La derecha

La izquierda vasca no abandona su mantra para señalar al PNV como un partido de derechas al mismo tiempo que “la derecha política y mediática” está “contra el PNV”, según Laura Arroyo en Diario Red, la web de noticias que ha puesto en marcha Pablo Iglesias desde su nuevo proyecto mediático. Y sigue: “Los actores del bloque reaccionario entienden que el PNV es hoy un enemigo al que toca atacar para que vuelvan al redil o bien para sacarlos de la ecuación por la vía del desgaste electoral”. Habla de “declaración de guerra” y enumera en su pieza las diferentes columnas que atacan a los nacionalistas desde tribunas (ultra)conservadoras.

Es insostenible

No es sostenible una economía en la que la o “el pequeño autónomo es una especie en extinción” (Pymes y Autónomos). Es lo que sucede en España y en Euskadi: “España ha perdido 6.167 autónomos entre el último mes de 2022 y marzo de 2023” por las dificultades ligadas a esta actividad en el presente y en el futuro: “¿Se puede vivir con una jubilación de un autónomo?”. Las y los trabajadores por cuenta propia reclamamos “igualdad” para evitar que “los jóvenes no quieren ser autónomos, y los mayores lo son, en su mayoría, porque no les queda otra opción”. Yo genero IVA, ¿cuál es tu superpoder?

Lo llevan dentro

Vox es el partido que con más brío defiende a las fuerzas armadas mientras su líder, Santiago Abascal, se libró de hacer la mili. El mismo que asegura que está en contra de los chiringuitos y vivió de uno gracias a Esperanza Aguirre. También le hemos visto clamar contra el sistema de partidos en España (lo que es bastante lógico en la ultraderecha) y, gracias a él, “Vox infla su fundación privada con siete millones de euros en cuatro años”. No es nada ilegal, pero en El Plural explican muy bien cómo factura la familia Ariza y cómo la fundación ha crecido en número de trabajadores para difundir un ideario afín, como corresponde, evidentemente.

Porque somos gilipollas

No discuto la capacidad de personas que no son del mundo de la gastronomía para formarse y conocer un sector concreto (chuletas, vino, cerveza…), y además para saber divulgar sus conocimientos y opiniones. Lo que sí me parece discutible es que haya tantas personas capaces de hacerlo. Todas esas cuentas en TikTok o Instagram (nadie se molesta en hacer un simple blog) que enseñan dónde comer o beber en vídeos rápidos son, en su mayoría, una basura. Hablemos claro. “¿Por qué nos fiamos de su criterio?”, preguntan en Público: porque somos gilipollas y no distinguimos a un experto de un chaval con un móvil.

La nueva moda

Intento escribir poco sobre tecnología en esta columna porque creo que no me corresponde: hay expertas y expertos en el periódico que saben mucho más que yo de dispositivos y, sobre todo, que lo explican mejor. Mi objetivo es poner a lectoras y lectores sobre la pista de temas, opiniones o contradicciones que veo cada día en Internet. Por ejemplo: la moda de los anillos inteligentes que mucha gente ya habrá hecho suya, especialmente quien más dinero tiene: son complementos imprescindibles en las grandes tecnológicas y líderes como Zuckerberg lucen el suyo. Básicamente, hace lo mismo que un reloj conectado al móvil pero sin pantalla.

Lo grave que es

Esta noticia en Público: “Vox retira los libros LGTBI+ del área infantil de la biblioteca municipal de Burriana”, no es una frikada ni es una cuestión, ni mucho menos, menor. Las niñas y los niños que empiezan a tener dudas sobre su sexualidad (cualquier sexualidad) necesitan ver que lo que sucede en su cuerpo, su mente y su corazón no es nada malo. Evidentemente, son pocas y pocos los niños que acudirán a una biblioteca pública a comprobarlo, pero esta coacción de Vox no será la única: es el síntoma de una homofobia estructural grave que puede llevar a sufrimientos terribles que la mayoría hemos decidido evitar a otras personas.

Negocia

El PSOE es perfectamente capaz de llevarnos a una repetición electoral, nuevamente. O Sánchez o la ultraderecha. Llevamos demasiado tiempo con este mantra, tanto que su eficacia puede estar desgastada. Así que creo que Illa y el PSOE, en su conjunto, se equivocan cuando airean la idea de que la repetición electoral es posible ante el plante de ERC y Junts. ¿Qué pensaban que iban a plantear? Ahora toca negociar y al PSOE le toca hacer posible lo difícil, y contentar a quienes iniciaron un proceso independentista y sufrieron violencia, represión, cárcel y exilio por ello. De eso hablamos y de eso les toca hablar. Que lo hagan.

En sus manos

Más vale que recuperemos la confianza en nuestras y nuestros representantes, y en los intermediadores habituales entre ellos y ellas, y la sociedad, como los medios de comunicación, porque noticias como esta son alertas rojas y sonoras sobre el mundo que nos espera: “Elon Musk se cuela en la campaña argentina y da un espaldarazo al ultra Javier Milei” (EPE). Los ultrarricos y ultraliberales controlan grandes medios de difusión de ideas (que no de información) que pueden lanzar a dirigentes peligrosos como Milei o Trump, al que el mismo Musk ha mostrado proximidad. Identificar los peligros y hacerles frente es una obligación.

¿Y esto?

“De los 6.522 millones de euros que dejaron los seguidores en las arcas de LaLiga, 2.954 millones de euros nacieron de las apuestas”, según un informe de KPMG. O lo que es lo mismo: “Las apuestas suponen más de un tercio” del gasto de las y los aficionados. Esta noticia en El Independiente le da otro contexto esta otra en El Plural: “La liga española pierde fuelle y toca fondo”. Es decir: con menos interés y menos ingresos, las apuestas serán una fuente de dinero e interés mayor para la empresa, por lo que se promoverán aún más y, por extensión, el problema asociado y que todas y todos conocemos que conllevan.

A nuestra imagen y semejanza

Esta ha sido una semana de esas en las que escribes a cara de perro. Pero me niego a acabarla así cuando también he encontrado esta reflexión de Jeff Mermelstein en el Twitter de Jota Barros: “La fotografía callejera supone una documentación importante de nuestro tiempo. Algunas de las imágenes más significativas en cualquier medio artístico de los últimos 150 años han sido realizadas en la calle por personas como Henri Cartier-Bresson, Diane Arbus y R. Frank… Si se desaconseja hacerlo, a largo plazo será una pérdida sustancial”. Este arte nos enseña cómo somos y se ha dinamizado gracias a las redes sociales digitales.

Hacer el canelo

Voy a ser bueno y voy a pensar que Borja Sémper supo que se había pasado cuando definió como “hacer el canelo” esa cosa tan salvaje de hablar en euskera en la tribuna del Congreso de las y los diputados. Por eso él mismo lo hizo. Tres frases. Pero menos es nada, literalmente. Celebro sin dobleces la rectificación de Sémper a sí mismo porque me parece especialmente significativa: el avance de posiciones cavernícolas hacia una normalidad que ya se da en parlamentos autonómicos con representantes de muchos y muy diversos partidos. Yo, que estoy por civilizar, sigo pensando que ayer ganó España haciendo suyas lenguas que no lo son.

Otro detector de trogloditas

Creo que Joseba Agirretxea lo clavó: “Los que se han marchado son los mismos que antes nos echaban de clase, nos multaban o nos metían en la cárcel por hablar euskera. Ahora se han ido ellos. Algo hemos avanzado”. El diputado nacionalista vasco se refería a las y los diputados de Vox que en un gesto propio de niñatas y niñatos, dejaron los receptores de la traducción simultánea en el escaño de Pedro Sánchez. “Ahí lo llevas”, debieron pensar, pero lo cierto es que se lo llevan ellos: esos aparatos amontonados se convirtieron automáticamente en útiles detectores de trogloditas capaces de negar lo que no comprenden.

Otra vez, no

Precisamente los representantes del PNV están demostrando una gran cortesía parlamentaria diciendo “no” de la manera más amable una y otra vez al PP, que se empeña en arrancarles un “sí”. Es más fácil rechazar las reuniones, no mirar a la cara y dar una rueda de prensa en el mismo Congreso, pero es mucho menos político. Lo que me sorprende es que no haya ningún periodista que reclame a esas y esos de las ruedas de prensa y las entrevistas en carrusel una respuesta: ¿por qué mintieron en campaña con aquellos anuncios, repetidos cada día, de un pacto entre PP, Vox y PNV? ¿Por qué ahora ni se sonrojan?

Si no me gusta el resultado, elecciones

Yo creo que el PP pide elecciones como quien tiene la partida perdida pero tira los dados y espera tener una suerte increíble para avanzar de oca en oca y de puente a puente hasta la casilla final. Porque si se repiten lo más probable es que Sánchez pegue un par de bocados a derecha e izquierda y suba un poco más (librándose de algún partido nacionalista). Pero los de Núñez Feijóo, insisto, dan la batalla por perdida: antes de su propio intento de investidura ya piden que Sánchez convoque elecciones… Incluso aunque la ley lo prohíba, ya que es presidente en funciones y ahora todo marcha con los plazos que arrancó Felipe VI.

Es imposible hacerlo peor

Es imposible hacer las cosas peor que en la RFEF. No sé si la era Rubiales ha desnortado a todas y todos o si el dimitido presidente sigue mandando y equivocándose, fiel a su estilo. La convocatoria de Montse Tomé, dejando fuera a Jennifer Hermoso y llamando a jugadoras que habían avisado de su renuncia, es un despropósito. Creo que las futbolistas exigen más de lo que les corresponde (lo del cambio en la gestión del marketing no corresponde a ninguna jugadora o jugador), pero lo básico es inapelable. Y es en lo más elemental en lo que la Federación sigue haciéndose un daño cada vez más difícil de reparar.

Sí, tiene consecuencias

La violencia machista no es un fenómeno atmosférico: ahora hay más casos porque se ha roto el consenso y porque un partido que la niega está en las instituciones y en ellas deja ver a una presidenta de un Parlamento, Llanos Massó en Valencia, desmarcarse de las condenas expresas. “Andalucía bate récords en violencia de género y acapara el 35,7% de los asesinatos en lo que va de 2023”. No es casualidad que esta tragedia suceda una comunidad gobernada por el PP con los votos de Vox. Engordar a la extrema derecha tiene sus consecuencias y son graves, muy graves. Y tiene sus responsables, y son perfectamente identificables.

Claro que es más qué fútbol

Si el fútbol ha sido siempre mucho más que el juego y el negocio porque nos ha explicado como sociedad, la irrupción del fútbol femenino (que siempre estuvo ahí pero no lo veíamos, y tenemos que reconocerlo con humildad) es todavía más. Alexia de la Cruz lo escribe muy bien en Panenka: “Todavía no sólo podemos hablar de fútbol”, espeta antes de recordar hechos y palabras que dejan clara la lucha por la igualdad que se expresa a través de este deporte y quienes lo practican. Por desgracia, la invisibilidad de las mujeres que han jugado y han apoyado el fútbol femenino también nos explica como sociedad.

Sí habla por mí

No he perdido ni un segundo en saber qué opina Ángel Expósito sobre la visita de Yolanda Díaz a Carles Puigdemont. No me hace falta, lo sé. Me importa mucho más lo que piensa Diego E. Barros al respecto porque me representa en su desprecio al periodista que descubre el nacionalismo catalán o vasco en cada acción hacia el avance de una Catalunya o una Euskadi libres: “Pavo, habla por ti. A mí me importa un huevo. El ridículo lo hizo el estado al judicializar esto en 2017. Y os lo dijo todo dios, ahí fuera. Pesaos, que sois unos pesaos”. Por desgracia, no fue solo ridículo: presos políticos y exiliados han pagado por ese error histórico.

La realidad

Hace años una persona que sabía mucho de ingresos y gastos en televisión me avisó de que el modelo de negocio de las plataformas era insostenible. Lo clavó pero no fue el único que lo vio venir. Mr. Insustancial completaba un tuit de Carlos Clavijo en el que denunciaba que Aaron Paul no cobra ni un dólar de Netflix por la emisión de Breaking Bad (y por eso hace huelga): “Netflix y las plataformas digitales iban a ser la solución para espectadores y profesionales del medio porque iba a cambiar el paradigma del cine y la tele. Resulta que no, que es lo mismo de siempre pero repartiendo menos dinero (como sospechábamos)”.

La mafia es una organización criminal

El embajador italiano en España se ha quejado por “la colaboración de la cadena de restaurantes ‘La mafia se sienta en la mesa’ con el Casademot Zaragoza”. Volvemos a hablar de que el deporte es un negocio muy caro y de que a un buen patrocinador que te ponga los billetes no se le puede decir que no. ¿O sí? ¿O es mejor hablar de cómo el “naming” de la cadena de restaurantes es absolutamente desacertado porque, como explica Niporwifi, que informa muy bien en Twitter sobre noticias del crimen organizado en el mundo, “La mafia existe y es una montaña de mierda, no merece comerse una pizza en su honor”?

El tablero político

Mientras la prensa conservadora, en España; y Bildu y Podemos, en Euskadi, intentan colocar  a EAJ-PNV en el bloque que posibilitaría a Núñez Feijóo ser presidente, Andoni Ortuzar y las y los suyos, parece que están a otras cosas, justo a las contrarias, como explicaba en Twitter Fernando H. Valls: “El PNV ha actuado de intermediario entre PSOE y Junts, confirma Aitor Esteban. Es decir, Sabin Etxea ha hecho posible que Puigdemont vuelva a jugar en el tablero político (acuerdo de la Mesa). Esa conexión es clave. El escenario es: investidura de Sánchez o segundas elecciones”.

El trazo fino

Ignatius Farray lo ha vuelto a hacer: pese a sus espectáculos intencionadamente grotescos, su trazo es fino como el de pocos. “Lo más gracioso de todo esto es que ni Rubiales ni la mayor parte de la prensa deportiva tienen todavía muy claro qué coño está pasando”, tuiteaba aflorando una gran verdad. El presidente de la RFEF y los periodistas que le justifican realmente no se han dado cuenta de la gravedad de sus actos, les parecerá que estamos hinchando un globo y seguro que creen que queremos mover la silla de Rubiales aprovechando este escándalo. Pero no: su machismo es lo grave y el motivo.

¿Qué está pasando?

¿Qué pasa por la cabeza de un octogenario para lanzar una piedra contra un helicóptero que recogía agua de su pozo de regadío para apagar el fuego que está devorando una parte de Tenerife? Según El Plural, el agresor, que dejó inutilizado el vehículo y, por lo tanto, agravó la situación, ya ha sido detenido. Pero también explican que Rosa Dávila, presidenta del Cabildo de Tenerife “atribuyó esta acción a los bulos que se habían difundido”. Quienes tienen que estar detenidos son quienes difunden esos bulos, quienes sin nada que perder utilizan cada noticia para desgastar a las y los responsables políticos de turno.

De lo local y lo global

No tengo ni idea de a quién ha votado el que se ha liado a pedradas contra un helicóptero, pero la noticia me ha hecho recordar el estudio que se ha publicado este verano: en EE.UU., “el 97% de las noticias falsas publicadas en Facebook las ven usuarios conservadores” (Público). Hay dos elementos en la noticia para mí más importantes que ese altísimo porcentaje: que se trata de lectores estadounidenses y que se trata de Facebook. Pero creo que es innegable que los bulos activan el voto, especialmente el radicalizado (de un extremo y del otro, en mi opinión). Y estas sí son tendencias globales.

Todos con los jeques

Poco a poco están colocándonos la idea de que las grandes ligas de fútbol son la inglesa, la alemana, la española, la italiana, la francesa y la árabe. Y nos están informando de los partidos y las competiciones con naturalidad, más allá de los fichajes que nos sorprenden cada vez menos: el “sportswashing” funciona. O lo que es lo mismo: la carísima campaña de imagen que están comprándose los jeques va bien porque no se habla de la dictadura o la falta de derechos civiles básicos en Emiratos Árabes, sino de los goles de sus equipos, sobre todo, a las plantillas europeas con dinero a patadas.