52.114 personas y 6 idiotas

Después del Athletic-Ranges en el que batimos el récord de asistencia de San Mamés, la Ertzaintza detuvo a seis personas. Según la nota de Interior, dos escoceses y un vasco, por los enfrentamientos entre aficiones. Los otros tres, directamente, estaban esperando a la Ertzaintza para liarla. El fútbol es solo la excusa de los que, con la cara tapada, prenden fuego al mobiliario urbano y dañan el buen nombre que la ciudadanía, salvo contadas y violentas excepciones, da a Bilbao. Sobran, hay que decirlo alto y claro. Y sobra también quien les envenena con mentiras y su fascismo disfrazado de antifascistas.

En todo momento y en todo lugar

Un antifascista lo es en todo momento y en todo lugar o no lo es. Y Europa está ante su propia prueba del algodón: tiene que intervenir en Gaza o, por lo menos, hacerlo contra Benjamín Netanyahu. “Israel ha convertido Gaza en una ‘fosa común’ con 51.000 asesinados” (Juan Antonio Sanz, en Público). Una salvajada televisada. Sube la cifra de muertos, se multiplica la de mutilados y no deja de crecer la de huérfanos y huérfanas que serán criados en el odio, como necesita Hamás. Pero el agresor, que nadie se confunda, es Netanyahu junto a sus ministros ultras y un ejército no menos perverso que el de Hitler.

Yo no lo tengo tan claro

Gracias a Internet, tener un lugar en el que opinar se ha vuelto sinónimo de tener una opinión: “Lluvia de críticas a Fernando Alonso y Aston Martin por la promoción de su nuevo casco: aparece la diseñadora tapada con un burka” (20 Minutos). Pues yo no lo tengo tan claro: que visibilicemos que Sara Turkestani es obligada a hacer su vida con esa imposición (y a las marcas que hacen negocios con quienes le obligan) es importante. ¿Quien critica la foto piensa que es tan fácil como quitárselo y posar? ¿En serio? Esa foto es la única opción de reconocimiento a Turkestani. Si Alonso se niega a posar nunca le habríamos conocido.

No, no la tiene ni la tuvo nunca

Yo tengo un sitio en el que opinar y me pagan por que lo haga, así que, allá voy: no, Jaime Mayor Oreja no tiene razón, ni la tuvo nunca, ya que estamos, aunque José Carlos Rodríguez esté tentado a dársela en The Objective (de los pocos sitios en los que le darían la razón al que fue candidato a lehendakari del PP y el PSE). El texto al que se refiere Rodríguez falla en la base: no se trata de que el PSOE se haya echado en brazos de los nacionalistas, es que la derecha se ha enrollado con la ultraderecha y que los principales partidos españoles piensan mucho más en sí mismos que en su España.

Un club

La novedad es que las fortunas son mayores que nunca, que la concentración en unas pocas manos es brutal y que las posibilidades de entrar en el club de los más ricos se reduce, pero esto no lo es tanto: “El dinero ha cambiado de manos, pero no de apellidos: los millonarios más jóvenes de 2025 son la prueba” (Xataka). Al ascensor social le han robado el botón de subir pero seguimos comprando en Zara, en Amazon, usando Instagram y algunos defienden al dúo Trump-Musk, que recorta dinero público para que SpaceX siga cobrando de la NASA. Si les hemos enriquecido les podemos empobrecer, solo tenemos que ponernos a ello.

Esto va en serio

La agresión a Europa ve en serio, y que EE.UU. ha dejado de ser un aliado y, seguramente, una democracia, no es una broma o una exageración: “Groenlandia pide apoyo internacional contra la ‘agresión’ de EEUU por un viaje de la mujer del vicepresidente”, leemos en El Confidencial. Y más tarde hemos visto al vicepresidente de EE.UU., que en ningún otro sitio pasaría de tonto de su pueblo, diciendo que “Trump hará lo que tenga que hacer” y que Groenlandia “ya no es un aliado fiable” (20 Minutos). Así están las cosas. Y cada vez que alguien dice: “OTAN, no”, sonríen Trump y Putin. Esto va en serio.

Para hacerlo bien

¿Debe Europa rearmarse? Sin ninguna duda. ¿Tenemos que revisar los presupuestos de la Unión y los estados miembros para atender a lo esencial y, al mismo tiempo, hacer esa inversión en defensa? No nos queda otro remedio. Europa tiene que hacer su rearme bien, y conocer sus “brechas” parece un buen comienzo: falta munición (que se ha enviado a Ucrania), pero también drones, defensas antiaéreas, artillería de largo alcance, transportes militares, software (ahora todo se llama “inteligencia artificial”) y satélites, según EPE. Todo eso cuesta una pasta, pero el imperialismo actual nos va a resultar aún más caro si no actuamos.

Más dinero público… para él

Si Donald Trump volviese a dejar votar hoy (yo creo que cada día que pasa es menos probable que vuelva a dejar votar) ganaría las elecciones de nuevo, estoy seguro. El imperialismo, los aranceles recíprocos o la carestía de alimentos básicos no le afectan negativamente. Parece que en EE.UU. todo lo ven bien, hasta los recortes a cargo de Musk, el mismo que “podría obtener más contratos millonarios con el Gobierno” (Vozpópuli): SpaceX es “la ingeniosa nueva forma en que el Pentágono podría trasladar carga militar rápidamente alrededor del mundo” y busca “contratos para enviar a los primeros humanos” a Marte.

Hablemos

Defendí y volvería a defender que a Pablo González, el periodista vasco detenido en Polonia durante “más de 900 días en una prisión polaca” (Infobae), no podían retenerle sin juicio en una cárcel de la Unión Europea cuando se dirigía a Ucrania. Me sumé a todas las peticiones al respecto. Y seguí el caso, como su excarcelación y envío a Rusia, en un intercambio de prisioneros con el Kremlin, tan de cerca como pude. Por todo ello hoy echo de menos algunas rectificaciones o aclaraciones: puede que nos la colaran y la retórica de Pavel (así aparece en su pasaporte ruso) en su última misiva es una prueba de ello.

¿Quién paga sus multas?

Otros 34.000 euros de las y los socios del Athletic servirán para pagar multas. 30.000, porque un puñado lanzó bengalas en la explanada del estadio después del partido contra la Roma. Una irresponsabilidad manifiesta, lo primero, por el peligro. Lo segundo, porque es muy fácil tirar bengalas, liarla, cantar lo que sabes que no puedes cantar, cuando estás seguro de que tus bromas las abonará el club. Esto es, las socias y los socios. ¿Quién se arruina la vida, como aseguraban en Telebilbao los huelguistas de la “grada popular” (que de popular solo tiene el nombre) si sus tonterías las pagamos siempre las y los que les aguantamos?

Tienen todo el derecho, pero no la legitimidad

Quienes han justificado la violencia de ETA cuando mataba tienen todo el derecho del mundo a trabajar de lo que puedan, como cualquiera. Quienes han pasado por la cárcel por asesinar, secuestrar, extorsionar y colaborar en todo lo anterior, también lo tienen. Por supuesto. Pero carecen de legitimidad para algunas funciones. Esto también tenemos que abordarlo y normalizarlo. Y tenemos que comprender a las personas afectadas por el silencio que generan a su alrededor quienes justificaban aquella violencia: entiendo la “indignación en la Ertzaintza” (The Objective) por que Antton Morcillo esté dando clase de euskera a las y los agentes.

La verdad importa

Lo que hiciste y haces importa, y lo que dijiste y dices importa. Tiene que importar. Debemos dar el valor que tiene a la realidad y la verdad, y señalar a los trileros cuando intentan engañarnos. No, Ucrania no agredió nunca a Rusia y no, la culpa de que el conflicto haya llegado hasta hoy no es de Zelenski. Trump ha comprado, como si fuera uno más del rojerío vasco y español, el discurso de Putin y acusa a Ucrania con alegría, interfiriendo, además y con plena conciencia, en el futuro proceso electoral de aquel país. Miel sobre hojuelas para el autócrata, al que la realidad y la verdad no le importan. Al resto debe importarnos.

El modelo de negocio también importa

Me hace mucha gracia leer los argumentos de gente como Oscar Pierre, fundador de Glovo, que “reflexiona sobre las consecuencias de la contratación de 15.000 repartidores: no descarta tener que subir tarifas o no poder entregarlo todo a todas horas”, según Activos. Pobre, eh. Él, que había ideado un modelo de negocio perfecto si no fuera porque las personas trabajadoras tienen derechos. Ahora tiene que ser creativo con los ingresos: “Restaurantes y marcas comprando espacios publicitarios y palabras clave para aparecer cuando el cliente busca”. Es decir, vas a comer la hamburguesa de la marca que más paga. Oh, sorpresa.

¿Por qué callamos?

El gesto de Mapi León con Daniela Caracas, a la que según algunos medios (y cuando yo lo he visto también me lo ha parecido) toca y dice: “¿Tienes picha?”, está mal. Rematadamente mal. Si se confirma que le dijo eso, podríamos estar hablando de transfobia. También está mal que, después de lo que hemos visto y oído, la afición del FC Barcelona haya aplaudido a una posible agresora. Y por supuesto, está fatal el silencio que suena alrededor del tema y que solo rompen valientes como Gemma Herrero en Ara: “Si ya habíamos aprendido el ‘hermana, yo sí te creo’ no comprendo cómo se puede cuestionar a Daniela Caracas”.

Más De Marcos

Más De Marcos y menos… otros, vamos a dejarlo ahí. Me voy a centrar en lo bueno, que es mucho, que nos va a legar el actual capitán rojiblanco, un tío que es del Athletic y, además, sabe valorar lo que el club, la empresa y el equipo le han dado. Ayer anunció que se iba y todas y todos los que somos del Athletic y valoramos lo que nos han dado el club y los equipos de los que ha formado parte De Marcos, sentimos tristeza. Iba a pasar, ahora o la temporada que viene, pero eso no tapa el agujero que dejará en el vestuario y en el carril derecho del Athletic donde hoy sigue siendo el mejor jugador. Eskerrik asko danagatik, Oskar.

¿Qué han conseguido?

¿Qué han conseguido los matones que fueron a amedrentar a quien intentaba animar el domingo pasado en San Mamés? Lo mismo que el conjunto de los exhuelguistas: nada. Bueno, algo sí algo han conseguido: que mucha más gente se dé cuenta de lo que son, de lo que han sido siempre y de lo que van a seguir siendo aunque ayer retomaran la animación desde el fondo norte de San Mamés. No, no tenemos que dar ningún valor a su anuncio porque no lo tiene: abandonar el chantaje y el acoso para recuperar el protagonismo no es generoso. Solo espero que los jugadores no les rindan pleitesía.

¿Qué consigue?

Santiago Abascal prefiere judicializar la política antes que hacerla. Ahora anuncia que “acudirá a la Justicia” si el PNV no devuelve lo que le quitó la Gestapo, disfrutó Franco, mantuvo el gobierno español por el morro y ha sido, por fin, restituido. ¿Qué consigue Vox con esto? Primero, generar incertidumbre porque lleva el balón a un campo en el que los árbitros son de parte. Después, gastar tiempo y dinero para montar argumentos y alegaciones, otra vez. El tiempo que los partidos dedican a los jueces no lo dedican a la ciudadanía, esto es así, y Abascal lo sabe pero no le importa. Ojalá sí le importase a quien vota.

Qué ridículo, Alberto

Al final, el PP va a votar a favor del ómnibus después de que el PSOE y Junts alcanzaran un acuerdo y los catalanes anunciasen, primero, su voto a favor. Y aunque ese decreto ha sido adelgazado, sigue conteniendo las líneas rojas que el propio PP había marcado, como la sede del Gobierno Vasco en París que pagó el PNV (a ver si empezamos a llamar al “palacete” por su verdadero nombre). En resumen: que Alberto Núñez Feijóo ha hecho el ridículo, y su partido, también. Y no es la primera vez que lo hace, por cierto, por jugar a ser más de derechas que Vox. De lo suyo gastan.

El mirlo blanco

“Albert Rivera, denunciado por su ex por no pagar las extraescolares de su hija”, leo en El Plural, y me acuerdo de aquella entrevista amable que le hizo Pablo Motos, en la que el líder de Ciudadanos, en su mejor momento, reconocía que se hacía el dormido cuando esa misma hija se despertaba por la noche. Ja, ja, cómo se reían los dos. Después, hemos sabido que Rivera se pensaba que trabajar fuera de la política era poco más que tener una nómina. Y ahora nos enteramos de esto. Una joyita. El mismo que lideró el partido que cebó a Vox y a Alvise Pérez, y que se rodeó en el Congreso de maleducados y malencarados.

Y ahora, ¿qué?

A estas alturas, quien asegure que la ley española de vivienda, esa que Bildu y ERC aprobaron al gobierno español, buscaba algo más que un beneficio electoral rápido, simplemente, está en el ajo. La realidad es esta, después de varios meses de que la ley haya entrado en vigor: “España es uno de los cuatro países donde Bruselas ve riesgo de una futura burbuja inmobiliaria” (InfoLibre). Y la perspectiva de futuro, esta otra: “La vivienda de segunda mano en España todavía está más barata que en la burbuja 2007. Pero esto va a durar poco” (El Blog Salmón). Y ahora, ¿qué? ¿A quién van a echar la culpa?

El hijo de la ertzaina me representa

El hijo de la ertzaina y el guardia civil me representa. Sí, por supuesto, sin ninguna duda, hago mías las palabras de Unai Simón cuando pide que quien no deje animar se quede en su casa y no vaya a San Mamés. Sí, por supuesto, sin ninguna duda, prefiero al hijo de una madera y un pikoleto que es el mejor en su trabajo y siempre ha defendido al Athletic que a un cipayo que viene a manejar el cotarro ordenado por no sé quién (sí lo sabemos) y que si tiene que perjudicar al Athletic para beneficiar a quien le manda lo va a hacer (y lo han hecho). Allá quien se quede con el que no deja animar y con quien le pone ahí a cumplir órdenes.

Sujétale el cubata

Podría tirar del meme que dice: “En su cabeza sonaba espectacular”, pero prefiero tirar de otro. Ese en el que uno dice: “¿A que no eres capaz de mezclar la inteligencia artificial y las haciendas forales vascas?”. Y Pello Otxandiano responde: “Sujétame el cubata”. Porque su frase no hay por dónde cogerla: “No tiene mucho sentido en la era de la inteligencia artificial que este país tenga tres haciendas” (El Diario). ¿Qué tiene que ver una cosa con las otras? ¿Y Nafarroa no cuenta como “este país”? El día en el que se entere de que en Francia hay otro modelo de recaudación pero Iparralde también es “este país” va a flipar.

También es el PP

No me escondo: me alegra oír voces en el PP como la de Esteban González Pons que llama “ogro naranja” y “macho alfa de una manada de gorilas” a Donald Trump. Si hay un día para citar a Libertad Digital tiene que ser este. Lo que me apena es ver que esas voces son mal recibidas, que en el PP ha ganado por completo el relato más ultra, más carca, más rancio, más neoliberal, la opicón que pugna con Vox en vez de arrinconar a los de Abascal. Lo que ha pasado con la columna del eurodiputado es un fracaso para esas personas del PP más cuerdas, más posibilistas y que saben distinguir entre populismo y democracia.

Otro matchball salvado

Ni lo escribo como mérito, ni me parece una buena noticia, ni voy a ayudar yo a construir la leyenda de “animal político” de Pedro Sánchez: que este haya salvado otro matchball contra Junts, esta vez, adelgazando el conocido como “decreto ómnibus”, simplemente no es serio. Y no lo es por ambas partes, pero sin duda el presidente español tiene más responsabilidad porque él puso encima de la mesa el paquete de medidas y él ha aguantado casi una semana para que PP, Vox y Junts se cuezan en su propio jugo (y a esto se le llama electoralismo). Ahora cambia el paso e intenta ponerse una medalla. ¿Nos la cuela? Yo diría que no.

“Los soldados israelíes que siguen”

Nos vamos a Bluesky, la red social que algunos han elegido como la alternativa a X, y nos encontramos allí a Javier Espinosa, el reportero de guerra (de los de verdad, de los que se tiran meses en la zona de conflicto) al que ya seguíamos en la red de Elon Musk y al que hemos seguido hasta esta cuyo modelo de negocio desconocemos. Espinosa informaba: “Frente a frente. La población sureña del Líbano y los soldados israelíes que siguen ocupando sus aldeas. En los dos últimos días han matado a 26 personas, algunas con ametralladoras pesadas”. Sí, el ejército israelí sigue matando por orden de su gobierno ultra, ahora en Líbano.