Carta abierta a Iker Muniain

A pesar de que no suele ser lo habitual en este tipo de cartas, voy a empezar por la conclusión: Muniain no debería ser el capitán del Athletic.

¿Se ríe de nosotros? (Foto: Athletic Club)

Su rueda de prensa de ayer es otra muestra clara de ello. 23 minutos de los cuales la mayoría demuestran una soberbia y un estar por encima del bien y del mal, y un me da igual lo que piensen la mayoría de los socios de este Club, que dan hasta vértigo, aunque es algo que ya sabíamos, por la reincidencia, digo.

Estoy de acuerdo con él en que me da igual la camisa y los pantalones que lleve, el color de su coche y sus gustos musicales, y añado, su pelo,… Me pueden gustar o no, pero me da igual lo que vista, lo que lleve, lo que escuche.

Con lo que no puedo estar de acuerdo, ni yo, ni creo que nadie, es que no importe que se encienda un puro, porque eso ya va a afectar a su físico y a su rendimiento deportivo, por mucho que él diga que no. Fumar mata. Y él se enciende un puro. Además de que afecta a su rendimiento…. ¿ es buen ejemplo para los seguidores más jóvenes? No.

Se le olvida que en esas imágenes se les ve en grupo, sin mascarillas, sin distancia, en tiempo de pandemia. ¿Malo para la salud? Arriesgado, peligroso, irresponsable,… si no no tenemos más que ver las consecuencias en la temporada pasada con todos los jugadores que volvieron con COVid de sus vacaciones y cómo les afectó físicamente y en su rendimiento. Además, otra vez, del ejemplo horrible, que supone para todos.

No, Muniain no debería ser el capitán del Athletic.

Y lo más grave de todo, es el tema deportivo y que influyó gravemente en los resultados que consiguió, o más bien, no consiguió, el Athletic la temporada pasada. Lo que todos ya sabíamos, que jugó lesionado la final contra el Barcelona, lo aclaró. Efectivamente se lesionó dos días antes. Y dijo que hicieron lo posible para que llegase en condiciones óptimas porque, cito literal «el equipo le necesitaba». «Yo quería estar en el campo ayudando a mis compañeros», «… considero que el equipo en un momento tan importante me necesitaba». «Puse en riesgo mi integridad física por estar con mis compañeros y al final, estuve y, por otra parte, lo pagué»

Si os fijáis predomina la primera persona en todo lo dicho, yo, yo, yo. El problema es que el fútbol es un juego de equipo, al que hay que tener en cuenta. Quizá sería mejor… nosotros, nosotros, nosotros. Y que un jugador considere que puede jugar lesionado, antes que cualquiera de sus compañeros que están bien físicamente, dice muy poco de él, así como dice muy, muy poco del cuerpo técnico que lo permite. El resultado fue el que fue. Que salió los primeros 45 minutos a arrastrarse por el campo, ya que no podía ni correr. Jugar una final con un jugador menos 45 minutos. Y encima el capitán, el que debería dar ejemplo y apartarse si ve que no está al 100% , algo que sabía cuando saltó al césped,… Ello dice muy poco de él. Pero… «Yo quería…» dice Iker. ¿Y el Club?

«Puse en riego mi integridad física… y lo pagué». Ya. Muy bien. Y estarás súper orgulloso por ello. El problema es que lo pagaste tú y lo pagó el Athletic, ese Athletic al que tan bien crees representar. ¡Cómo se puede estar tan confundido!. Ya no volviste a jugar los partidos de Liga que quedaban. Si tan importante te consideras… ¿esa irresponsabilidad de agravar tu lesión no habrá sido perjudicial para el equipo en conseguir los demás logros? Si no sabes la respuesta, que parece que no, te la doy yo. Sí, por supuesto que fue perjudicial, muy perjudicial.

Y por si no te has dado cuenta, todos los argumentos que estoy diciendo son de tipo deportivo. Ni sobre tus camisas, ni tus pantalones, ni tus chancletas, ni tu pelo, ni tus coches… que me dan igual. Hablo de cuestiones deportivas. Y sí, te juzgo y te critico y, ya he repetido unas cuantas veces, y lo vuelvo a decir, que claro que considero que no representas bien a nuestro club y que no deberías ser el capitán. Pero por temas deportivos.

También añades que «…no acepto que nadie me venga a dar lecciones de lo que es defender a este club, de representar a este club, de llevar el brazalete…». Éste es el gran problema. Que no aceptas eso. Y yo no soy nadie para darte lecciones, solo soy una socia que da su opinión. No te tengo que dar lecciones, no. Pero el Club sí. El Athletic es el que te debería dar lecciones. El que como en todos estos años no lo has aprendido, debe decirte qué es ser capitán de este equipo. No yo. Pero el Club sí. Y a mí club, a nuestro club es al que le pido que dejes de ser capitán, ya que hay muchos jugadores dentro de la caseta que lo pueden hacer infinitamente mejor.

Añado una cosa más. Estás declaraciones no están hechas en caliente, en un momento de ofuscación después de un partido y con las revoluciones a mil. Estas declaraciones han sido muy pensadas durante todo el verano. Lo que agrava todavía más el tema, porque está completamente convencido de lo que dice, es algo meditado y pensado. Y… así nos va como nos va.

Por cierto, todo este comentario no es fruto de la rabia de la gente por no ganar las dos o una de las finales de Copa, como has dicho, también. No. Mi valoración de la temporada pasada es parecida a la tuya, buena porque ganamos la Supercopa, un título de un gran valor, por cómo se consiguió. También se llegó a otra final de Copa, aunque luego se perdieran las dos. No, no es rabia por eso, es pena por saberte capitán cuando no lo mereces. Pena por pensar que tras las imágenes del puro y el pasar, otra vez, de la pandemia, el Athletic no os diría nada. Pena por ver que estás convencido en tu error. Pena por pensar que el Club no te va a contestar a semejantes declaraciones. Pena por verte por encima del bien y del mal y de que no te importe lo que piense tu público, tus aficionados, tus socios,… de temas deportivos…. una gran pena.

Y, por si alguien duda de mis palabras, no hay más que escuchar la rueda de prensa integra que os introduzco en este link. Si no os queréis enfadar como yo, no lo escuchéis. Quizá es mejor vivir en el desconocimiento. El pagar y callar, por el que alguno abogó en su día.

Mientras, aquí me quedo, esperando volver a recuperar un Athletic en el que el capitán sea el reflejo de lo que es este equipo, mucho más que un equipo de fútbol.

¡Aúpa Athletic!

Eskerrik asko, Iago!

Iago Herrerín deja el Athletic a final de temporada ya que no se le renueva el contrato.

Despedida (Foto: Borja Guerrero y Juan Lazkano)

Ayer se le despidió, sin vestirse de corto porque ha sido el tercer portero del equipo. El «Txopo» e Iraizoz le entregaron un cuadro con su camiseta, con el número 13, su número. Ha estado 8 temporadas con nosotros jugando 119 partidos, más de la mitad de ellos en Europa y en Copa. Es un portero que siempre me ha gustado y que siempre ha estado ahí para ayudar al equipo. Sin ser titular más que un año, la sensación que me queda es que cuando jugaba siempre daba lo máximo y se dejaba notar. No le daba miedo salir, y aunque veces nos daba más de un susto por ello, también nos salvó de muchas. Un guardameta de reflejos. Soy de poca memoria, pero un año si pasamos rondas en Europa fue, sobre todo, gracias a él, porque jugamos unos partidos bastante malos y él con sus paradas, nos sostuvo en varias eliminatorias. En Copa, también, ha tenido actuaciones muy buenas, ayudando al equipo a llegar a varias finales. Una de ellas la pudo jugar, la del 2015. Pérdida, ya sabemos. Iago, eso sí, se va con dos títulos, las dos Supercopas. Se va un muy buen portero, al que creo que la pandemia le ha hecho mucho daño. Una pena. Pero, dicho esto, agradecerle sus años en el equipo, porque ha sido uno de los nuestros y lo seguirá siendo. Zorionak, Iago, y mucha suerte vayas a dónde vayas!

Y sobre el partido y Mateu, no hablo, sobre todo del segundo, porque estoy segura que le encanta ser protagonista, y si no es así, lo disimula de miedo. En fin…

El próximo domingo jugamos contra el Elche que se juega seguir en Primera División. Así que soy incapaz de decir eso que digo siempre. Por ello me limito a decir…

¡Aúpa Athletic!

P.D.: El Bilbao Athletic ganó ayer 2 a 1 al Celta B y está a un partido de subir a Segunda División. ¡Enormes cachorros! Os dejo en este link de tweeter la celebración al terminar el partido con los athleticzales.

Y lo mismo digo del Amorebieta. ¡Impresionante! Y el tweet con su celebración está aquí. ¡Mucha suerte a los dos en el sorteo de hoy!

Por último, el Eibar ha descendido está jornada y la verdad es que lo siento mucho por el equipo, por la afición y sobre todo por Mendilibar. ¡Suerte para el año que viene!

Impotencia del Athletic en la final

Es triste perder las finales, pero algunos nunca han tenido este sentimiento porque ni siquiera han llegado a ellas. Nosotros sí.

Impotencia (Foto: Borja Guerrero)

Hemos llegado a muchas pero la pena es que las hemos perdido. El golpe siempre es duro y lo que toca es levantarse. Pero no me puedo olvidar que es la tercera que jugamos este año, en poco más de dos meses, y no lo voy a dejar pasar. Hemos llegado a la final de Copa dos años seguidos. Sí, las hemos perdido. Pero, también acabamos de ganar una Supercopa, y nada menos que al Real Madrid, en la semi y al Barcelona, en la final. La Supercopa es nuestra. Hemos ganado un título. ¿Cuántos club pueden decir eso al acabar la temporada? Hemos hecho un temporadón. El problema es que al perder el último, o en este caso, los últimos encuentros, las dos Copas, el cuerpo que se te queda es horrible.

Marcelino dijo ayer que no te pueden meter 4 goles en 13 minutos, que no se los habían metido hasta ahora con él y que… ocurrió. ¿Por qué? Dijo que no sabía. Repitió que «no habían competido al máximo nivel otra vez, El Barça ha sido superior y ha ganado de forma merecida». Y yo añado que el mayor problema fue que el Barcelona salió desde el minuto uno en modo apisonadora, y la diferencia de calidad entre ambas plantillas, a nivel colectivo y jugador por jugador, a nivel individual, son abismales. El Barça es probable que no gane otro título esta temporada y salió a degüello. Hasta el minuto dos no conseguimos tocar el balón y fue solo eso, tocar Raúl y salir fuera de banda. Mala pinta tenía. 85% de posesión de ellos frente a 15% nuestro. El baño que nos dieron fue soberano. Y nuestros jugadores lucharon todo lo que pudieron, aunque la mayor parte del tiempo persiguiendo sombras y, una vez que recuperaban el balón, eran incapaces de hacer dos pases seguidos, por la propia presión de los culés, o por propia incapacidad. Imposible. A pesar de eso conseguimos llegar al segundo tiempo sin recibir gol. Increíble pero… Igual sonaba la flauta. ¡Qué ingenua! Los milagros no existen o son escasos.

El segundo tiempo fue más de lo mismo, y en el minuto 60, otra vez, Antoine Griezmann, abrió la lata, para que nos cayeran 4 seguidos, en 13 minutos (De Jong, uno y Messi, dos). Impotencia. Superioridad incontestable. Los nuestros lo intentaron pero no ver la diferencia (de todo), entre ambos equipos es estar ciego.

Algunos puedes pensar que en la Supercopa sí competimos y sí ganamos. Y encima se la ganamos a ellos. Por supuesto, pero porque se juntaron todos los astros, santos, y sobre todo, porque el Barcelona estaba en el peor momento de la temporada. Ellos mal y nosotros al 110 % y con algunos jugadores en estado de gracia.

Ahora sin embargo, como dijo Marcelino ayer, desde el partido contra el Atlético de Madrid, no estamos bien. Y a esto añado yo que jugadores franquicia están desaparecidos, pero siguen en el campo. Así es imposible y eso ha pasado. Ni más ni menos. Ellos son un equipazo que ayer estaba on fire, y a un nivel altísimo. Y nosotros somos un equipo normal, con varios de los jugadores buenos desaparecidos. Marcelino, ¿Por qué jugó ayer Muniain si no estaba al 100%? Y sobre todo, ¿Por qué no jugó Villalibre de titular? Sólo son dos detalles.

Al final lo de ayer resultó ser «Crónica de una muerte anunciada». De hecho, el ambiente prefuneral de estas dos semanas previas al encuentro nos confirma que nadie dábamos un duro por lo contrario.

Harta de perder finales pero súper orgullosa de haber llegado a ellas, y la persona más feliz del mundo por ser capaz de decir bien alto que soy del Athletic, que mis colores son los rojiblancos y que no hay mejor equipo que el nuestro. Mejor equipo para nosotros. Los demás tendrán los suyos, pero no los quiero. Nuestra forma de competir enorgullecía a mis abuelos y a mis padres, y ahora a mí y a mis hijos, y supongo que a vosotros y a los vuestros. Sí, hemos perdido pero ha sido increíble lo que han conseguido este año (y el pasado), y no tengo ninguna intención de quitarles mérito. Zorionak! A pesar de todo, Zorionak por la Supercopa y por estos dos subcampeonatos de Copa! La próxima vez, será mejor y seguiremos ahí para acompañaros y disfrutarlo juntos. Hoy como siempre, pero más fuerte que nunca…

¡Aúpa Athletic!

El Athletic… ¡El no va más!

¡Qué suerte tenemos por ser del Athletic! Con esta frase ya podía incluso acabar el comentario. Gracias por las alegrías que nos das. Y por las que nos quedan y nos vas a dar.

Cuadrilla (Foto: AFP/EFE)

Cuatro son las finales que vamos a jugar en un año. ¡CUATRO FINALES! Y con esta filosofía… No se puede estar más orgullosa. ¡Y una ya está ganada! y nada menos que al Barcelona, en la final, y al Real Madrid, en la semifinal. La Supercopa no nos la quita nadie, es nuestra. Y a ver lo que queda… Mucha ilusión, mucha alegría. Bizi ametsa, vive el sueño, ¡Y tanto que lo estamos viviendo!

Ya he dicho muchas veces que si tengo que utilizar una sola palabra para definir a este Club, sin duda, la que utilizaría sería FAMILIA. Y os voy a poner otro ejemplo más, para explicar esta afirmación, y perdonadme que me pase al plano personal. Ayer, nada más acabar el partido sonó el teléfono de casa, que no suena nunca, salvo por publicidad de distintas telefonías, y ahí estaba, al otro lado de la línea, mi madre, con sus 91 años como 91 soles, toda contenta para preguntarme, que qué tal estaba… jejejeje. Pues muy bien ama, eso sí, llorando, ¡Como iba a estar! Y con esa llamada, más. Mi ama diciéndome que qué bien, que qué partidazo y que qué ilusión. No hay más que decir. Solo FAMILIA. LA FAMILIA ATHLETIC.

La alegría es inmensa, pero no puedo olvidarme de los distintos comités: Comité de Competición, Comité de Apelación, tribunales, el TAB, Federación, Liga,… y de su intento de amargarnos la vida con la injustificable sanción a Íñigo Martínez. Ha sido una vergüenza, un atropello, una agresión al Club en toda su dimensión. Cuatro partidos, justo lo suficiente y necesario para que no jugase la semifinal de Copa. Por un apartarle la mano a un jugador que le estaba provocando poniéndole un dedo en la cara. Mal Íñigo por caer pero… ¡Alucinante! Persecución. Y ya… si lo comparamos con otras sanciones recientes, la injusticia es manifiesta. Por no decir… el no darle la cautelar… un escándalo. Pero… supongo que esto hace que nos alegremos mucho más por la victoria de los rojiblancos, porque parece que el Athletic molesta. Y me da mucha rabia, pero me hacen pensar eso, porque… qué otra explicación tiene que el árbitro ayer del partido, Del Cerro Grande, cuando estaba aplicando a la perfección la ley de la ventaja, en varias jugadas anteriores, casualidad, el gol de Berenguer del primer tiempo, no lo da, porque había pitado penalti, un segundo antes… cortando una ocasión manifiesta de gol, favoreciendo así al infractor. El cabreo que me agarré fue de órdago. Y si no llega a meter Raúl García el penalti… es que no quiero ni pensarlo. Así que les digo a todos, a los que mucha ilusión no les hace…: ¡El Athletic está en la final!

Otra vez remontando. Tras varias oportunidades nuestras claras, llegó la jugadita tonta en nuestra área, y ellos se adelantaron… Desesperante. Pero de nuevo la fe de este equipo que mueve montañas hizo que siguieran a lo suyo, es decir, a lo nuestro, hasta empatar.

El segundo tiempo fue mucho más trabado, con infinidad de faltas tanto del Athletic como del Levante y alguna ocasión más, pero solo a favor de un equipo, que era el que llevaba el peso del partido. Ellos parecía que sólo esperaban otro error nuestro. Menos mal que no llegó.

En la prórroga, en el segundo tiempo, llegó el delirio, con el gol de Álex, aunque con un poco de fortuna, porque su tiro lo desvió Vukcevic. Así, Berenguer, máximo goleador del equipo, nos mete en una nueva final de Copa. Gran partido el suyo, como enorme el trabajo de Yeray, el de Muniain, el de Raúl, el de Óscar,… Grandes ellos y sus compañeros. Enormes todos porque nos llevan a dos nuevas finales. Por no hablar de Marcelino. El cual ayer no paró de dar las gracias a sus jugadores. Lo que le honra. Se ve que hay feeling entre ellos y eso les está dando un punto extra a todos.

Y, para los que crean que esto es normal, no. Esto no es normal. Es una machada. Dos finales de Supercopa y dos finales de Copa en un mismo año. Dentro de algo más de un mes, la Real y el Barcelona se encontrarán con los leones que les intentarán amargar la vida, para ofrecernos a todos un festín que ni en los mejores sueños esperábamos. GRANDE ATHLETIC.

Disfrutadlo todos, porque aunque no lo podamos celebrar juntos, todo esto no nos lo quita nadie. Y… ¡Qué alegría!

¡Aúpa Athletic¡

Aritz, grande hasta en la despedida

Gracias, Aritz (Foto: Athletic Club)

Mi primera reacción ayer al saber la noticia, aunque ya era sabida, fue quedarme sin palabras. Todo lo que digamos es poco y se va a quedar corto. Es un grande, ha sido un grande y seguirá siendo un grande. Ayer nos dijo que «esto es solo una anécdota. Olvidémonos de los finales soñados» Nos olvidamos Aritz pero… repito, aunque sabido, la pena es grande, tan grande, como eres tú.

He estado releyendo algunos de los comentarios que escribí tras alguna de tus machadas… (no las puedo llamar de otra forma) y en la mayoría de ellas también estaba sin palabras. Si queréis hacer un ejercicio de nostalgia como hice yo, os pongo algunos de los comentarios para que veáis como viví yo esos momentos. Me remontó sólo al año 2015, por ejemplo, cuando en septiembre, le metió 2 goles en San Mamés al Augsburgo para ganar 3 a 1. ¡¡¡¡Aritzzzzz….. AAADURIIIZZZZ!!!!. O en febrero de 2016 con el voleón desde 30 metros en Marsella, ¡Aduriz qué grande eres!. O el mismo año cuando Aduriz tumba al Genk con cinco goles, en UEFA. Competición que, por cierto, ha escrito tres Twittes para despedirle, y recordar sus logros, entre ellos, el ser el único jugador en la historia que ha conseguido 5 goles en dicho torneo (@EuropaLeague ). Y la última, la maravilla de gol que le mete al Barcelona en el minuto 88 en el primer partido de está su última Liga, para dar los 3 puntos a su equipo del alma, a nuestro equipo. Don ARITZ ADURIZ. Y no me resisto a poneros el vídeo del gol. Disfrutadlo.

En esos textos está lo que pienso de Aritz, y, repito, en todos me quedo corta. Además nos diste un campeonato. Una copa, aunque muchos digan que es menor, es un título que, encima, se lo arrebatamos al Súper Barça, nuestra Supercopa que fue tu Supercopa. Nos la regalaste con 3 goles en La Catedral y 1 en el Camp Nou. ¡Ahí es nada! Así que Ter Stegen estará encantado con tu retirada, porque dice que eres el rival más difícil con el que se ha enfrentado.

Humilde, «Yo sin el equipo no soy nadie». Frase suya después de meterle los 5 al Genk. Nada más que decir. La frase le define por sí sola.

«Yo abro los brazos en señal de abrazo con mi afición», tampoco nada más que añadir. Bueno sí, que al hacerlo todos los aficionados nos sentíamos abrazados. Mila esker, Aritz.

Te vas y nos dices… «Y sí, ha llegado la hora del adiós y así se acaba para mí este camino, inolvidable y maravilloso de principio a fin. Muchas gracias» Maravillosos los años que tú nos has dado a nosotros. Desde el primero hasta el último. Tú fuerza, tu pasión, tu trabajo, tu compañerismo, tu juego, tu entrega por lo que hacías, tu lucha continua, tu inteligencia, de hecho, eres el Zorro Aduriz. Y, sobre todo, tu calidad, como futbolista y, por lo que dicen, los que te conocen, tu calidad humana. Muchas gracias te tenemos que decir nosotros a ti. Lo que nos has dado es impagable. Vivir todos esos momentos contigo y poder decir: ¡Yo he visto jugar a Aritz Aduriz! Sí señor. DON ARITZ ADURIZ.

Suerte en todo lo que hagas de aquí en adelante, y otra vez,

Mila esker, Aritz! Y…

¡Aúpa Athletic!