Casado e Inda, de excursión a Altsasu

“Altsasu es tan peligroso que siendo de extrema derecha puedes ir al Koxka, grabar una entrevista sin permiso, reírte del dolor de un pueblo y por supuesto hacer política del odio y te vuelves a casa con tu jeta cemento y todos tus dientes”. El tuit de Miren Arizaleta resume perfectamente el oportunismo sin vergüenza de Pablo Casado y Eduardo Inda, entrando en el tristemente conocido bar Koxka de Altsasu a grabar una entrevista sin pedir permiso. Del director de OK Diario ya nadie espera periodismo, pero al que define especialmente esta provocación es al líder del PP, que exhibe una bajísima altura política y moral.

Por si quedaban dudas

La pobreza de Pablo Casado, moral, política y ética no dejan ya lugar a dudas, pero por si acaso alguien guardaba un poco de esperanza en el peor líder político que uno recuerda, el del PP se no tiene ningún problema en preguntarse esto entre emoticonos: “¿Por qué la izquierda tan ‘progresista’ no quiere apoyar la Prisión Permanente Revisable para los secuestros de mujeres que acaban en asesinato o los asesinatos después de una violación? Menos demagogia y más hacer”. Precisamente eso es lo que “hace” él: “Demagogia”. La cadena perpetua es retrógrada por definición, como Casado.

Más a la derecha, la pared

Casado fija el nivel político español por lo bajo, en un escenario en el que también está la extrema derecha y los que tienen que gestionar la herencia de ETA en su casa, que ya es decir. Volviendo a Vox, el periodista Ángel Munarriz ha hecho un resumen de sus primeros pasos en el parlamento de Andalucía: suele votar junto a PP y Ciudadanos siempre que no tenga la oportunidad de marcar perfil extremo criticando la gratuidad de las matrículas universitarias o pretendiendo involucionar en Cultura y Ciencia. También destaca Munarriz las veces que pide cosas que no competen al Parlamento.

Girauta, haciéndose el loco

De un tipo que apoyaba a los peones negros, que no tuvieron empacho en usar las imágenes de las víctimas del 11-M sin el permiso de los familiares para seguir relacionando el atentado con ETA, uno no espera honestidad, precisamente. Pero si algo no puede permitirse un político es tomar por tonta a la ciudadanía: “¿Desde cuándo gobernamos en Andalucía con Vox?”, pregunta Girauta en Twitter como respuesta a quien le recuerda que lo hace. En Ciudadanos no pueden pretender que, por mucho que se crean su colección de maquillajes para tapar lo evidente, lo tengamos que hacer también los demás.

La dignidad de Maribel

Paso de Casado, de Girauta y del caballo blanco de Abascal. Por muy chulitos que se pongan ninguno de estos nos va a enseñar lo que es la dignidad como lo han hecho Maribel Tellaetxe y su familia. Su lucha por conseguir una muerte digna ha sido la de todos los que, como quienes querían a Maribel, queremos vivir pero también morir en paz. Su dignidad, su valentía, su paso al frente tiene que permanecer en nuestra memoria, porque desde un rincón de Portugalete también se pueden emprender grandes luchas gracias a un amor igual de grande. Descansa, Maribel. Nos toca.

La rebelión de “los tuiters”

Cuando Javier Zaragoza le pregunta a Jordi Sánchez: “¿Usted recuerda cuántos ‘tuiters’ envió animando a la protesta?”, como bien recogen en el Huffington Post, muestra un gran desconocimiento de lo que es Twitter. Su carencia, como la de cualquiera, no debería de acarrear ningún problema. Lo malo es que es el fiscal de un juicio en el que los políticos catalanes llevan más de un año en prisión preventiva. Si se lo han explicado mal, peor. Pero si sabe que tuitear y retuitear es una acción menor y por eso pide quince años de cárcel, la gravedad de lo que estamos viendo sería máxima.

El presidente que encarcela

En España los jueces y los fiscales no están siendo benevolentes, precisamente, con los políticos catalanes nacionalistas. Pero a Santiago Abascal todo le parece poco: su primera medida si alcanza la presidencia del gobierno español será detener a Quim Torra. Así se lo ha comunicado a la cúpula de Vox, según OK Diario. Una usuaria de Twitter que solo aclara que se llama Ana es la que mejor resume el disparate: “Presidentes que emiten órdenes de detención. No hay más preguntas”. Así sería la España de Abascal, así actúan los fascistas. El silogismo se hace solo.

¿Qué le habrán hecho en Toledo?

Girauta ha dicho en el Congreso que no quiere seguir siendo catalán, que él es, desde esta semana, de Toledo. Eso que gana la ciudadanía catalana y eso que pierde la toledana. Porque Girauta, siendo muy concisos, es un impresentable. Solo hay que ver cómo repetía desde su escaño: “¿Qué dices?” a Jordi Xuclà, del PDeCat, que le respondió desde el estrado. Solo hay que recordar su apoyo a los peones negros, que usaron las imágenes de las víctimas del 11-M para mantener viva la conspiración de Aznar de aquel atentado lo había perpetrado ETA. Solo hay que ver sus fotos con Espada, Sostres y Herrera.

Errejón sigue desgastando a Podemos

Con la campaña para las elecciones generales ya casi encima y todos los partidos poniendo en marcha la maquinaria, va Errejón y le birla a Iglesias el apoyo de los ecologistas de Equo en Madrid. Ayer mismo, cuando Garzón prestaba su imagen y las siglas de su partido a la enésima pantomima, Errejón anunciaba la inclusión de Inés Sabanés y el apoyo de los verdes a su candidatura. El ex número dos de los morados tiene derecho a hacer su lista, pero el centrifugado que ha decidido activar le retrata y no le reporta el valor que en su cabeza cree que esta sangría incesante tiene.

Sí, también es un teléfono

Hace tiempo que en las presentaciones de smartphones se incide en la pantalla, la cámara, el número de núcleos (como si la mayoría supiéramos lo que significa tener uno o tener 32), la velocidad del procesador y, los menos, la duración de la batería (lo que más nos importa, por cierto). Hace tiempo que nadie nos recuerda que los cacharros con los que ya hacemos todo, hasta ir al baño, son también teléfonos. Pero, ¿para qué hacerlo? “Sólo el 14% de las personas emplea el móvil para llamar”, leemos en Trecebits. El mismo estudio destaca que “los usuarios necesitan estar conectados todo el tiempo”.

La posverdad según Girauta

Juan Carlos Girauta nos toma por tontos, como todos los que quieren construir esa posverdad por medio de mentiras que algunos admiten para reforzar sus posiciones. En este caso, se quejó de que era “calumnia y demagogia” su pertenencia a los peones negros, esos que se manifestaban pidiendo que se diera por bueno que el 11-M lo hizo ETA. En El Diario han sacado un vídeo de él en una manifestación de ese grupo y declaraciones a favor de esta tesis aunque acataba la sentencia que decía que el atentado nada tenía que ver con ETA. Ahora, Girauta quiere borrar su pasado pero no va a poder.

¡Pero si has votado con ellos, Pablo!

Otro que quiere imponernos su posverdad es Pablo Casado, que después de tumbar junto a Ciudadanos, Bildu, PDeCat y ERC los presupuestos del gobierno español antes incluso de discutirlos, tuiteaba: “Hoy en las Cortes españolas se ha producido una moción de censura de facto contra Sánchez. A través de la movilización ciudadana hemos conseguido revertir las negociaciones que se estaban produciendo con los secesionistas. Han negociado y estaban dispuestos a seguir haciéndolo”. ¡Pero si es el PP el que ha votado con los catalanes y Bildu para tumbar a Pedro Sánchez!

¿Por qué?

Pedro Vallín ha escrito en Twitter un hilo imprescindible sobre ese voto en contra de PDeCat y ERC. Se lo resumo al máximo: solo Puigdemont (y seguramente Torra) creen que cuanto peor, mejor. Junqueras, el resto de presos y la mayoría de los políticos catalanes saben que la situación sería más favorable con Sánchez. Pero ambos partidos han acabado tumbándole por el mismo motivo: el miedo a explicar a la ciudadanía catalana que esto se ha acabado, que la independencia nunca se declaró, que tienen que negociar dentro de España y ser posibilistas, a contar la verdad.

“Hasta los c… de todos nosotros”

Otro cronista de La Vanguardia, Enric Juliana, recordaba ayer en Twitter a Estanislau Figeras, presidente de la Primera República que acabó dimitiendo y expresando: “Estoy hasta los cojones de todos nosotros”. Lo hacía previendo que hoy puede que sepamos la fecha de las próximas elecciones. Sea la que sea, con la cita del 26 de mayo confirmada, propios y extraños van a acabar hartos de la política española y de los políticos incapaces de ponerse de acuerdo, y esto va a afectar a unas elecciones que nada tienen que ver con eso, como son las municipales, forales y europeas.

Lo moderno es atacar una librería

Lo moderno no es montar una cafetería para tomar cereales con leche, ni poner en marcha una librería para editoriales y escritores alternativos, lo más moderno es atacarlo, quejarse, hablar de gentrificación mientras miras de reojo el móvil para ver si te han dado el OK para el piso que has contratado en Airbnb para Semana Santa. Lo moderno es pintar “moríos, modernos” en una librería que ya ha sido atacada (sí, “atacada”) con pintura y carteles anteriormente. Lo liberador, lo transgresor, lo que es más moderno que lo moderno es, como han leído, atemorizar a quien vende libros.

Lo principal y lo básico

Podemos cuestionar el proceso porque hubo nulidades. Podemos hablar largo y tendido de las diferencias de criterio y exigencia en el cumplimiento de penas económicas en España. Podemos disentir, por supuesto, en lo informativo y en lo opinativo. Podemos hacernos favores y darnos patadas en la espinilla. Pero no podemos separarnos ni un milímetro cuando nos toca a los periodistas apretar las filas para reclamar una libertad de prensa efectiva, que no esté condicionada por expolios, amenazas o presiones. Por eso me sumo al apoyo casi unánime a Iñaki Soto y los compañeros y compañeras de Gara.

Máster en la Rey Juan Carlos

Ya sabemos todos que Pablo Casado es uno de los mejores para personificar eso de que “la ignorancia es atrevida”. Y lo sabemos antes incluso de que se convirtiera en el gran jefe del PP. De hecho, estoy seguro de que también lo percibía Rajoy. Por si alguien no se había dado cuenta se empeña en recordárnoslo: su última metedura de pata es aún más grave para un licenciado en derecho, ya que ni siquiera sabía que las “faltas” desaparecieron del código penal en 2015, en aquella famosa reforma que aprobó la mayoría absoluta del PP con UPN en la que introdujeron la prisión permanente revisable.

Liberales en lo económico y lo reflexivo

España tiene un problema con los liberales porque todos esos jóvenes que muestran orgullosos en redes sociales su pertenencia al PP, Ciudadanos o Vox, se definen justamente así: liberales. Y porque los no tan jóvenes son, además de liberales, tan casposos como capciosos. Lo es Rivera y lo es Girauta, por ejemplo, que ha subido a su Twitter un vídeo lleno de trampas y victimismo para apoyar a los ya famosos VTC de Uber y Cabify. Estos liberales, con argumentos del típico cuñado español del chiste, creen que la libertad de elección es apoyar a empresas que operan al margen de la regulación.

El Rey en Irak

La Casa Real española, que parece que no sirve para nada salvo para las atribuciones exclusivas que le reserva la Constitución, precisamente, para justificar su presencia y asignación de los presupuestos del Estado, nos ha intentado colar, una vez más, que el Rey de España ha hecho algo. En concreto, se ha desplazado a Irak coincidiendo con su cumpleaños “perfectamente camuflado con la alfombra, en su primera acción de riesgo: ver la televisión”, según Javier Durán, que ha clavado el sarcasmo. Pese a lo evidente, son muchos los medios cortesanos que se la han dejado colar.

Lo peor del fútbol

Me he guardado esta noticia hasta hoy porque no quería que lo peor del fútbol afectara en nada a la fiesta que vivimos el miércoles en Bilbao con la Copa. Pero, sí, del mismo modo que el periodismo más morboso e insensible también es periodismo, el espectáculo injustificable de Mestalla, con jugadores de Valencia y Getafe a hostia limpia, también forma parte del fútbol. Del mismo modo, por desgracia, también es parte indeseable del circo quien caldea el ambiente con declaraciones que no aportan nada al show o el deporte, o quien señala a equipos y aficiones.

Una política sin chistes

Entre un discurso político sin chistes y otro con chistes de cualquier tipo, me quedo con el primero. El sentido del humor y la creatividad nunca han sido dos de mis fuertes, de hecho, soy bastante conservador en casi todo, pero, miren, aquí sigo. Los que espero que no sigan son los aspirantes a humoristas, como bien tuitea Diego E. Barros, que están empleados como community managers de los partidos políticos o de algunas marcas comerciales. Que sí, que soy tan soso que hasta me parecen mal los emoticonos. Pero son Twitter y los chistes en Twitter los principales desencadenantes de la degradación de la política actual.

Políticos serios

Un buen amigo mío hace ya años que me advirtió: “Iker, divertido no es lo contrario de serio, es lo contrario de aburrido”, y solo he podido darle la razón en todo este tiempo. Es posible ser divertido: hemos visto a algunos políticos, empezando por Ortuzar y terminando por Rajoy, que con socarronería rebajan cierta tensión. Pero lo que no podemos permitirnos es políticos que no sean serios, como Girauta, que pide también menos chistes en política. Me parece bien, pero no que lo haga él, que no fue nada serio en su exigencia reiterada con los Peones Negros de que ETA participó en el 11-M.

¿Qué niños, Pablo?

Solo un ratito antes de que el PP lanzara el maloliente tuit con un niño pidiendo a los Reyes Magos que se llevaran a Pedro Sánchez como se habían llevado a Amy Winehouse, Pablo Casado clamaba en Twitter porque en Catalunya se usaba la cabalgata real, un evento destinado a niños, para repartir lazos amarillos. “Dejen en paz a los niños, dejen de adoctrinarles”, pedía el responsable del PP mientras alguien descargaba y el vídeo y lo cargaba en el espacio multimedia de Twitter pensando que ese niño, esa carta a los reyes y ese letal deseo eran una buena idea.

Nadie tiene la culpa

No quiero cargar las tintas contra el que tuitea aunque, por supuesto, tiene responsabilidad. Pero no más que Pablo Casado, que ha dado el OK a este estilo de comunicación, o que Isabel Díaz Ayuso, la responsable de Comunicación, que entiendo que será quien se la ha propuesto. La cadena de responsabilidad es importante, y echar balones fuera una canallada para con quien pica tecla y, al final, con quien lee. Si nadie quiere decir “esto es cosa mía” es que a nadie le importa lo que se escribe, lo que se lee ni quien lo hace. Comunicar es un medio, no el fin en sí mismo.

Igual hacen bien

Tengo claro que difundir ese vídeo en la cuenta de un partido político, por la forma chusca y el fondo intolerable, es un error. Un error que viene de una cadena de mando irresponsable y de una tendencia, la del “a ver quién es más bruto”, incomprensible. Pero no tengo tan claro que ese error, porque lo comete un partido político, tiene que encuadrarse en la libertad de expresión y no es denunciable jurídicamente. Así que, de saque, me parece bien que el gobierno emprenda medidas legales porque alguien tiene que parar esto. No podemos dejarlo correr otra vez.