En El Plural describen de un modo muy sencillo cómo funcionaría el mecanismo de enriquecimiento del PP: Valencia atraía eventos como la Fórmula 1 o la Copa América de Vela. Un grupo de empresarios de confianza (aunque alguno venga ahora de justiciero) montaban una empresa de eventos que se llevaba medio millón de euros públicos al año en contratos. En esa empresa también contrataban a familiares como el sobrino de Rita Barberá. Y por supuesto, comisionaba un 2 o 3% “por cada contrato público amañado, y parte de ese dinero habría sido empleado para financiar de manera irregular al partido”.
Dos firmantes, dos versiones, dos aplaudidores
La política hace extraños compañeros de mesa: si la foto de Pedro Sánchez firmando un acuerdo con Albert Rivera nos resultó un poco rara, observar que tuiteros de signo tan diferente como Javier Maroto y Pablo Echenique coinciden en la crítica nos resulta bastante divertido. Ojo, no por eso les quito razón: lo más importante es que, como denuncian el del PP y el de Podemos, PSOE y Ciudadanos muestran textos diferentes sobre el, en teoría, mismo acuerdo en sus respectivas páginas web.
La casta de las salas VIP y los iPad por la cara
Esta semana quien ha sido el máximo exponente de la casta que no espera colas en los aeropuertos es la diputada canaria de Podemos y jueza, Victoria Rosell, que habría exigido de malos modos la apertura de la sala de autoridades del aeropuerto de Gran Canaria, según varios digitales. En Madrid, según OK Diario, Carmena habría empezado a hablar con los grupos para comprar iPads a los concejales con dinero público. Ojo, esta última decisión me parece bien porque estos cacharros ahorran tiempo, pero cuando lo proponían los demás eran “privilegios de la casta”.
Andoni Ortuzar felicita a Álex Txikon
Yo no entiendo de montaña, pero un compañero que sí lo hace me ha confirmado que, efectivamente, se trata de un hito: nadie había hecho cima en el Nanga Parbat, en el Himalaya, en invierno. Ha tenido que ser un vasco, Álex Txikon, el primero que coloque su bandera en lo más alto de sus 8.126 metros cuando más difíciles son las condiciones. Andoni Ortuzar fue uno de los primeros en felicitar y reconocer el mérito de este lemoarra, por medio de Facebook. Nos sumamos: zorionak!
Telecinco amplía el concepto de “telebasura”
No es casualidad, no puede serlo, que Telecinco decida devolver a la casa de Gran Hermano VIP (el ejemplo de lo que es su propio colector, ya que se nutre de productos que la propia cadena genera, principalmente) al conocido como “Pequeño Nicolás” el día antes de que la jueza le hubiese mandado a declarar por “usurpación de funciones”. De este modo, Telecinco da otra vuelta de tuerca a su idea de la telebasura: todo vale, también agigantar (y pagar muy bien) a quien tiene comportamientos punibles.