Es una de las grandes paradojas de esta sociedad: dos personas con exactamente el mismo talento, el mismo nivel de estudios y la misma capacidad de sacrificio por su trabajo pueden tener sueldos con diferencias enormes solo por el sector que haya elegido cada una. Porque no es lo mismo dirigir un banco que cualquier otra empresa. Lo leemos en Vozpópuli: “El consejero delegado de BBVA acumula 15 millones para su jubilación al año de estrenar el cargo” y “un directivo de Bankia confirma que Rato contrató a su excuñado y le cuadruplicó el sueldo en 21 meses”.
Ya hay fecha para las terceras elecciones
Yo pensaba que no iba a haber segundas, que al final, el PSOE iba a dejar hacer al PP por medio de una abstención, después de que Pablo Iglesias y los enemigos dentro del partido de Pedro Sánchez hicieran inviable la alternativa. Ahora estamos en la misma situación pero con la alternativa desactivada por el crecimiento del PP, y no veo por qué el PSOE dará su brazo a torcer en esta ocasión, así que las terceras elecciones son una posibilidad real que en OK Diario fijan el 25 de diciembre.
El control sobre Ahora Madrid
Manuela Carmena abrió la caja de Pandora cuando afirmó en un curso de verano de El Escorial que Ahora Madrid, como tal, no existía, que era solo una herramienta para llegar al poder. Según El Confidencial, grandes nombres de la formación como Guillermo Zapata, Celia Mayer y Javier Barbero habrían aprovechado el hueco para intentar dotarlo de contenido y, de este modo, controlarlo. Porque desde el primer momento el reto de Carmena fue doble: gobernar el ayuntamiento y controlar una formación sin ideología llena de gallos y pensadores.
Machismo on-line
Llevo años diciéndolo: a nadie le quitan el carné de gilipollas cuando se abre un blog, una cuenta en Twitter (especialmente), en Instagram o un canal en YouTube. De hecho, a algunos parece que se lo renuevan. En El Español han hecho un repaso a las barbaridades machistas que sueltan algunos youtubers de cierto éxito. Comentarios y tutoriales para ligar, supuestamente, que tumban años de trabajo por la igualdad y el respeto entre las personas.
Una “start-up” no es una barra libre
David Bonilla ha descrito en su blog cómo el cierre de Take It Easy no ha sido ni tan bucólico ni tan heroico como lo pintan sus propietarios, dos hermanos que se despiden entre sollozos y que reivindican la valía de su idea que –como suele ser habitual– tendrá éxito en un mercado más maduro. De momento, ellos acumulan deudas a proveedores y les acusan de no haber despedido a los trabajadores, que viven en un limbo legal. Parece que algunos se convencen de que tienen una “start-up” y olvidan que tienen obligaciones empresariales.