Una buena noticia médica

Ni todo son malas noticias ni todo es el caos. Ayer leí un titular que me emocionó: “Confirmado el segundo caso en el mundo de curación del VIH”. (La Vanguardia) Sí, la medicina funciona, la investigación da resultados y el mundo sigue girando aunque hayamos conocido el coronavirus y tengamos el WhatsApp lleno de notificaciones. Espero que esta noticia sirva primero para alegrarnos un poco el día y para empezar a darnos cuenta de en quién hay que confiar: en los médicos y en los expertos, no en cualquier gilipollas o malintencionado que pasa por ahí. Logremos que se viralice también lo bueno.

Me refiero a esto

Jetpack en Twitter repasaba las medidas que, a su juicio, tendríamos que tomar todos para evitar el contagio del coronavirus: “Tósete en el codo, lávate las manos e impide que tu madre vea Espejo Público”. La tercera es especialmente importante. Y donde pone “Espejo Público” podemos poner cualquier tertulia en la que las mismas personas opinan sobre el desastre de Zaldibar, Donald Trump, Santi Abascal, la dieta de los comedores infantiles y el coronavirus. Lo que les echen. A estas alturas yo solo alcanzo a preguntarme: ¿cuánto hijo de puta hay suelto que encuentra la felicidad en expandir el miedo?

Lo que pone de manifiesto

A la hora a la que escribo esta columna hay menos de 300 personas infectadas por coronavirus en Euskadi. Groso modo, eso supone como mucho el 0,015 de la población, por cierto. Para que no se disparen los contagios se están tomando medidas necesarias. Medidas que ponen de manifiesto algo que una tuitera expresaba así de bien: “¿Y qué hacemos ahora con los niños? Se me ocurre que lo mismo la sociedad está montada regular”. En efecto. Quedarte en casa cuando tienes una gripe en vez de acudir a tu trabajo medicado o cuidar a tus hijos entre semana es impensable. Y eso hay que cambiarlo.

Irresponsables hay en todo el mundo

Un conocido tuitero, Chucki, también destacaba la irresponsabilidad de algunos: “Organizas un mitin en Vistalegre el mismo día que el Día de la Mujer, criticas las manifestaciones del Día de la Mujer porque ‘qué insensatez cuando está el coronavirus por ahí’, y decides ir al mitin con síntomas de tener el virus. Esta puta línea temporal es la mejor de todas”. Evidentemente, se refería a Javier Ortega Smith y al mitin de Vox en el que el abogado que dispara a muñecos se dio un baño de masas, al parecer, después de visitar el norte de Italia. Un mitin en el que, en efecto, tuvieron la cara dura de criticar el 8-M.

Es una mierda

Llevamos días comprobando que el coronavirus ha dejado a la vista que hay mucha gente malintencionada, irresponsable y también un poco justa de capacidad de comprensión. También deja a la vista que, como decía Valverde, el fútbol es hoy una industria, no un deporte. Ante las imágenes de gradas vacías en un partido de Champions League, Endika Río tuiteaba: “Esto no es fútbol ni es nada”. Y tenía razón. Los partidos a puerta cerrada solo tienen una explicación: los compromisos con las marcas, que hace tiempo que desplazaron al aficionado del centro. Una pena. Pero es la realidad.

Tan fuerte no era

Al final, el coronavirus en política lo ha metido Javier Ortega Smith. Podía haber sido cualquiera. Pero solo él y los de su partido son capaces de reaccionar de un modo tan mezquino. Santiago Abascal planteaba en Twitter una serie de preguntas ante un gobierno español al que califica de “irresponsable” por no haber controlado las fronteras. Pobre Javier, el más fuerte de Vox, el que hizo la mili, el tipo que dispara a muñecos, es el primero que se ha puesto enfermo. ¿Con quién ha estado? ¿Y los del mitin masivo de Vox en el que pedían medidas de control, qué van a hacer? ¿Cuántos abrazos dio?

¿Todo mal? No puede ser

Estamos ante una situación inédita: la primera epidemia mundial de un virus nuevo y nosotros, con WhatsApp. La enfermedad no es mortal para las personas sanas pero es grave, por eso y porque los hemos elegido para ello los gobiernos toman decisiones. Lo que no puede cundir es el pánico ni la indignación sistémica. Guillermo Rodríguez tuiteaba: “Si cancelas clases, mal. Si no cancelas clases, eres un irresponsable. Si cubres el coronavirus, mal. Si no lo cubres, mal. Si mandas un mensaje de serenidad, mal. Si mandas un mensaje de precaución máxima, peor. En definitiva: todo mal. Siempre todo mal”.

Qué poca vergüenza

Con la excusa del coronavirus el PP nos quiere meter su manual neoliberal. Y si para que cuele tienen que colgarlo en la cuenta en Twitter de Ana Pastor, médica de profesión, lo hacen. No se arrugan estos del PP. ¿Será porque más a la derecha hay otro partido que aplicaría las políticas liberales y neocón sin dudas y tienen miedo de perder el favor de los empresarios más ambiciosos? En su decálogo contra el coronavirus, el PP propone la rebaja o el retraso en el pago de impuestos y cotizaciones para incentivar la economía. También un plan de contingencia sanitaria. Es el punto 4. Por el qué dirán.

¿Cómo aciertas?

La comunicación de crisis es una disciplina jodida. Primero, porque eres experto en desastres y malas noticias, y eso no es nada estimulante. Después, porque no es cierto que haya una fórmula acertada. Fíjense en lo que pone de manifiesto César Calderón en Twitter: este consultor cree que más allá de los aciertos de Fernando Simón, es necesario que comparezca Sánchez de una vez. En Euskadi, el lehendakari y la consejera de Sanidad dan la cara… Y en algunas tertulias lo que oímos es que el Gobierno Vasco comunica mal. Acertar no es fácil, ser un contertulio y señalar al que toque en precampaña parece que sí.

Buenas medidas para ahora… Y siempre

Leo a Mikel Segovia en El Independiente que “San Sebastián” (sic) “obliga a cubrir los ‘pintxos’ por higiene ante el coronavirus”. Me parece una buena noticia. De hecho, creo que tenían que haber tomado la medida antes y que deberían mantenerla para siempre. Y no solo en Donostia: Bilbao, Gasteiz, Iruña… O cualquier municipio del sur me vale de ejemplo (las restricciones en el norte son mayores). La de lavarse más las manos también me parece buena idea. Y la de mantener ciertas distancias sin parecer descortés no es mala, en principio. Pero a ver cómo ensanchamos el metro, el topo y los autobuses.

¡Ya le gustaría!

No entiendo el empeño de Arnaldo Otegi en tomarnos por tontos: es evidente que hace 40 años él no estaba en el bando que agrupaba los valores que sirvieron para derrotar a ETA y dar pie a una Euskadi que necesita todavía reconciliarse consigo misma. Pero esa reconciliación tardará más y será en peores condiciones en función del engaño que quiere colocarnos la izquierda abertzale. Y si lo que quiso decir es lo que apunta Iñaki García Arrizabalaga, que Otegi está orgulloso de dónde estaba y qué hacía 40 años atrás, el mensaje es todavía peor. Son quienes le arropan los primeros que deberían pedirle explicaciones.

Los de hace 40 años, hoy

Los que hace 40 años estaban en el bando de los derrotados, el de ETA, hoy se dividen: algunos como Otegi quieren hacernos creer que aquello nunca pasó o no pasó como todos recordamos. Y otros se empeñan en seguir demostrando su miseria humana dañando la placa en recuerdo a Gregorio Ordóñez, como denunciaba el alcalde de Donostia, Eneko Goia. ¿Qué tienen en el alma los que destruyen esos recuerdos a víctimas injustamente asesinadas? Son como quienes arrancan placas en memoria de las víctimas del golpe de estado franquistas: fachas. Y sus valores no son los de la mayoría.

Otro ejemplo

Como siempre, Javier Vizcaíno hacía un análisis más fino de la situación: la secuencia de Ortega Smith disparando como un Gijoe ha servido para esclarecer su pasado (no fue boina verde, solo hizo la mili) y para ver cómo algunos de los que jaleaban vídeos de encapuchados en bosques verdes haciendo prácticas de tiro hoy se ponen exquisitos ante el fascista de Vox. Me repito, lo sé, pero es que la verdad es tozuda: son la misma mierda unos y otros, sujetapistolas que imaginan que el enemigo es el que piensa diferente, y que se creen además con más carga moral que el resto. Qué equivocados están.

Mintegi protesta

Volviendo a la entrevista a Arnaldo Otegi que ha dado pie para el resto de fascistadas, resulta muy significativo que Laura Mintegi afeara al líder de Bildu su ocupación del espacio la semana en la que Maddalen Iriarte ha sido designada candidata a lehendakari. Mintegi ya encabezó una candidatura de la izquierda abertzale, esa izquierda abertzale en la que los que mandan se llamaban y se llaman Arnaldo, Arkaitz, Rufi, Joseba, Pernando¸ Oskar… Y Eba Blanco, es cierto, pero con un peso específico muchísimo menor. Luego agitarán la bandera del feminismo, pero la igualdad se demuestra tomando decisiones y no saliendo en fotos.

La gran noticia

Más allá de la rociada fascistoide (aunque ninguno de ellos se tenga como tal), la noticia del día sin duda son los 500.000 € de dinero público que, según la SER, habrían sido desviados desde el ministerio español de Interior que dirigía Jorge Fernández Díaz para intentar mitigar el escándalo de Luis Bárcenas y los pagos en “B” a políticos del PP. Una vez más, dinero de todos para beneficio de unos pocos, en este caso, por partida doble, triple… O a saber. El comisario Villarejo, cómo no, aparece entre los beneficiados por esa operación ya que contaron con sus servicios para recuperar y destruir pruebas de Bárcenas contra el PP.

La estrategia de Puigdemont era la correcta

El president Puigdemont fue gustándome cada vez menos hasta que huyó a Bélgica. A partir de ese momento pasó a no gustarme nada por el modo en el que dejaba a sus compañeros de Procés solos y daba a los jueces argumentos para ser duros con ellos por el evidente riesgo de fuga. Pero hoy tengo que reconocer que su estrategia ha funcionado: él y Toni Comín son eurodiputados de pleno derecho y Junqueras no podrá serlo, víctima de que Bruselas puede decir lo que le dé la gana pero luego hace lo necesario para evitar cualquier conflicto “doméstico”. De verdad que me alegro mucho por los nuevos MEP.

Vox se desinfla… Pero poco a poco

Las manifestaciones que Vox convocó el pasado domingo frente a los ayuntamientos de toda España fueron la enésima jaimitada de este partido político. Solo sirvió para que viéramos que donde habían tenido éxito se habían juntado un buen puñado de ultras y que en el resto habían fracasado. La imagen de Ortega-Smith ante cincuenta de los suyos en Teruel (¿cuántos habían ido hasta allí con él?) deja claro que el cerebro de los turolenses también existe. Pero no demos por acabados a los de Abascal porque no lo están: su globo va a deshincharse muy poco a poco y todos somos necesarios para lograrlo.

Ellos son imprescindibles

Para desinflar el globo de Vox todos somos necesarios, pero serán imprescindibles los líderes de Vox. A Abascal hay que dejarle los micros abiertos, a Espinosa de los Monteros hay que permitirle demostrar su soberbia, y al que fue a Teruel que exhiba su altura moral e intelectual: “Ortega Smith dice sobre los ministros de PSOE y Unidas Podemos que no les conoce pero ‘seguro que son muy malos’”, leemos en Eldiario.es. No se trata de una frase tan desafortunada como divertida: ya le hemos oído asegurar que la memoria histórica choca con la libertad de opinión y que la historia de España es la que cada uno quiera.

Imprescindibles… Y violentos

En efecto, solo necesitamos tiempo y cámaras para mostrar cómo son los líderes de Vox… U otros cargos: desde los que entran en consejos de administración de lo que ellos mismos llaman “chiringuitos” a los que golpean con puños americanos a compañeros de trabajo de sus exparejas hasta mandarlos al hospital. “Ismael Álvarez Sánchez, número dos del partido de extrema derecha en Manilva, propinó una brutal agresión” a su víctima que, además, “fue socorrida por un joven búlgaro”. Tres días en la UCI y varias placas y tornillos en la cara son el legado que le deja de este miembro de Vox que ya se ha dado de baja.

José Couso no fue defendido

La Audiencia Nacional ha condenado al Estado Español a indemnizar con casi 200.000 euros a la familia de José Couso después de ser asesinado por un tanque estadounidense: “Considera que el Estado debió ejercer la protección diplomática en favor de los familiares del Sr. Couso, poniendo en marcha un procedimiento de aplicación del derecho internacional. ‘Las circunstancias del caso hacían exigible que el estado desenvolviera su actividad diplomática en favor de los perjudicados por el fallecimiento del señor Couso’ (…) Además de los derechos de la familia estaba en juego la libertad de información” (La Voz de Galicia).

«Que el salmorejo me salga bueno»

A las puertas de la Nochebuena lo mejor que puedo hacer es recomendar el último post de Antonio Agredano, que sigue dando vueltas al futuro de su bitácora mientras piensa en lo que quiere para el año nuevo. Un post que empieza pareciendo que va de sexo pero termina dejando claro que va de amor, de amor sin cursilería: “Que tengamos que dejar de follar porque nos invadan las risas” pide junto a cosas más mundanas que son las que componen nuestro día a día, nuestros años y nuestras vidas. Sin gravedad. Solo con la satisfacción de leer un buen relato y vivir una buena vida.

Que no nos cuelen sus mierdas

A Olentzero también podemos pedirle esta semana que los que peores intenciones tienen dejen de colarnos sus mierdas. Para eso también les recomiendo visitar de vez en cuando la web Maldito Bulo, en la que desmienten falsedades como esta: “No, no se ofrece una ‘paga de 664€ mensuales a todo extranjero menor de 23 años que llegue a nuestro país y no tenga trabajo’”. Datos y afirmaciones absolutamente erróneas que, sin embargo, circulan de WhatsApp en WhatsApp y de Facebook en Facebook, noticias falsas que solo intentan criminalizar a un colectivo ya vulnerable.

Hasta entre ellos hay violencia…

En la pasada campaña, la del 10-N, nos enteramos de que varias personas habían acabado peleándose durante un mitin de Vox al grito de “Yo soy más español que tú, que tienes cara de mono”. Pues bien, hoy sabemos que no es el único acto de este tipo en un evento similar, lo más grave es que ha trascendido que en 2016 nada menos que Ortega Smith fue el protagonista: “En el curso de la asamblea tuvo lugar un altercado en el que el denunciante, Argimiro Santos, afirma que Ortega Smith y el vicesecretario de Presidencia de Vox, Enrique Cabanas, le golpearon, causándole lesiones de carácter leve” (El Plural).

Ciencia, un poco menos

Además de la violencia, si algo caracteriza a la extrema derecha es la seguridad con la que dice hasta la chorrada más grande. Así, parece que todo es más grave, más importante, por gorda que sea su mentira sobre la inmigración o que la solución que den a una cuestión compleja sea una auténtica barbaridad. Es lo que ha pasado, según varias webs y tuiteros como el divulgador científico Santiago Campillo, con la propuesta de Espinosa de los Monteros para el Mar Menor: la explicación del de Vox, por mucho aplomo que tuviera, conllevaría un desastre medioambiental según los que saben.

Otro entrenador vasco de máximo nivel

Creo que no estamos dando la suficiente importancia al momento actual del fútbol vasco: varios de nuestros entrenadores están en equipos de élite. A los cinco que entrenan a los clubes vascos de primera en la Liga (Garitano, Alguacil, Mendilibar, Arrasate y el otro Garitano) hay que sumar a Lopetegui (Sevilla) y Deschamps (Selección Francesa). En Inglaterra, Emery ha sido despedido del Arsenal después de pasar por el PSG y finalmente en el equipo londinense acabará Mikel Arteta, mano derecha de Guardiola en el City. Todos ellos son solo la punta del iceberg de la inagotable cantera futbolística vasca.