La «coherencia»

¿He guardado este link durante días? Por supuesto. Cada huelga de lo que depende de lo público me ha animado a hacerlo. Porque en pocas ocasiones unas líneas muestran tanto, en este caso y como denuncia Aitor Esteban, “La ‘coherencia’ de Bildu, que pide que la gestión de los servicios sociales sea sólo y exclusivamente pública. La realidad: donde gobiernan contratan a empresas privadas para gestionar las residencias públicas y la asistencia domiciliaria. No me parece mal, creía que a Bildu, sí”. Se lo explicaba Jesús Lekerikabeaskoa en el debate de ETB1 a Iker Casanova, que se limitó a poner cara de póker, lógicamente.

Votemos como personas adultas

El domingo que viene estaremos votando. Solo espero que lo hagamos como personas adultas, sin dejarnos llevar por la pataleta como forma de vida y de hacer política. La realidad es compleja, casi nada depende ya de nosotras y nosotros, y sobre lo que lo hace tenemos que ser responsables. Rubén Arranz en Vozpópuli también apela a la responsabilidad individual (“Usted también es culpable de la ruina de España”) y alerta de que son “peligrosas las campañas electorales” en “sociedades cada vez más entregadas a la desesperanza” que buscan a “cumplidores de sus deseos y liberadores de sus problemas”.

La liga de futbito uberizada

En El Blog Salmón lo tienen claro: “La Kings League paga una miseria a sus jugadores porque está muy lejos de ser rentable”. Básicamente, “factura, pero no gana” porque las retransmisiones, que es lo verdaderamente caro, de momento no generan ingresos: “No hay pay per view”. Entonces, ¿cuál es el modelo de negocio? La “uberización” del fútbol: que las y los trabajadores soporten el coste de la estructura y que las y los espectadores disfruten sin pensar en la precarización del business ni, por supuesto, en la suya propia. Eso, sí, con streamers. Infojobs y Grefusa como patrocinadores oficiales ya daban una pista.

Siempre hubo fútbol humilde

Los jugadores que se han prestado a colaborar en la Kings League responden a dos patrones muy concretos: amateurs que cobran algo por jugar y exprofesionales que se apuntan a la pachanga convocada en un grupo de WhatsApp que podría llamarse, perfectamente, “El club del Lamborghini”. Ya veremos cuál es el de la Queens League, con un fútbol mucho más precarizado. Lo que sí sabemos es que la inmediatez, que es la base del formato de Gerard Piqué, jamás producirá gestas ni héroes que necesitan años para convertirse en lo que son, como José Luis Mendilibar, el ejemplo de que el tesón puede acabar en oportunidad.

Una nueva cámara… ¡de carrete!

No es una inocentada, es completamente cierto: Pentax ya ha dado alguna pista sobre cómo será su nueva cámara, de la que solo sabíamos que iba a ser de carrete. De rollo. De película. De las de 24 o 36 exposiciones. De las de ir a la tienda y volver una semana después a por el sobre con los negativos y, eso, sí, un CD o un USB con las imágenes. La moda de la foto analógica ha llevado a la firma japonesa a este movimiento tan extemporáneo. Según leemos en Photolari parece que será una cámara compacta (suponemos que de 35 mm.) con manilla de arrastre, para poder oír y sentir cómo corre el carrete antes o después de cada disparo.

Un PP “ayusizado”

“El PP vasco prevé que el mitin de la presidenta de la Comunidad de Madrid en el Palacio Euskalduna de la capital vizcaína sea el que más simpatizantes atraiga de toda la campaña, ‘hay mucha ilusión, la gente tiene muchas ganas de verla’”. Mikel Segovia en El Independiente no puede resumir mejor lo que es el PP vasco hoy: una formación reducida a su núcleo duro después de reabsorber a Ciudadanos, que era poco más que una familia en su ala derecha. Una formación que abraza el ayusismo porque todo lo demás le ha fallado. Una formación que solo aspira a conservar y activar al mínimo posible.

En la política y en la vida

Las redes sociales digitales han empeorado la política: los tuits se han convertido en la manera de comunicar de las y los representantes de la ciudadanía, y esta se ha hooliganizado, al menos, en parte, para defender y atacar a su partido y a los otros. ¿Para qué? Pero en la vida no nos ha ido mucho mejor: perdemos nuestro valiosísimo tiempo con gilipolleces pegadas unas a otras. Europa (que sirve para algo, insisto e insistiré) ya ha puesto el foco. Y el ministro español de Consumo, también: “Garzón carga contra los ‘efectos nocivos’ de TikTok, Meta o Twitter: provocan ‘ansiedad’ y ‘depresión’ en los jóvenes” (República). Y esto es innegable.

El peor problema, el propio Musk

Hablando de redes sociales: no hacen un mal resumen en Marketing Directo sobre “el rosario de problemas que Elon Musk deja en herencia a la nueva CEO de Twitter”, Linda Yaccarino. Uno de los más importantes, precisamente, lo puede solucionar la política: la huida de anunciantes e ingresos podría arreglarse revertiendo la norma de los anteriores propietarios de no permitir publicidad política en la red. Otro problema es el control de gasto y el equilibrio con el personal necesario. Pero el principal es bregar con Elon Musk, que tiene toda la pinta de querer entrometerse en la gestión de la empresa por la que pagó 44.000 millones.

¿Hay que regularlo todo? Sí

Hace tiempo que, por suerte, no oímos la milonga de la necesaria descentralización de Internet, como eufemismo de su desregulación. Curiosamente, desde posiciones progresistas han alimentado durante años ideas ultraliberales. Es evidente, lo era entonces y espero que lo sea cada día, más, que es necesaria una regulación clara sobre todo lo que podemos hacer on-line. Porque mientras divagamos sobre lo que es progre y lo que es bobo, los malos avanzan: “¿Qué hay detrás de las aplicaciones que pagan por hacer encuestas? Recogen información personal que deberíamos proteger y venden datos a terceros”, avisan en Maldita.

A estos empoderamos

También era evidente, evidentísimo, que ampliar la grada de animación en San Mamés iba a servir para empoderar a los de siempre, a quienes consideran que la bandera para reclamar amnistía para los presos de ETA, la del Arrano Beltza con la que la izquierda abertzale quiso sustituir a la Ikurriña o la que sirve para reconocer la ocupación rusa del Donbass, son elementos de animación. A quienes no van a animar cuando el equipo está ante su última oportunidad. Esos son los que controlan la grada de animación. No otros. Siempre lo fueron, pero muchos miraron para otro lado por la campaña. Y no, no todas las campañas son iguales.

El enemigo común de PP y Bildu

Oskar Matute quería poner colorado al PP… Y ha acabado reconociendo que Bildu y los de Núñez Feijóo comparten enemigo en Euskadi: “Un dirigente del PP de Álava se dirigió a ellos en las elecciones municipales de 2012 para pedirles que votaran a su propia lista y que no saldría así la candidatura del PNV” (El Plural) en Gasteiz. A cambio, el PP “se equivocarían en dos alcaldías” del mismo territorio. En Araba, las alcaldías que disputa Bildu se las disputa al PNV, así que está claro quién salía perjudicado en todas maniobras, quién es el enemigo común y que las relaciones PP-Bildu, hasta para señalarse, les benefician.

Invasión competencial para perjudicar

Si no recuerdo mal, la primera gran invasión competencial del primer gobierno español de coalición, a la vez el más progresista y, al mismo tiempo, el más encantado de haberse sentado en el consejo de ministros y ministras, fue la del Ingreso Mínimo Vital. No importaba que la CAV tuviera una RGI en funcionamiento, no importaba que aquella fuera una clara declaración de intenciones recentralista de Pablo Iglesias: nos la colaron. ¿Y para qué? “El Gobierno (español) rechaza tres de cada cuatro solicitudes del Ingreso Mínimo Vital y deja sin ayuda a 250.000 personas vulnerables”, según Público.

¿Cuánto trabajan estos días?

En política se trabaja mucho (pero mucho, mucho), se gana menos que en la empresa privada, te exponer, puedes aparecer en los periódicos y, si no eres funcionario y quieres recolocarte cuando acabe tu ciclo en una empresa de tu sector, con el que habrás tenido contacto durante la legislatura, como es lógico que por eso te han llamado, serás señalado y señalada. Así que, ¿cómo no va a huir el talento de la política? Fran Sánchez reflexiona sobre ello en Ethic. Pero a su repaso le falta una arista: una campaña como esta en la que nos encontramos que es agotadora y que exige jornadas de más de 14 horas. ¿Cómo atraes talento a esta guerra?

No lo sabía nadie

Parece que la India es el primer país que admite que vende a Europa gasolina a partir de crudo ruso, según El Economista. No solo lo hace, sino que lo defiende: su ministro de Exteriores, Subrahmanyam Jaishankar (por supuesto, he hecho copy-paste), ha explicado con claridad el proceso (refinar el petróleo ruso y comercializarlo) y su legalidad, ya que no considera que su país vaya verse sancionado. Por mi parte, no creo que estas declaraciones abran la puerta porque ya está abierta. El mundo, especialmente Europa, depende tanto del suministro ruso que mientras hacía la ley dejaba a la trampa hacerse sola. Y lo sabíamos todas y todos.

Para algo tiene una red social

Elon Musk no hace tan bien los coches ni hace tan bien las redes sociales. De momento, parece que su empresa de cohetes sí va hacia arriba (se me ha ocurrido a mí solito el juego de palabras), si atendemos a los clientes que tiene, pero también es verdad que la falta de competencia juega a su favor. Pero lo que mejor ha hecho Musk desde que conocemos su existencia es especular para ampliar beneficios. Tal vez por eso le ha fastidiado tanto que Soros haya vendido su paquete accionarial en Tesla: porque ha hecho su juego y, además, esta vez, ha salido perdiendo. Por supuesto, su respuesta ha sido intentar ridiculizarle en Twitter.

No, no dejó de existir

Me sorprende que Pedro Sánchez, el máximo dirigente del PSOE, haya hecho suyo el argumento de la “desaparición” de ETA. ETA no ha dejado de existir: dejó de matar y, después, se disolvió. Pero ETA no es algo que tengamos que borrar de nuestra memoria. Al contrario: no podemos olvidar lo que pasó en Euskadi, no debemos olvidarnos de que unos mataban a quienes pensaban diferente a ellos y, además, en nombre de todos. No dejaremos que se olvide el sufrimiento que hoy todavía existe, claramente. Y no vamos a dejar, como se dejan algunos por electoralismo, que hagan que la memoria colectiva parezca algo del PP.

La noticia que no lo es

La noticia de ayer que no lo es no podía ser otra: “La Fiscalía decide no investigar a Bildu por los etarras en las listas electorales” (El Independiente). Básicamente, podría dejar de escribir ya el párrafo, pero tengo que señalar lo obvio: las y los condenados por pertenecer y colaborar con ETA, incluso los que lo fueron por asesinato, tienen todos sus derechos políticos restituidos y son perfectamente elegibles. No se trata de un asunto administrativo o judicial, sino político: quien les presenta se retrata, quien se presenta con ellos para blanquearles se retrata, quien les vota sabiendo lo que son solo es el de siempre votando lo de siempre.

A escote nada es caro

13.000 millones de euros. Esa es la cifra que han computado en El País sumando todos “los anuncios electorales de Sánchez”. Insisto: me parece obvio que los diputados forales del PSE hagan campaña anunciando sus ideas para la próxima legislatura. Por supuesto, me parece completamente normal que el alcalde de Portugalete, sin ir más lejos, avance sus intenciones para el municipio que gobierna. Pero de la misma manera me parece una desvergüenza que el presidente español haga anuncios en mítines de iniciativas que cuestan trece milmillonadas y que de las que ni siquiera ha informado a un Congreso que sigue con su legislatura.

Y yo, más

Si el presidente español y secretario general del PSOE anuncia inversiones en mítines y sus socios de coalición intentan no quedarse atrás (“Podemos propone ampliar el cine a dos euros a desempleados, jóvenes y vulnerables”, según EPE), no hablamos de un gobierno, ni de unas elecciones, sino de un bazar. Por cierto: el cine también me resulta muy caro a mí y si fuese más barato podría planteármelo como un plan familiar recurrente. ¿Para mí no tienen nada salvo pagar mi entrada, las de mi hija y mi hijo, y la de más personas? No discuto cubrir con mis impuestos asuntos básicos, pero los excesos a escote siguen siendo excesos.

Bien hallado, Bielsa

Voy a permitirme cambiar el paso en todas las columnas pese a la campaña por mi salud mental aunque sea para hablar del loco más maravilloso que ha pasado por Bilbao: Marcelo Bielsa entrenará a la selección uruguaya. Una gran noticia para las y los aficionados al fútbol de todo el mundo en general. Porque ver a los equipos de Bielsa cuando están engrasados es una maravilla y porque oírle siempre es necesario. En las anteriores elecciones a presidente del Athletic un amigo me confesó que había votado “a Bielsa” (no mencionó al candidato que lo proponía) porque “no podía no hacerlo”. Qué cosa tan maravillosa es el fútbol.

¿Y si no lo hubiésemos señalado?

Si no hubiésemos señalado que hasta 44 personas condenadas por pertenecer o colaborar con ETA formaban parte de las listas de Bildu (y 44 no son 44 casualidades), las y los siete que cumplieron pena por delitos de sangre no habrían renunciado. ¿Y si no lo habríamos hecho? Por supuesto, seguirían adelante. No se trata de ética, ni de moral, ni de respeto a nadie. Se trata de electoralismo. Y esto también hay que señalarlo. “Bildu sale al rescate de Sánchez: los 7 etarras con delitos de sangre no tomarán sus cargos”, titulan en Vozpópuli y aciertan porque Bildu cuando ayuda al PSOE a España se ayuda en Euskadi. Y esto también es un autorretrato.

El problema lo tiene el PP

A veces, simplemente, hay que mirar fuera para darse cuenta de lo que tenemos dentro: la apuesta del PP en Catalunya por españolistas activos le ha llevado a incluir, de momento, a dos hooligans del Espanyol: “Otro candidato del PP, entre los ultras del Espanyol que saltaron al campo. El número 11 de la lista de Cerdanyola del Vallès aparece en las imágenes grabadas en el momento de la invasión, encarándose a los Mossos” (El Món). ¿Es o no es una decisión incluir a gente de este tipo? ¿Los mantendrían en las listas si no apareciese en los medios el tipo de gente que es? ¿La rectificación del PP sirve para algo?

Se abren a los medios

Twitter está muy bien, pero unos segundos de Teleberri, una entrevista matinal en una radio o una página en un periódico siguen siendo otro rollo. Y esto lo saben hasta en Vox, que si no llega a ser por su candidata en Parla, a la que se han requisado durante su detención drogas, mucho dinero y hasta una pistola, seguiría abriéndose a los medios en campaña, como explican en The Objective. Un viaje, el del fascismo hacia los focos, que ya hicieron los fascistas de aquí hace unos años, con perfiles acostumbrados al escaño y el micro y, lo que fue un punto de inflexión, con periodistas de EITB en sus filas. Blanqueadores necesarios y bien pagados.

Serían nazis

Alguno de los misiles que lanzó Rusia sobre Kiev coincidiendo con la visita de Zelenski a Italia, Francia, Alemania y Gran Bretaña, seguro, pero seguro, seguro, que iba contra un nazi. “Se trató del lanzamiento del mayor número de misiles en el periodo más corto hasta ahora registrado”, leemos en El Diario. Pero, claro, ¿qué entendemos por “nazi”? Para Rusia y sus defensores, “nazi” es todo aquel que no defiende lo que hace el Kremlin. Para quienes tenemos algo de visión crítica, un nazi es un nazi, y punto. Pero lo más probable es que en Ucrania el odio y la violencia se hayan intensificado en algunas personas con la invasión.

“La filosofía es un chollo”

Miguel Ángel Puente ha generado mucho meneo en Twitter y en WhastApp desde que en la retransmisión de la goleada del Villarreal al Athletic dijera: “La filosofía es un chollo”. Dudo mucho de que mi amigo Míguel ponga en duda lo que define al Athletic, pero creo que es necesario repensar lo que supone: somos idealistas pero no somos idiotas. Algunos jugadores ganan más de lo que valen (y no hablo de los Williams o Muniain, que nos han dado lo mejor de la temporada) y la filosofía no puede ser una excusa para no competir. No lo digo yo: lo tuitearon durante años miembros de la Junta Directiva actual que ahora guardan silencio.