Es robo y pillaje

No son descontentos, no son negacionistas, tampoco son vándalos: quienes golpean las lunas de los negocios y los saquean se dedican al robo y al pillaje, y como tal hay que tratarlos. Si empezamos (y empezamos por la prensa) a hablar de jóvenes cansados de las restricciones, malo. Pero peor lo hacen quienes son templados porque saben que han cebado a esos monstruos y que el descontento o “el conflicto” son sus únicas bazas políticas. ¿Cómo no acordarse de esos políticos que pedían dejar a la chavalada que camele como quiera? Algunos siempre han preferido dar munición antes que soluciones.

¿Qué les diferencia?

Ante las restricciones en el ocio nocturno, violencia. Ante las restricciones en la tauromaquia, violencia. Esa respuesta, que es la misma, la ofrecen desde los dos extremos del abanico político al momento que todas y todos, estamos sufriendo sin excepción: la izquierda, ya saben, progre y guay, no levantan la voz ante el vandalismo porque lo cebaron. La derecha española sí lo hace contra quien anuncia que el funeral por una fiesta taurina que si no está muerta agoniza. Mr. Insustancial denuncia el tuit de Rocío Monasterio en el que, rifle en mano, anuncia su defensa de “la cultura española” y, cómo no, de “la libertad”.

“La tontificación”

Quiero pensar que Pedro Vallín sabe que se equivocó cuando metió en el mismo saco a todas y todos los contertulios “de mesa camilla”, como él mismo los llama. Pero es innegable que existe el fenómeno que identifica con esa normalización de la difusión de la opinión política sin mecanismos de corrección: “La tontificación, fenómeno por el que personas cultas y formadas profieren memeces con gran solemnidad y ademanes”. Lo hace después de que Paco Marhuenda, el director de un periódico, dijese en La Sexta que “los toros forman parte de la cultura. Disney ha hecho daño haciendo que los animales hablen”.

Bien hecho

Me hago viejo y la defensa o el ataque por sistema cada vez me da más pereza, especialmente, en mí. Así que cada vez describo con más satisfacción los aciertos de las opciones políticas que no son las mías, como la del gobierno español en la salida de personal propio y civiles de Afganistán, colaborando, además, con el estadounidense, que es el que corta el bacalao allí. El PP infló mucho el globo de la inacción y puso en bandeja al PSOE triunfar con una buena reacción, lo que ha sucedido. Ahora, los de Casado guardan silencio (salvo los hooligans que están para meter ruido) y, lo más importante, las personas se salvan.

Por supuesto que no es una casualidad

Que Froilán y Victoria Federica de Marichalar, nietos y sobrinos de reyes de España, hayan sido multados en menos media hora por dejar mal aparcados sus coches (en ambos casos, un Audi Q3 de 40.000 € para arriba) en Marbella (el de él, en un paso de peatones; el de ella, en una parada de taxi), no es una casualidad: es otra muestra de la impunidad con la que la familia Borbón vive. Por supuesto, estamos ante un síntoma, el de “a mí me da lo mismo” por partida doble: por cayetanos y por borbones. Pero ese pasotismo no es la dolencia: la enfermedad es su sensación de que no va a pasarles nada.

¡Ya le gustaría!

No entiendo el empeño de Arnaldo Otegi en tomarnos por tontos: es evidente que hace 40 años él no estaba en el bando que agrupaba los valores que sirvieron para derrotar a ETA y dar pie a una Euskadi que necesita todavía reconciliarse consigo misma. Pero esa reconciliación tardará más y será en peores condiciones en función del engaño que quiere colocarnos la izquierda abertzale. Y si lo que quiso decir es lo que apunta Iñaki García Arrizabalaga, que Otegi está orgulloso de dónde estaba y qué hacía 40 años atrás, el mensaje es todavía peor. Son quienes le arropan los primeros que deberían pedirle explicaciones.

Los de hace 40 años, hoy

Los que hace 40 años estaban en el bando de los derrotados, el de ETA, hoy se dividen: algunos como Otegi quieren hacernos creer que aquello nunca pasó o no pasó como todos recordamos. Y otros se empeñan en seguir demostrando su miseria humana dañando la placa en recuerdo a Gregorio Ordóñez, como denunciaba el alcalde de Donostia, Eneko Goia. ¿Qué tienen en el alma los que destruyen esos recuerdos a víctimas injustamente asesinadas? Son como quienes arrancan placas en memoria de las víctimas del golpe de estado franquistas: fachas. Y sus valores no son los de la mayoría.

Otro ejemplo

Como siempre, Javier Vizcaíno hacía un análisis más fino de la situación: la secuencia de Ortega Smith disparando como un Gijoe ha servido para esclarecer su pasado (no fue boina verde, solo hizo la mili) y para ver cómo algunos de los que jaleaban vídeos de encapuchados en bosques verdes haciendo prácticas de tiro hoy se ponen exquisitos ante el fascista de Vox. Me repito, lo sé, pero es que la verdad es tozuda: son la misma mierda unos y otros, sujetapistolas que imaginan que el enemigo es el que piensa diferente, y que se creen además con más carga moral que el resto. Qué equivocados están.

Mintegi protesta

Volviendo a la entrevista a Arnaldo Otegi que ha dado pie para el resto de fascistadas, resulta muy significativo que Laura Mintegi afeara al líder de Bildu su ocupación del espacio la semana en la que Maddalen Iriarte ha sido designada candidata a lehendakari. Mintegi ya encabezó una candidatura de la izquierda abertzale, esa izquierda abertzale en la que los que mandan se llamaban y se llaman Arnaldo, Arkaitz, Rufi, Joseba, Pernando¸ Oskar… Y Eba Blanco, es cierto, pero con un peso específico muchísimo menor. Luego agitarán la bandera del feminismo, pero la igualdad se demuestra tomando decisiones y no saliendo en fotos.

La gran noticia

Más allá de la rociada fascistoide (aunque ninguno de ellos se tenga como tal), la noticia del día sin duda son los 500.000 € de dinero público que, según la SER, habrían sido desviados desde el ministerio español de Interior que dirigía Jorge Fernández Díaz para intentar mitigar el escándalo de Luis Bárcenas y los pagos en “B” a políticos del PP. Una vez más, dinero de todos para beneficio de unos pocos, en este caso, por partida doble, triple… O a saber. El comisario Villarejo, cómo no, aparece entre los beneficiados por esa operación ya que contaron con sus servicios para recuperar y destruir pruebas de Bárcenas contra el PP.

Murias, bien pero mal

El Euskadi Murias está haciendo una gran Vuelta que le está permitiendo meter los codos entre la afición y las instituciones. El acto vandálico contra sus vehículos, además, ha levantado un clamor de apoyo al equipo en el mundo del ciclismo, pero curiosamente el Murias no ha denunciado las pintadas en sus redes sociales. La locuacidad del Murias para pedir subvenciones con el dinero de todos les faltó ayer para señalar lo obvio, aunque solo fuera con un retuit a alguno de sus corredores. Se equivocan si creen que esa denuncia les arrebataría apoyo txirrindulari: quien ha hecho las pintadas no es aficionado al ciclismo.

Vamos sobrados

Euskadi tiene mejor paisaje natural y arquitectónico que humano. Es una realidad que tenemos que asumir. Entre nosotros hay gente que ha asesinado al que pensaba diferente y gente que les ha justificado. Entre nosotros hay gente que cree, además, que estamos dando demasiada relevancia a actos vandálicos contra placas en Donostia que recuerdan a los asesinados… Y que hubo asesinos con sangre fría pero sin razón alguna. Y hay quienes callan porque quienes ahora atacan la memoria pueden ser chavales a los que han aleccionado, díscolos, nostálgicos de la violencia o las tres cosas a la vez.

Y encima, vienen de fuera

Estaba buscando el tuit de Borja Sémper para ilustrar este párrafo sobre los tres lazos amarillos que han aparecido pintados en la obra de Chillida, también en Donostia, cuando me he topado con este, mucho más expresivo y representativo de lo que pienso: “Y EL TONT@ Q HA PINTADO EL PEINE DE LOS VIENTOS Q SE VAYA A LA MIERDA TB” (sic). No hace falta añadir mucho más. A los tontos que criamos en Euskadi, incapaces de respetar la memoria de los asesinados, tenemos que sumar los que vienen de fuera incapaces de comprender que una reivindicación justa necesita actuaciones adecuadas.

Pero, ¿qué han hecho durante tanto tiempo?

Sinceramente, no sabía cómo titular este párrafo, así que he preferido dejarlo en una pregunta abierta porque no llego a entender que los representantes de dos partidos políticos que quieren llegar a un acuerdo hayan estado cuatro o cinco horas negociando sin avances. Es imposible. Eso solo puede significar que no quieren llegar a un acuerdo, realmente, o que todos en esa mesa eran incapaces de hacer la tarea que les habían encomendado votantes y superiores directos. Igual ya va llegando la hora de que dejen de tomarnos el pelo: lo de PSOE y Podemos es imposible ahora como lo será en noviembre.

Hoy también hay fútbol de Primera

Juegan con peores horarios, en estadios más pequeños, cobran mucho menos y tienen una cobertura mediática mucho menor, pero juegan igual de bien que cualquier equipo de chicos, juegan en Primera porque se lo han ganado, y merecen nuestra atención porque se la han peleado. Son ellas, las jugadoras de la Liga Iberdrola, que no necesitan paternalismos ni favores, solo justicia para que en su web no aparezca lo primero un jugador (aunque sea Iniesta), para que haya un Transfermarkt con sus perfiles, blogs especializados, su hueco en la prensa deportiva y generalista y, por supuesto, su álbum de cromos.

Por donde han venido

Me gusta ver turistas en Euskadi, me alegra ver a profesionales descubrir la ciudad después de un congreso, me enorgullece saber que han venido de instituciones lejanas o cercanas a conocer cómo hemos salido de la violencia y las sucesivas crisis económicas. Pero no soporto ni soporté que vengan a utilizarnos, a decirnos lo que nos pasa y qué tenemos que hacer, y a exhibirnos como aborígenes incivilizados. Así que, por mí, hoy Albert Rivera puede irse por donde ha venido y, a poder ser, con la mayor indiferencia de las y los Ugaotarras, pero seguro que hay alguno que hace justo lo que Rivera espera y desea.

Vox y los derechos de los otros

Ocupar el que tradicionalmente ha sido tu sitio en el Congreso es un derecho adquirido, y cobrar por usar una foto que has sacado, un derecho laboral, que es bastante más grave. Vox ha empezado la legislatura sentándose donde le correspondería al PSOE por cortesía parlamentaria, y Santiago Abascal, utilizando una foto de Dani Gago (fotógrafo de Podemos en el Congreso, para más retranca) sin pagarla que se sepa ni atribuirla (eso es más palpable). Un comienzo prometedor para ver lo que les importan los demás y que viene a confirmar eso de que a veces los ogros parecen ogros.

Algunos no se dejan tomar por tontos

El periodista madrileño Ícaro Moyano tiraba de sarcasmo para dejar claro que a él tampoco le gusta que otros le tomen por tonto: “Ya veréis el disgusto que se lleva Borja cuando se entere de quién gobierna en Andalucía”. Se refiere a Borja Sémper y al titular que el candidato a alcalde de Donostia dejaba en Eldiario.es: “Vox es un partido diametralmente opuesto a lo que representa el PP”. En efecto, el PP de Sémper es el mismo que alcanzó un acuerdo con Vox para gobernar en Andalucía, y el jefe de Sémper, Pablo Casado, hace solo unas semanas cerraba la campaña del PP ofreciendo ministerios a Vox.

El periodismo que iba a cambiar el periodismo

Miren, todos hacemos lo que podemos en este oficio: los medios luchan por seguir en antena o en las imprentas otro año, y los periodistas peleamos por mantener nuestros puestos de trabajo para seguir pagando hipotecas, cuentas en el Eroski y, de vez en cuando, unas cervezas. Y si hay que hablarles de Twitter otro día lo haremos. Pero, ¡líbrenme de directores como Pedro J. Ramírez que se pasaron meses asegurando que sus medios iban a revolucionar el periodismo y hoy informan de que hay Apps que convierten nuestros rostros en caras de perros y gatos! Que no pasa nada… Si no lo has dicho todo antes.

Así es

Josu Eguren tuiteaba hace un par de días con su habitual mala uva que “si una serie, libro o película no aguantan un spoiler es que son una puta mierda. Y ahí está ‘Psicosis’ como prueba eterna de esa afirmación”, y solo pude rendirme a la evidencia. Nunca he visto un capítulo de Juego de Tronos y ahora que conozco el final y, sobre todo, que todo se basaba en la expectativa de una sarracina maniquea en la que ganaran los buenos (así escrito promete poco), dudo de que empiece a hacerlo. Invertiré mi tiempo en cosas igual de mainstream pero disfrutando del camino, que es lo que siempre me ha gustado.

Pensemos en los presos

La guerra de los lazos amarillos poco tiene que ver ya con los políticos presos que motivaron su utilización, y eso es una victoria de quien quiere que sigan en las cárceles y que dejemos de ver los famosos lazos amarillos. Por eso creo que son las personas responsables de la difusión de este símbolo lo son también el buen uso del mismo también por parte de quienes tienen las mejores intenciones: que nadie se olvide de los detenidos ni de la injusticia que con ellos se está cometiendo. No podemos entrar en el juego de la batalla de colores que pretende la oposición en Catalunya.

¿A quién le importan más los colores?

Solo hay que ver lo que prepara la liga de Tebas para el Girona-Barcelona que, si nadie lo impide, se jugará en Miami: un montón de iconografía española impuesta a buena parte de los aficionados catalanes que se desplacen a EE.UU. a seguir a sus equipos. La elección de un derby catalán y la imposición de las banderas españolas no puede ser una casualidad. Y si lo es, es porque el fútbol no solo enriquece a los más pillos, también regala capacidad de decisión a los menos listos. La de los colores es una batalla en la que se sienten cómodos los que tienen un estado, no les hagamos el juego.

Hablando de EE.UU.

Se trata de un país extremadamente liberal, tanto que unas empresas tienen capacidad para cubrir de oro a la liga española (ya de por sí empapelada de billetes) pero el estado no garantiza los cuidados de su población: un consultor de 87 años ha tenido que subirse a un camión para pagar el tratamiento de su mujer, ya que con su edad es el único sector en el que veía posibilidades de crecimiento económico. No es el único: más de 250.000 personas jubiladas mayores de 85 años han regresado a algún tipo de oficio en el último año allí, la mayoría obligadas por la falta de recursos.

Doblejetas

Miren, si una persona decide convertir una vivienda que no usa en un piso de alquiler, bien permanente, bien ocasional (o turístico), y se hace cargo de sus responsabilidades como casero en la comunidad de vecinos y pagando los impuestos que le tocan, me parece bien. Pero lo que me parece en todo punto censurable es que algunos pretendan hacer negocio con las viviendas de VPO que entre todos les hemos pagado (al menos, en parte). Así que las medidas que toman en Donostia para vigilar ese negocio con vivienda pública, y que cuentan en El Confidencial, me parecen estupendas.

El diésel ya está muerto

Y lo hemos matado los consumidores: casi nadie va a comprar ya un vehículo que consuma diésel, y hasta quienes lo han adquirido recientemente están haciendo ya cálculos para cambiar de motorización. El diésel ya está muerto porque el mercado, es decir: nosotros, no lo queremos, y aunque las autoridades reculen, la etiqueta de “obsoleto” y, sobre todo, la de “más caro”, ya están puestas. ¿Esto es bueno? ¿Es malo? ¿Para el planeta? ¿Para la industria? Tengo la sensación de que no nos lo han explicado bien pero alguien ha logrado su objetivo tocando la tecla adecuada.