Abascal es el que menos importa

Leo en Público que “Abascal blinda su poder en Vox en una huida hacia adelante para capear la oposición interna. Su férreo control del aparato del partido es también un síntoma de las dificultades para dirigir una formación en declive”. Y realmente me importa poco: entiendo que Abascal quiera seguir viviendo bien, como hizo cuando Vox era una banda de frikis a la que todavía no conocía nadie, no tenía ingresos pero sí tenía sueldo y, por lo que parece, generoso. Lo importante es quién está detrás, quién pagaba, quién manda, quién permite a Abascal liderar la formación, quién maneja los hilos de la extrema derecha en España.

Un partido es el futuro

Si algo trajo lo que conocimos como “nueva política” es la falta de explicaciones: las y los representantes o los partidos no tienen que justificar cambios de opinión que en algunos casos son de 180 grados. Por ejemplo: la formación que aseguró que la fórmula de los partidos estaba demodé y que iba a lidera una transformación, puso el pasado fin de semana fecha para su constitución como partido político, de los de toda la vida. Yolanda Díaz eclipsó así el décimo aniversario de Podemos (que sí acertó creando un partido), anunciando una especie de congreso fundacional en marzo. Eso, sí, no se desdijo de sus aseveraciones previas.

Más decretos que leyes

Por supuesto, soy plenamente consciente de que Pedro Sánchez le tocó gobernar durante la pandemia, y que buena parte de esos decretos que suma son de aquella época. Pero ni eso justifica el dato que ha puesto encima de la mesa The Objective: “Sánchez es el único presidente del Gobierno que ha aprobado más decretos que leyes. El 54% de las iniciativas legislativas aprobadas desde verano de 2018 son imposiciones del Ejecutivo del PSOE”. Ni siquiera Rajoy, que fue el que convirtió el decreto ley en una herramienta de uso habitual, firmó esos números que muestran a un Sánchez muy inseguro.

Para qué sirve Europa

“Microsoft no transferirá datos personales fuera de la Unión Europea para evitar multas”. Solo este titular de Hipertextual explica mucho mejor qué hace Europa y las bondades de la Unión, que muchas crónicas farragosas. No echo la culpa a las y los cronistas, por supuesto: la información que damos de la Unión siempre es compleja y parece lejana. Pero a veces la aplicación de sus políticas nos regala titulares como el referido. Titulares que son mucho más: la garantía de que una gran tecnológica cumplirá una normativa que protege a la ciudadanía europea. Ahora, que cumplan las demás que, además, son más peligrosas.

Pero también llega tarde

Europa hace cosas bien pero las hace con cierta lentitud. Eso es indiscutible. Esto que hemos encontrado en El Independiente es, como la noticia en Hipertextual del párrafo anterior, muy elocuente y explicativo: “China lleva 20 años invirtiendo en minerales críticos y, por eso, construyen prácticamente todas las baterías del mundo”. “Lo que ha hecho Europa y también Estados Unidos es darse cuenta de la necesidad que tienen y lo han puesto en su legislación, pero no han incentivado de la misma forma a sus industrias y a los inversores, porque tienen prejuicios con respecto a la minería”.

El horror

La noticia del asesinato de dos niñas a manos de su padre en Tenerife es de esas que impactan y también de esas que algunos medios van a retorcer para exprimir hasta la última gota: del descubrimiento de los cadáveres al tanatorio, del ahí, al funeral. Y del funeral, al infierno televisivo y humano. Un humorista, Ángel Martin, advertía en su informativo mañanero, entre lo divertido y lo serio, de que son solo dos niñas y de que los periodistas teníamos que enfocar el hecho como si se tratara de las nuestras. Pero el problema ya no es solo de los medios: en miles de tuits o grupos de WhatsApp va a ganar el morbo y perder la sensibilidad.

El facherío ilustrado

A quienes creen que un buen libro es mejor que la televisión, el fenómeno que señalan en El Confidencial les puede trastocar un poco su teoría: los volúmenes que exhiben y refuerzan un pensamiento de derecha española son muchos, variados… Y muy vendidos. La izquierda ha perdido las librerías y no solo porque las empresas de distribución favorezcan a una opción política sobre la otra: ahora es la derecha la que lee más, novela (de derechas) pero también ensayo (bien rancio), mientras la izquierda se ha pasado al pensamiento efímero de las redes sociales, donde pueden lograr con una agitación rápida pero poco duradera.

Europa, sin manual…

Con muchos libros, de derechas y de izquierdas, pero sin manual de instrucciones: si algo llevamos contando mal durante décadas es el proyecto europeo. Y ojalá me estuviese refiriendo a la Eurocopa. Según Magnet, que cita el último informe del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores, “los europeos ya no creen en la Unión: la mitad de ellos piensa que el proyecto está “roto’”. Y todo esto sucede después de una pandemia, durante la vacunación y a puertas de un plan de recuperación económica que nos tiene que recordar, pese a todo, que formamos parte del territorio del mundo con más derechos y garantías para su ciudadanía.

Mal contado, mal hecho

De esta Europa no emociona ni su torneo de naciones más icónico. Y la selección española, menos. Además, por lo menos uno de sus jugadores se ha contagiado, ha trastocado todos los planes de entrenamiento y concentración, y ha abierto un nuevo conflicto, el de las vacunas. Sigo pensando que los futbolistas no deben ser vacunados, pero también creo que el gobierno español no ha andado muy vivo para evitar el debate sobre con qué vacuna. Ha fallado todo en la semana en la que empieza la Eurocopa: los hechos y la comunicación, y por eso vemos más chistes como los de El Mundo Today que información sobre los rivales.

Cómo contar una buena noticia

Hace muchos años que acabé la carrera pero yo creo que en Periodismo no nos enseñaron a contar las buenas noticias. Así que no sé muy bien cómo tratar la que daba el alcalde de Bilbao en primera persona en sus redes sociales: después de sustraer la Eurocopa y mandarla a Sevilla, la UEFA indemnizará a Bilbao con 1,3 millones de euros, y llevará a San Mamés una final de Champions femenina y una de Europa League masculina. No estoy acostumbrado a tratar con buenas noticias, pero esta, desde luego, lo es: la ciudad ha sido compensada y podremos vivir el fútbol postpandémico con la intensidad que merece.

“El colmo de la jeta”

La extrema derecha somete al adversario por definición. Así que los que han optado por pegarse a Vox no podrán decir que no estaban avisados. Y si puede humillar lo hace. Porque así es como ha quedado Albert Rivera y su partido tras el ya famoso tuit de los de Abascal: “El colmo de la jeta. Dile al acojonado y sinvergüenza de tu jefe que se deje de cordones sanitarios, de lamerle el culo a Macron y que os permita sentaros en una mesa y llegar a acuerdos como gente normal. Y si no, pactad con el PSOE, que es lo queréis”. Hagan lo que hagan ahora los naranjas, ya han sido arrastrados.

“CM de verano”

Yo leo el tuit anterior y me imagino a Iván Espinosa de los Monteros dictándolo, igual que el siguiente que publicaron relanzando el de los insultos, por cierto: “No es fácil aguantar callados el desprecio de Ciudadanos a nuestros votantes y las mentiras a los suyos. Nuestro CM de verano, aunque tenga razón, debe vigilar el lenguaje. No podemos garantizar que si Ciudadanos se empeña en dar los gobiernos al PSOE, esto no vuelva a suceder”. Es evidente que no se arrepienten y que este es su estilo (incluida la excusa de echar la culpa al community manager suplente). Si PP y Ciudadanos lo validan cargarán con las consecuencias.

El empeño por no ser bienvenidos

Sigo con Ciudadanos porque en ese partido siguen empeñados en salir escaldados: Inés Arrimadas ha anunciado que, aunque no serán bien recibidos, acudirán a la manifestación del Orgullo en Madrid. Un tuitero le recuerda: “Inés, te hemos manifestado de mil formas distintas que no os queremos allí. Eres una acosadora de manual”. En Euskadi y sobre todo en Catalunya saben cómo se las gastan los del partido naranja: móviles al 100% de batería y con la cámara de vídeo encendida todo el tiempo para grabar la respuesta a su provocación. Porque no se manifiestan para sumar sino para provocar.

¡Hay que ver cómo era la casta!

Pablo Iglesias sigue sin tocar poder, aunque el hombre lo intenta. Así que cuando dio las gracias de un modo tan efusivo a los profesionales de la Sanidad Pública que habían atendido a sus hijos estaba reconociendo, de modo implícito, que quien había montado el sistema sanitario de todos lo había hecho bien. Esta semana, recordando la aprobación del matrimonio entre personas del mismo sexo en 2005, acepta también de un modo explícito que aquella casta acertó, vaya. Algo se le ha pegado también de la caspa a Iglesias, que también ha publicado un tuit lamentando el fallecimiento de Arturo Fernández.

Falta democracia en Europa

Pepe Fernández Albertos acierta cuando critica en Twitter la incoherencia de muchos políticos europeos que durante la reciente campaña avisaban de cuánto nos jugábamos votando a nuestros representantes a los Parlamentos de Bruselas y Estrasburgo… Y poco más de un mes después se han repartido los puestos de poder de la Unión entre ellos, sin tener en cuenta ni siquiera para la galería la voluntad de los europeos en las urnas. Luego se quejarán de desafección y pedirán a los medios que informemos más y mejor sobre Europa. De momento, lo que hay que contar es solo un caro cambalache.

Empecemos

Las elecciones que empiezan esta misma semana son interesantes porque en España el PP se juega su subsistencia, son importantes porque en Euskadi elegimos a nuestros alcaldes y alcaldesas, y a los junteros y junteras que controlarán las Diputaciones Forales que recaudan y reparten, pero también lo son porque elegimos a nuestras eurodiputadas y eurodiputados. Asier Areitio ha hecho un listado de 12 grandes temas de los que se ha ocupado Europa y que a los vascos nos importan, desde lo de Altsasu al derecho de Bixintxo a mostrar una Ikurriña pasando por nuestros arrantzales, igualdad de género o personas con discapacidad.

“Más fuerte que nunca”

Después de una derrota electoral que le ha llevado al peor resultado de su partido y de un viraje en el discurso que le hace parecer un chiflado, Pablo Casado no puede decir que “el PP está más fuerte que nunca” porque la ciudadanía sabe que está mintiendo. No es que lo perciba, como hasta ahora cuando le veía dar cifras y argumentos con histrionismo, es que lo sabe: sabe que el PP está mal, que puede estar mucho peor y que en su partido están esperando a Casado con las navajas afiladas. Y si la ciudadanía sabe todo eso el peor error que puede cometer Pablo Casado es mentir diciendo que todo va bien.

Rosa, cuéntanos los detalles

Este es uno de los últimos tuits de Rosa Díez. Léalo con atención: “Todo el mundo parece aceptar que Sánchez indultará a los golpistas. Me recuerda los tiempos en los que se escuchaba eso de ‘algo habrá que dar a ETA para que deje de matar’. Cada cesión es un punto de partida para el próximo envite de los enemigos de la democracia. ¿Damos la batalla?”. Sí, dice lo que dice: compara a ETA con los políticos catalanes y plantea de nuevo plantarse ante Pedro Sánchez con términos bélicos. Yo lo que estoy deseando es que Díez concrete de una vez cómo pretende iniciar una guerra y, sobre todo, con quién.

Dando lo suyo al nazi

Shine McShine hacía en Twitter la comparativa correcta con su comentario: “‘Me agredieron por llevar una pulsera con la bandera de España’, versión Americana”. Se refería a la agresión que ha sufrido un nazi que no ha tenido reparo nunca en posar con su bandera y colgante de esvásticas, y que ahora se queja de que le han golpeado por llevar una gorra con el lema “Make America Great Again”, de Donald Trump. El usuario JP es el que primero mostraba la noticia de la agresión y la imagen del personaje, tras él, varios tuits fotos y vídeos nos enseñan a un nazi orgulloso de exhibir su ideología y sus símbolos.

Otro Athletic

Con Ziganda, mal (tampoco le dimos otra oportunidad). Con Berizzo, peor (a este le dimos demasiadas oportunidades). Con Garitano, de lujo al principio (de hecho, será uno de esos entrenadores que cuando alguien lo recuerde todos sentiremos agradecimiento), pero la situación ha cambiado. Egoitz Moreno lo resume en tres líneas mejor que nadie: “Vale que estábamos en segunda, que los números mandan y que Garitano se ganó la renovación… Pero no jugamos a nada”. Todas las reflexiones sobre el Athletic en las redes sociales ayer eran similares: el Athletic todavía tiene que resolver su renacimiento.