¡Qué manera de complicarse la vida! ¡Qué capacidad de resucitar muertos! ¡Qué sufrimiento de 3 puntos! ¿Cómo es posible que el Athletic sea capaz de enredarse él sólo para darle alas al Levante, equipo de Joaquín Caparrós, que estaba desaparecido en el primer tiempo? La verdad es que va a costar que se me pase el mosqueo que tengo. Eso sí los 3 puntos hacen que se me suavice pero… Buf. Para que se me pase un poco voy a hablar de lo mejor del partido, a parte de los puntos: Xabi Etxeita.
Etxeita ha estado de sobresaliente, como ha dicho Valverde, o como diría una profesora que tuve, más que de sobresaliente ha estado de coronita. Perfecto. No sólo cubriendo lo suyo, sino también los errores de San José. Muy bien. Adelantándose a los delanteros. Impecable por alto. Rápido y atento. ¡Enhorabuena, Xabi! Y dicho esto, espero que el próximo partido sea él, el que haga pareja con Laporte, porque la falta de ritmo no se le ha notado en absoluto y le veo mucho mejor que a San José. De hecho, Mikel creo que ha estado bastante flojo. No sólo por fallar el penalti, ni por meter el gol en propia puerta (que creo son argumentos suficientes como para decir que su partido ha sido flojo). Sino que además en el primer tiempo ha estado impreciso al sacar el balón y un par de veces ha metido en varios líos innecesarios a sus compañeros. En el segundo tiempo un error suyo casi se convierte en regalo para Barral que ha podido solucionar Etxeita. San José, lento. Está muy lento.
Mi enfado hay que repartirlo, porque no es sólo por juego y agobios, también lo es por la entrada de Casadesús a Mikel Rico que ha sido de juzgado de guardia. ¡Increíble que no le hayan sacado ni tarjeta! Ya no hablo de roja, digo tarjeta. Es inexplicable. Jugador al que en el segundo tiempo sí le han sacado una amarilla por pegar un manotazo a San José en uno de los saltos. Jugada del minuto 71. Es decir, siendo generosa y poniéndole una tarjeta amarilla sólo, a la carnicería contra Mikel Rico del primer tiempo, ya en el segundo tenía que haber visto la roja. Juan Fran también en el penalti casi lesiona a Muniain y tampoco ha visto tarjeta. No lo entiendo. Herrera también merecía otra en el primer tiempo pero… Mal el árbitro, Estrada Fernández, con las tarjetas. Encima expulsa a Barral ya acabado el partido en lo que las imágenes parece que el jugador le explica las jugadas con Aduriz… (¿?) Sí, Barral le empuja, pero… ¿es como para sacarle la segunda amarilla? Da la sensación que el jugador estaba hablando tranquilamente. No sé. Quizá me parece un poco exagerado. A ver qué explica en el acta. Por cierto, a ver si Rico tiene suerte y el esguince es suave, aunque las imágenes hacen pensar que más necesita un milagro para ser suave, ya que el tobillo se dobla completamente. Dolía sólo de verlo.
En este partido, de nuevo, también mal en los pases. En el primer tiempo la presión nuestra era fortísima y el Levante estaba perdiendo el balón rapidísimo. Pero nuestros jugadores, otra vez, perdían el balón en cuanto llegaban a tres cuartos de campo. Se ha regalado mucho y eso permite al rival meterse en el partido. Se vuelve a fallar un penalti, como si fuese una jugada complicadísima, y a seguir trabajando para conseguir premio. Más bien premios. Dos goles de Aduriz, 0-2, que te llevan a pesar que el segundo tiempo va a ser un paseo. ¡Qué más quisiéramos! Nada, en el segundo tiempo, te meten un gol idiota y ya está armado el lío. El Levante resucita y se vuelca, sin grandes alardes pero… lo suficiente para agobiarte, sobre todo a los aficionados. Y lo peor es que cuando los rojiblancos, o azulones, recuperaban el balón lo volvían a perder en unos pases horrorosos. Han tenido oportunidades para matar el partido pero está claro que no era el día de ver el partido tranquilos. Pero, a pesar de desesperarme, por lo comentado, sigo viendo a un equipo que se deja el alma por ganar, por hacerlo bien. Que muerde cada balón que pierde, que destila esfuerzo, trabajo y ganas como el que más. Vamos, que a pesar de las imprecisiones, las pérdidas, los tiros a palos,… se parten el cobre para conseguir el premio. Y por eso… a pesar de todo, consiguen los tres puntos, o más bien, los tres puntazos. Puntos que hacen que el Sevilla, que mete miedo, sigue a seis puntos. Es decir, nuestros chicos suavizan la presión a la que nos están sometiendo los andaluces a base de puntos. La Real está a nueve y el Villarreal a 10, más el golaverage. Y nosotros a seguir partido a partido, y ahora, el próximo partido, otra vez el lunes (cagüen en todo lo que se menea. El Athletic no iba a jugar más en lunes, palabra de Tebas. Tebas no es vasco, ¿verdad?). El lunes, da igual… el lunes… ¡A por el Málaga!