La inmigración

Si algo muestra el último CIS es que la sociedad española, exactamente igual que la vasca, es muy permeable a los temas que machacamos los medios. Así que, sí, compañeras y compañeros, si la inmigración es la principal preocupación de la ciudadanía es porque hemos enfocado el tema muy mal (y muy bien para algunos partidos y empresas). Porque la inmigración, en sí, no es un problema, porque necesitamos que vengan de fuera a cotizar si no tenemos más hijas e hijos, porque la mayoría de migrantes hacen trabajos invisibles (cuidados, cocinas, etc.) y porque delinque quien delinque, venga de donde venga y sea de donde sea.

Los encantados

¿Que a qué me refiero con que hay partidos y empresas encantados con la manera con la que los medios tratamos el tema de la inmigración? A esto en The Objective: “Vox cree que los datos del CIS respaldan su apuesta por la inmigración y la ruptura con el PP”. Hemos comprado el tema y el marco a los malos, así que ahora no podemos echarnos las manos a la cabeza, rasgarnos las vestiduras o preguntarnos mientras mordemos la patilla de las gafas: ¿cómo habrá pasado? Por supuesto, algunos medios han colaborado activamente en proyectar esta visión sesgada y criminalizante de la inmigración. Pero la mayoría podemos hacerlo mejor.

La demagogia

Cada vez que tengo que hablar del PSOE y la vivienda me acuerdo de que el único lehendakari que propuso vender el parque de VPO a un fondo buitre fue Patxi López. Dicho esto, la política de vivienda de los socialistas se basa, básicamente, en la demagogia. No lo digo yo: la inversión del gobierno español en VPO es hoy la mitad que hace 20 años, según El Blog Salmón, de hecho, es “el único gasto público que ha disminuido” en estas dos décadas. Además, España es “el tercer país europeo con menor inversión”. Claro que pueden hablar de transferencias, pero a la luz de los números, solo la CAV y Nafarroa, en menor medida, han hecho lo suyo.

El clima

Personalmente, me preocupa más la emergencia climática que “la inmigración”. Aunque hay elementos dentro de ese cajón de sastre que me ocupan especialmente, como el trato a las personas migrantes, los abusos y, por supuesto, la delincuencia y la violencia de los inadaptados, a los que hay que perseguir, castigar o expulsar. Pero vuelvo al inicio: me preocupa la emergencia climática. “Al menos 22 personas ya han muerto en Austria, Polonia, República Checa y Rumanía” por las inundaciones. “Todo es agua”, titulan en El Confidencial no sin alarmismo, pero en este caso el alarmismo me parece necesario.

El terror

euronews.com La serie de acciones terroristas contra la población de Líbano (sin juicio, sin acusaciones concretas y por autoridades competentes, no voy a asegurar yo que se trate de delincuentes que deban ser mutilados, heridos o asesinados) debe ser objeto de una investigación internacional urgente y neutral. Si ya fue grave detonar “buscas” sin importar los “daños colaterales”, detonar walkie-talkies que han estallado en funerales de las víctimas del primer ataque me parece ensañamiento. Nada lo justifica. Y como en el caso de la inmigración, mal hace Euronews en dar por hecho y publicar que esos dispositivos eran “de Hezbolá”.

¿Qué es la política?

Vivo la política desde que soy adolescente y tengo claro desde hace mucho tiempo que es el mecanismo que tenemos para ponernos de acuerdo entre diferentes, por medio de nuestros representantes, y avanzar como sociedad. Así que, lo siento, pero no entiendo esto: “Junts saca pecho de su posición de fuerza en el Congreso: ‘O nuestros acuerdos o sus derrotas’” (El Nacional). Y menos lo entiendo cuando esa “derrota” impide corregir una ley de vivienda mala (la que aprobaron PSOE, Sumar, Bildu y ERC, que luego la recurrió) por medio de parches, en este caso, regulando las viviendas turísticas, que es una emergencia.

¿Presupuestos?

Pese al palo en el legislativo de Junts, que ha supuesto una foto jutno a PP y Vox en la que los de Puigdemont no se sienten incómodos, y pese a que el PSOE sabe que sacar adelante las votaciones le va a costar cada vez más (porque cuando contente a Junts pedirán lo suyo ERC o Podemos, y el PNV, que nunca deja de hacerlo), no creo que haya elecciones a la vista porque hasta sacar los presupuestos le da igual al PSOE gracias a los fondos europeos, que dan hasta para torpedear a la oposición: “El ‘caramelo’ de la quita de la deuda, principal riesgo para la unidad de acción de Feijóo y sus barones” (El Independiente).

Stop pretending being poor

La foto de Paris Hilton en una fiesta con una camiseta en la que se podía leer “Stop Being Poor” se ha convertido en el meme (aunque ella asegura que es un montaje) de las ultrarricas haciendo cosas de ultrarricas. Pues vale. Más me fastidian esas y esos burgueses que van de que no lo son: la actriz Irene Escolar, de la que Alberto Elías decía en X con tino que toda su familia “está en azul en la Wikipedia”, ha dicho en La Revuelta que no puede pagar el alquiler de una vivienda, y en la misma red social o Público todo han sido elogios a ella y al propio David Broncano, como si no estuviese intentando pretender parecer algo que no son: pobres.

Otra “nepo baby”

La hija de Albert Boadella, a diferencia de Irene Escolar, no ha seguido los pasos de su padre en el teatro, sino en la política: “Se alía con el navarro Carlos Pérez-Nievas para dirigir Ciudadanos” (The Objective). Parece que el partido naranja no está acabado, solo “al borde de la desaparición”. La de Mariana Boadella (que evidentemente tiene nombre) junto a Pérez-Nievas es la candidatura “oficialista”, y la propia Boadella fue número tres en las elecciones europeas. ¿Será esta la dirección que baje la persiana definitivamente de ese partido que sigue presentándose como “de centro” y fue el que cebó a Vox?

“Un ataque sin precedentes”

El ataque sobre población civil en Líbano es una barbaridad. La maniobra terrorista (y es terrorismo, lo firme quien lo firme) es absolutamente extraordinaria, “sin precedentes”, según Simon Mabon, el catedrático de Relaciones Internacionales de la Universidad de Lancaster al que ha preguntado la BBC. Vale. Pero el resultado es otra masacre: a quien dio la orden y a quien apretó el botón que hizo explotar los dispositivos no les importó si las personas que los portaban estaban abrazando a sus hijos, conduciendo un coche, viajando en un autobús abarrotado o en un avión en pleno vuelo. Y eso es un crimen más grande que la maniobra.

Los gilipollas

Ya sé que no va a pasar porque cuando hablamos de ultrarricos hablamos, sobre todo, de impunidad, pero las personas que se han dado el primer paseo espacial turístico de la historia, junto a las que lo han posibilitado, deberían de ir a la cárcel de manera preventiva antes de ser juzgadas con severidad. ¿El delito? Contaminar muchísimo como si no importase. Mientras ellas y ellos viajan ya hasta el espacio (emitiendo cada una o uno hasta 100 veces más dióxido de carbono que un pasajero en un vuelo comercial), nosotras y nosotros, los gilipollas, les aplaudimos mientras separamos la basura antes de echarla a los contenedores.

El mantra

No creo que en condiciones normales elegiría una papeleta que encabezase Edmundo González, pero en la Venezuela de 2024 para hacer frente a un tirano como Nicolás Maduro, seguramente, sí, sería mi opción. Y no por ello soy ultraderechista: que quede claro que quien señala de ese modo al candidato y sus votantes lo único que hace es participar de la propaganda de Maduro. Betagarri en X lo explica muy bien: González encabezaba una lista de concentración en la que también se integran partidos de izquierdas. La gran argamasa era y es hacer frente a la dictadura de facto que ejerce el líder actual del Chavismo.

Socialista, pero de Fred Perry

Anda activa la “tuitesfera” (sé que me hago viejo porque uso expresiones como esta) abertzale: Txirrita Oinarritua parece deleitarse ante el polo de 120 eurazos que luce el representante de Ernai que explica en un vídeo que es solidariamente socialista. Que eso suponga estar con un tirano al chaval del polo caro parece no importarle. Pero me centro en la crítica: como bien sugiere el usuario de X, no parece coherente alabar una alternativa al capitalismo (que no es tal, y la fortuna de las herederas de Chaves es la mejor prueba) luciendo un Fred Perry que cuesta cuarenta veces el salario mínimo de Venezuela, uno de los más bajos de Latinoamérica.

La fiesta hay que pagarla

Si hay algo que me parece que diferencia a una persona normal de un idiota es la llantina por pagar impuestos. Estar al día con tus obligaciones fiscales con normalidad también es, de paso, un gran medidor de nacionalismo. Precisamente porque soy consciente de su importancia me gusta que se gestione también con rigor: si algo me jode, hablando en plata, es que los gobiernos gasten como si no costara. Así que ante titulares como este: “Los españoles que cobran del Estado son ya medio millón más que los del sector privado” (The Objective), por supuesto, me envaro, porque para pagar la fiesta es necesario controlar el gasto.

A ver, Pedro, aclárate

He dudado entre abrir la columna con este párrafo o dejarlo para el final, por eso de que la anécdota no debe de ser noticia: “Nuestro modelo de financiación es el mismo en todos los territorios”. Esto lo ha dicho Pedro Sánchez en el sarao que se ha montado con su grupo en el Congreso para colocar unos titulares y unos tuits, y lo recoge El Nacional. Parece que el presidente del gobierno es de esos que siempre tienen la razón porque afirman una cosa y su contraria y, al final, acaban con un: “Ya lo dije yo”. Hombre, si lo dices todo siempre aciertas, pero apostar por una fiscalidad especial y negarla puede acabar saliéndole regulinchi.

La Ley de Vivienda cumplió su función (electoralista)

Es evidente a estas alturas que la Ley de Vivienda cumplió su función: dio un gran argumento de campaña a PSOE, Sumar, Bildu y ERC, que anunció un recurso de invasión de competencia después de las elecciones. Un argumento que, pese a que el resultado de la ley ha sido un desastre, siguen usando como si su iniciativa electoralista no fuera la causante de que el precio del alquiler “ha crecido un 50%, de 845 a 1.268 euros mensuales” (El Blog Salmón). La Ley genera esto: “La escasez de oferta y los numerosos requisitos exigidos a los propietarios para evitar impagos, está expulsando del mercado al segmento poblacional más vulnerable”.

Sigue resistiendo

Sánchez ya ha terminado con su manual de resistencia y va ya por el vals del obrero de Ska-P: podemos imaginarle cantando en Moncloa “¡resistencia, desobediencia!”, antes de adelantar el congreso del PSOE un año para “proyectarse como detentador absoluto e indiscutible de los valores y símbolos del PSOE”, como explica César Calderón en The Objective. El consultor cree que Sánchez vencerá con el traje de guardián de los valores socialistas, y que eso le permitirá colocar una ejecutiva federal de afines que vayan socavando a los barones socialistas que hoy son críticos, especialmente, con la financiación singular de Catalunya.

¿Qué puede salir mal?

“Trump designará a Elon Musk para liderar un comité que audite las medidas de su Gobierno”, leo con asombro en El Confidencial. El expresidente y candidato anunciaba que la idea había surgido del dueño de X y que este le había dado “su apoyo total y completo”. Lo que buscan ambos es que el dinero de los contribuyentes se gaste “correctamente”, por supuesto, desde su visión privilegiada y ultraliberal de la vida. Después de este anuncio yo tengo aún más claro que votaría a Kamala Harris si fuese estadounidense. Pero como no lo soy, lo que me toca es tener claro qué ideas favorece Musk desde X.

Quim Monzó se jubila

Me he enterado por medio de Bernat Dedéu en El Nacional de que Quim Monzó ha anunciado que dejará de escribir sus columnas en La Vanguardia “porque está cansado y aburrido tocar los mismos temas”. Antes ya había anunciado que también dejaba de escribir novelas. Dedéu avisa: “El tedio monzoniano no es un paripé y, justamente por eso, hay que tomarlo como una advertencia”, “entiendo perfectamente que Quim cuelgue las botas justo ahora, cuando Barcelona vive uno de sus periodos de decadencia más evidentes y Catalunya se enfrenta a un nuevo intento de pacificación autonomista”.

La locura de las ligas Fantasy

Llevo años jugando alguna liga “Fantasy”: lo he hecho ya en casi todos los formatos y plataformas, buscando, cada temporada, una un poco más tranquila que la anterior, y pensaba que era una cosa del viejo que el domingo por la noche necesita la emoción de averiguar si acertó comprando a Iñaki Williams en vez de a Nico. Para mi sorpresa, este tipo de juegos está de moda entre la chavalada, como explican en EPE: el propio Marcos Llorente reconoció en una entrevista que jugaba. Lo malo es que esa generación traslada todo a las redes sociales, y su furia por un mal partido la dirigen a los futbolistas sin control.

Empieza el curso

Algunas y algunos llevamos ya un par de semanas picando tecla, otras y otros volverán al trabajo mañana y las y los más afortunados disfrutarán, por fin, de sus días de descanso. Sobre eso, precisamente, ironizaba Joseba Díez Antxustegi en X: “A ver si es que no era una tregua y lo único que querían era irse de vacaciones”. Se refería el portavoz parlamentario del PNV al regreso de Bildu, con la maquinaria a tope contra Osakidetza y la policía local en Bilbao, entre otros. Su posibilismo ha durado lo que el descanso estival de sus jefes (no hay jefas), agotados después de tanto imitar al partido, precisamente, de Díaz Anxustegi.

Si lo dice Rahola…

El curso político vasco estará marcado por el pulso que Bildu va a echar al gobierno vasco y por el proceso interno en el PNV: si no hay elecciones generales a la vista los focos se dirigirán a Sabin Etxea. Si las hay, tendrán menos lupas encima pero también menos tiempo para preparar la próxima Asamblea General. Así que todo depende de Puigdemont, de ERC, de Podemos y ahora también de Ábalos, que tendrán que seguir ofreciendo estabilidad a Pedro Sánchez. Por si acaso Pilar Rahola “advierte a Sánchez de la estrategia de Junts en Madrid: ‘Otoño será movido’” (El Nacional). ¿Siguen sin encontrar una prescriptora mejor?

Influencers pero inalcanzables

¿Es Pilar Rahola una influencer en el nacionalismo catalán? En puridad, sí. Lo que no sé es si realmente tiene capacidad de influencia en quien mira el móvil. Algo parecido, pero con unas circunstancias totalmente diferentes, empieza a pasarles a las y los grandes influencers: “El exceso de lujos y frivolidad pone en riesgo su popularidad y castiga su negocio” (Vozpópuli). Una o un influencer funciona cuando llena tu hotel o tu restaurante, o agota existencias de tus carteras. Si alcanzan modos de vida carísimos, ¿quién va a poder consumir lo que anuncian? Pero lo más significativo es comprobar que la burbuja influencer sigue hinchándose.

Una “bomba atómica” sexual

En la versión en castellano de la página web de la BBC han publicado un reportaje estupendo para un domingo lluvioso sobre Alfred Kinsey, el primer científico que hizo de las relaciones sexuales su objeto de estudio. Hablamos de la década de los 40 del siglo XX, cuando “la ignorancia de sus estudiantes despertó la curiosidad científica de Kinsey”. “Terminó siendo recibido por los artistas y escritores más atrevidos”, que también ofrecieron sus testimonios sexuales para la investigación. Hoy sigue existiendo un Instituto Kinsey que sigue observando la sexualidad e incomodando a las y los conservadores en EE.UU.

Nadie ha querido ir

Ni Nico Williams, ni Luis Díaz ni Kingsley Coman, ni Rafael Leao, ni un Federico Chiesa al que la Juve daba todas las facilidades para salir: solo Dani Olmo, con especiales ganas de volver a casa, ha querido fichar por el FC Barcelona. Por eso “el Barça de las restricciones se queda con una plantilla muy corta” (The Objective). Un problema que en realidad tiene que ser gravísimo, porque es evidente que ha contado con todos los favores y facilidades para fichar… Hasta ahora. “Los dirigentes del Barça han engañado a su masa social” porque Laporta tampoco ha conseguido que Nike acceda a renegociar su contrato en vigor.