No somos de piedra

Siempre actué en Facebook (y sigo haciéndolo, claro) como si todo lo que publicase fuera absolutamente público y como si toda la información que yo iba proporcionando, incluso en forma de inocentes juegos, fuese a ser vendida por los de Zuckerberg a cualquier otra empresa para colocarme publicidad. Así que ahora no me sorprenden noticias como la exclusiva del Times que confirma que lo han hecho. Pero sí me llama la atención que estas informaciones estén acabando con la red social, muy enferma por lo que ha permitido y puede que terminal por lo que ha hecho.

¿Qué permite?

¿Qué es lo que permite Facebook que nos ha hecho recelar de la red social digital que ha cambiado el modo de relacionarnos? Básicamente, que nos tomen por tontos. La sociedad estadounidense reaccionó contra Facebook cuando supo que las noticias falsas para moviliza el voto hacia Trump no habían sido cortadas. Y ahora sabemos que en Andalucia Vox ha basado su activismo en Facebook en fomentar enfrentamientos entre defensores de la izquierda buenista y los de la derecha organizados que, con un discurso de desmontaje bien preparado, iban ganando las batallas.

Más madera

Pablo Iglesias tiene todo el derecho a cogerse su permiso de paternidad, pero abandona el Congreso hasta marzo cuando el gobierno se juega los presupuestos y con unas condiciones que la mayoría nos disfrutamos. ¿Se atreverá a volver a hablar de “la casta”? Mientras anunciaba que va a cuidar de sus hijos, el proceso interno en Podemos de elección de su candidatura concluía: él era el único candidato a ser el cabeza de lista para el Congreso y para ser presidente del Gobierno en las próximas generales, dando lugar a un pantallazo temerario por lo ridículo.

El rosario de la aurora

A parecer, el rosario de la aurora terminó en un pueblo de Cádiz a farolazos y con un cura muerto cuando dos hermandades rivales coincidieron durante sus procesiones de madrugada en un callejón estrecho. Lo he buscado en Google antes de resumírselo en la columna. Y no se me ocurre mejor imagen para expresar cómo será el fin de Trump: trágico y, al mismo tiempo, dantesco. Con el tiempo, como el suceso gaditano, incluso resultará grotesco, cómico y fuera de toda lógica. La renuncia de James Mattis por el anuncio de la Casa Blanca de que da por derrotado el ISIS es solo un capítulo más.

Los inventos de Elon Musk

Creo que en Magnet lo resumen muy bien: “Elon Musk inventa el metro (con menos vagones, para menos pasajeros, mucho menos eficiente)”. El de Tesla, harto del tráfico en la ciuad, tuvo una idea brillante, y como tiene mucho dinero y nadie quiere contradecirle, la llevó a cabo: un túnel con raíles en los que colocar sus coches (por supuesto, que así se hace mucho dinero), llenarlos de gente y enviarlos unos kilómetros más allá. Dicho y hecho (de un modo bastante precario como se ve en los vídeos). ¿Qué pensará Musk el día que alguien le lleve a una estación de metro?

Aznar en estado puro

El resumen de Jesús Cintora de la última entrevista a Aznar resulta perfecto para dibujar al ex presidente: “El PSOE de Pedro Sánchez no es una fuerza constitucional. Podemos no oculta sus tendencias con Venezuela e Irán y quieren terminar con el sistema político. Vox quiere reformarlo, no terminar con él”. Sus declaraciones realmente no aportan nada nuevo, pero la situación política actual, que permite poner nombres de partidos a sus obsesiones, sí: quien no piense como él es un antisistema, y la extrema derecha está formada por reformistas que a él le valen.

Patriotismo es pagar

No hay mejor manera de ser patriota que pagar en tu país, por supuesto los impuestos, pero también todo lo que corresponda. Así que, sí, tienen doble delito quienes lucen la bandera de su país (el que sea) y luego les da igual lo que pase con su economía a pequeña o gran escala. Víctor González Coello, vicepresidente de Vox, ha sido inhabilitado por incurrir en irregularidades contables relevantes al quebrar la empresa que administraba, dejar 4 millones de euros en deudas y despedir a 60 trabajadores. Pero como bien tuitea Serralvo lleno de sarcasmo: la bandera de España, en los tirantes.

Y no cobrar

Soy de los que opina que todos los votan a Vox no son de extrema derecha: desencantados, indignados que no han sido atendidos por Podemos, y antisistema de muchos tipos se suman a los fascistas genuinos. Lo que me sorprende es que ninguno de ellos haya reparado en que Santiago Abascal, su líder, como bien recuerda Antonio Maestre, concentra justamente todo lo que combaten: “Habla de oligarquía el que nunca ha tenido más sueldo que el dinero que venía de las administraciones gobernadas del PP mediante carguitos, subvenciones y chiringuitos”.

Sí, indignados

Desde que conocimos los datos de voto en Andalucía no solo creo que la mayoría que optó por Vox la forman personas de lo más normales, es que estoy convencido de que votantes de Podemos han pasado a la extrema derecha con facilidad: los indignados no han encontrado cobijo y siguen buscando quien les defienda, por extremo que parezca. Además, los morados no ponen difícil la elección: “Errejón besando la bandera de España y Pablo Iglesias diciendo que Venezuela está en la mierda. Bienvenidos al team facha, hijos de puta”, tuitea Punta con su conocida acidez.

Sobre ser buena persona

Celebro comprobar que no estoy solo y que José María Albert también se ha dado cuenta de lo feo (por no decir algo peor) que ha sido el aparentemente bienintencionado gesto de Alberto Rodríguez con Alfonso Candón. El primero, diputado de Podemos, se ha despedido del segundo, del PP, diciéndole: “Jamás habría creído que llegaría a decir de una persona del PP que es una buena persona”. Muchos rieron y la prensa hasta aplaudió. Pero como sugiere Albert, démosle la vuelta a ver si tiene gracia: “Jamás habría creído que llegaría a decir de una persona de Podemos que es una buena persona”.

La culpa no es de Tinder

Los datos de la baja natalidad en España han sido contextualizados en la Cadena SER, vía Twitter, “en la era de lo explícito”, con Tinder y la pornografía como máximos exponentes. Hace bien Mr. Insustancial en recontextualizar la noticia: “Nadie está interesado en hablar de economía, al parecer”. Porque la clave no está en que una generación en edad de formar una familia busque el placer sexual en vez de procrear, sino en que mantener a esa familia es caro y difícil, y sobre todo en que la de la conciliación es la mayor milonga (por no decir mentira) del siglo XXI.

La generación más mojigata de la historia

Además, tener acceso a herramientas como Tinder o a todo el porno del mundo a golpe de clic, no asegura que los usuarios dejen de ser unos mojigatos. La Cátedra de Cultura Científica de la UPV/EHU ha tenido que retirar una foto de su web porque ilustraba un texto sobre la leche sin lactosa con una mujer con amplio escote y los labios manchados. La imagen ha supuesto un pequeño escándalo en Internet y la Cátedra se ha visto obligada a cambiarla por un bodegón de productos lácteos que, en principio, no solivianta a nadie. La sobrecorrección es una mierda.

¿Con qué dinero?

Ferrán Martín sacaba punta a una noticia que comentaba Gonzalo Boyé en Twitter: “Vaya… quién se lo habría imaginado: destapan que Juan Carlos habría pagado a Eva Sannum para que dejara a Felipe vía”, escribía el abogado. “Pero, ¿pagó él?”, apostillaba el humorista gráfico con acierto. Porque, ¿con qué dinero habría tentado el entonces rey de España a la novia de su heredero? ¿Con el suyo, que parte de una asignación pública o por ser una cuestión de Estado podríamos hablar de una partida especial? En cualquier caso, se lo aviso: todo parte de una conjetura de El Nacional y Boyé.

Victimizando a Vox

Solo faltaban ellos: los justicieros de Anonymous a los que nadie llama nunca pero se presentan porque, oigan, alguien tiene que victimizar al verdugo. “Vox sufre un ciberataque de Anonymous que deja al descubierto los datos de 30.000 simpatizantes”, leemos en República.com. Al fascismo se le combate, pero no con más fascismo, que es lo que practican los de Anonymous: el que no piensa como a ellos les gusta, caña. Anonymous es el ejemplo perfecto de esa frase que esgrimen los que tienen que defenderse: “Los antifascistas de hoy serán los fascistas del mañana”.

Estamos viendo historia

Aunque el Athletic ocupa el 99% de nuestra atención futbolística, a veces tenemos que atender a otros detalles que pasan en el universo del balón: “Messi ha marcado 19 goles de falta directa en La Liga en los últimos 4 años, más que cualquier equipo (con todos sus lanzadores) de cualquiera de las 5 grandes ligas en ese mismo período de tiempo”. La estrella del equipo que ha sido nuestro máximo rival de la década es, sin duda y por mucha pelea que generen los medios especializados para vender, el futbolista más importante de la actualidad y, posiblemente, de la historia.

Libertad de prensa

Kiko Mestre, del Diario de Mallorca, lo expresaba perfectamente en Twitter: “Hoy he sido yo, pero mañana será otro periodista. Ante estos atropellos, ¿cómo se van a fiar ahora las fuentes de los periodistas si requisan sus herramientas de trabajo?”. Se quejaba de la intervención de sus equipos de trabajo (incluido el teléfono móvil) y los de una redactora de Europa Press que habían investigado el “caso Cursach”. La orden judicial que ha permitido esta felonía abre, como apunta Mestre, una puerta más al pasado retrógrado que, es evidente, muchos quieren restituir en España.

La importancia de los periodistas

El uso generalizado de Internet ha traído un interés mayor que nunca por la información. Una vez arrinconada la mandanga del “periodismo ciudadano”, tenemos que reclamar la importancia de los profesionales, como Mestre, como la compañera de Europa Press, y como Jamal Khashoggi, que según la revista Time es la persona del año, después de haber sido torturado hasta la muerte en el consulado de Arabia Saudí en Estambul. Hace bien la publicación estadounidense al señalar la gravedad de los ataques, en este caso atroz, a los periodistas.

Cuestión de perspectiva

Los que más daño hacen al periodismo son los que van de listos, sean periodistas o no. Como los que han criticado, entre risas y mofas, que varios fotógrafos sacaran una foto a una pequeña hoguera en los disturbios en París para, según algunos tuiteros, hacernos creer que era una gran barricada. La agencia AFP ha salido al paso también en Twitter: las imágenes ni siquiera son del mismo día y el truco de perspectiva no es el de los fotógrafos, sino el de todos esos que van de listos y quieren hacer creer que todos los periodistas estamos al servicio de oscuros intereses.

¡Por supuesto que todos somos cronistas!

Insisto en que Internet ha traído una mayor demanda de información, pero también más oportunidades para que todos seamos cronistas: hay cuentas en Twitter, en Instagram y, especialmente, en Flickr, que son galerías estupendas de lo que hemos hecho y vivido. Y hay momentos en los que estas redes y también Facebook puede servirnos para consumir y ofrecer información de alcance: Izaskun Bilbao está acostumbrada a generar noticias pero el martes le tocó darla, ya que se encontraba en Estrasburgo cuando tuvo lugar el último ataque terrorista en Francia.

Y denunciantes

Joan Baldoví hace bien, muy bien, en denunciar vía Twitter los insultos y acusaciones de José María Llanos, presidente de Vox en Valencia: “Estúpido, ignorante, majadero, y traidor a la democracia y a Valencia. Eres el perfecto ‘ejemplar’ de comunista trasnochado y peligroso. No te lo voy a consentir. Tú odias a España y te paseas con terroristas. Imbécil! Se te está acabando el chollo” (sic). Para eso sirven los canales de comunicación: para insultar y, sobre todo, para mostrar a quien se retrata deslizando amenazas y escribiendo exabruptos. El tuit sigue ahí.

Lo que opina un andaluz

Si siempre es interesante leer a Antonio Agredano, esta vez su condición de andaluz y socialista militante solo suman. No se lo pierdan: “No tengo miedo a Vox, pero sí una profunda tristeza. Si Vox es una alternativa, es que las opciones eran realmente pobres. (…) Vox es más consecuencia que causa. Algo esperable. Un síntoma más de estos tiempos líquidos. Informarse a través del WhatsApp. Individualismos insostenibles. Vileza en los partidos políticos. Medios de comunicación privados al servicio del espectáculo y las audiencias”, escribe casi como si nada.

Por esto

Si Vox ha alcanzado un resultado tan tremendamente bueno, como bien apunta Agredano, es porque algunos medios que alardean de situarse en su contra les han dado espacio (y han provocado saltos mortales ideológicos de miles de votantes). También porque medios serios hablan de lo que a Vox le interesa (inmigración, discriminación positiva, Europa). Y porque, vaya, hay muchos españoles que consumen esa ideología: en Libertad Digital anuncian con orgullo que el programa de Federico Jiménez-Losantos es uno de los podcast más descargados del año en iTunes.

Pan y circo

No, no soy uno de esos que van de listos y aseguran que tanto fútbol y tanta tele atonta. Al contrario, creo que si algo nos vuelve más tontos es el terreno de juego de los que van de listos: Internet. Pero sí me parece sintomático que entre los vídeos de YouTube más vistos del año en España abunden los de actuaciones de OT o Factor X. Al final, la televisión para adolescentes ocupa tiempo por partida doble: en la propia tele y en los millones de revisionados en Internet. Por cierto, el que más tiene (20 millones de reproducciones) es el famoso “Cómeme el Donut”.

Google nos posee

El paso de gigante de Google fue integrar nuestro correo electrónico con su navegador: hoy abrimos sesión cuando nos conectamos a Internet, directamente, y Google va recolectando información sobre nosotros, casi, uva a uva. Pero le damos tanta sin darnos cuenta que, según ADSL Zone, Google ya es capaz de reconocernos cuando nos sentamos delante de un ordenador y, sin abrir sesión, empezamos a operar: lo que buscamos, lo que hacemos, cómo lo hacemos, permite a Google establecer un patrón. Pero la mayoría no hacemos nada malo, así que, ¿de qué preocuparse?

El trumpismo en una noticia

Espero que Donald Trump no revalide su mandato y pierda su reelección precisamente: una salida dolorosa es lo mejor que podría pasarnos a todos para evitar también a futuros Trumps. Un tipo insensible, encerrado en sí mismo, y que ha dado alas y dinero a los Bannon de turno que recorren Europa vertebrando y dando aliento a la extrema derecha. Un tipo que no se da cuenta de que una inmigrante ilegal como Victorina Morales es la que le hace la cama, limpia su baño y quita el polvo a sus trofeos de golf en el club para millonarios en el que practica este deporte.