, estaría pensando en cómo lograr que le reconozcan la injusticia de haber sido encausada. Y después, querría ejercer su “derecho al olvido” haciendo que Google borre su rastro relacionado con esta causa. ¿Puede hacerlo? Con tiempo y dinero, seguramente sí. Así que la memoria y todo lo que podamos escribir al respecto, son importantes.

Sí, es Europa

La frase de Santi Palacios, convertida en tuit, es de las que te deja helado: “Ninguna persona de mi generación podía imaginar que en 2017 íbamos a estar tomando imágenes así en Europa”. Pero más frío pasan las miles de personas que se amontonan en campos de refugiados de Europa a las que Palacios ha fotografiado. En la revista 5W nos enseñan imágenes de esta Europa (Europa, sí, Europa) que no acoge y sí encoge corazones, hombros y modelos solidarios.

Lo importante no va en un “meme”

Leyendo a Luis Arroyo (siempre imprescindible) uno se entera de que los “memes” no nacieron con Internet: el término lo inventó Richard Dawkins en 1977 para referirse a la mínima expresión de la cultura. Y ha sido subvertido, claro, en este tiempo de Internet en el que todo es banalizado. Y eso es precisamente lo que denuncia Arroyo, que tenemos la herramienta más increíble para transmitir información valiosa y la llenamos de tonterías… Y mentiras, añado yo.

Euskadi, en tecnología 3D de hace 80 años

La historia que hemos encontrado en El Confidencial no tiene desperdicio: el investigador Josu Martínez había oído hablar de una película, “Euskadi”, estrenada en 1937 (año de los bombardeos sobre nuestro país) pero en 3D, que llegó a considerar un rumor porque no lograba dar con ella… Hasta que encontró una carta de 1983 de su director, René Le Hénaff, en la que confirmaba la existencia de la cinta en la que grabó tradiciones folclóricas y culturales de Iparralde con una tecnología excepcional. La veremos en Loraldia, en Bilbao.