La juventud nunca puede ser un problema

La juventud son nuestras hijas e hijos, y sus amigas y amigos, es nuestra esperanza y nuestra oportunidad. Pero la juventud nos inquieta. Aníbal Malvar deja claro en Público que no es la simple distancia o lógica la incomprensión: “Es razonable que unos padres no entiendan a sus hijos de 15 años. Pero si no los entiendes cuando tienen 25 y 30, es que algo ha funcionado mal durante mucho tiempo en una sociedad”. Le preocupan (y me preocupan) sus “evidentes pulsiones antidemocráticas y negacionistas, antisistema, desertores de la razón, de sus profesores y, ya no digamos, de sus políticos”, que se extienden por todas las democracias.

Una buena guía hacia el futuro

Mientras en las democracias nos preocupamos por el tipo de sociedad y, especialmente, por el tipo de juventud que hemos generado, permeable a los populismos de base fascista, aquí y allí, en las dictaduras lo tienen claro: la juventud está para guiarla y generar así unas oportunidades y una esperanza globales. La dictadura china, como leemos en Xataka, no se ha andado con paños calientes: “Tiene 39 programas universitarios de química especializados en las tierras raras” que permite al Partido Comunista gobernar el país que “refina el 99% de las tierras raras pesadas del planeta”, el mercado y el negocio del presente y el futuro.

Y puede que tengan la solución

No me fío un pelo de la dictadura china, por dictadura, no por china, evidentemente. No me fié de ningún dato que ofreció de la pandemia. No me fío de la base de su desarrollo tecnológico. No me fío de su información, ni de sus intenciones, ni de sus acciones (su presencia en África ni es casual ni es altruista). Pero Enrique Dans sí se fía de los estudios que afirman que China ha logrado “revertir su tendencia de emisiones de dióxido de carbono” gracias a “una estrategia deliberada, masiva y sistemáticamente implementada” basada en “el despliegue masivo e intensivo de energías renovables” “y una transformación estructural del mercado energético”.

Calentamos el planeta por las risas

Mientras la dictadura China trabaja para controlar al 100% el mercado del futuro y electrifica su sistema como si no costara, en el mundo desarrollado y libre no dudamos en calentar el planeta como si pudiéramos por las risas: “Zuckerberg apuesta por la energía nuclear para impulsar el desarrollo de la IA en Meta” (El Independiente). Porque convertirnos en muñecos con accesorios, bien vale un lago seco. Porque hacer fotos de futbolistas vascos con camisetas de Vox, bien vale un bosque calcinado. Porque preguntar a la IA lo que tardas un minuto en buscar en Google bien vale una especie animal menos.

¿Pero no era todo bromi?

Yo pensaba que solo por las risas era también Eurovisión: al final, ¿sí importa en qué puesto quede España? Al final, ¿sí importa que un estado se organice para influir en el voto popular? Al final, ¿sí importa cómo se comporte la cantante española? Entonces, que alguien se tome todo en serio. Y no me refiero a lo que cuentan en Vozpópuli (“el ganador no podrá ‘saltarse’ los programas de RTVE ni ir a la competencia”), que me parece bien, me refiero a que la fiesta por la fiesta puede salir bien una vez, pero no es un sistema sostenible ni siquiera en televisión. Y la prueba irrefutable la proporcionó Israel.

¡Qué bochorno!

Marca no se cortó: “El día del bochorno”, titulaba en la portada de su web bajo la foto de Erika Mugartegui, puntista de la selección española, de La Roja, de la única y verdadera selección de pelota que cuenta, vale y sirve. Según Marca, claro, que en el interior de la noticia alertaba: “La pelota vasca abre hoy una peligrosa puerta hacia lo desconocido con un histórico España-Euskadi”. Una puerta que parece a otra dimensión, a un agujero de gusano que vaya usted a saber a dónde nos puede llevar. ¿A la oficialidad en otros deportes? En serio: ¿a qué tienen miedo? ¿Cómo de peligrosos les resultamos los vascos y las vascas jugando con Euskadi?

Vale, ¿qué es?

Leire Díez buscó el titular y lo encontró: “No soy fontanera ni cobarde” (El Independiente). Vale. Pero, ¿qué es? Yo creo que no pasa de verso suelto, de esos que puede surgir en cualquier partido. Pero tampoco es otro Pequeño Nicolás, como pretenden deslizar contertulios cercanos al PSOE para restarle importancia. De hecho, lo que más dudas me genera es que Leire Díez ha tenido puestos de trabajo pagados con dinero público con cierta relevancia para venir de donde viene: ser una hooligan en redes de Patxi López que no nos dejaba en paz a quienes alertábamos de que el lehendakari socialista no era serio.

El show completo

Intuíamos que la rueda de prensa mencionada iba a ser interesante, pero pocos esperábamos que iba a ser un show tan completo: “Aldama asalta a Leire Díez en la comparecencia pública: ‘¡Sinvergüenza! Ha mentido en todo’” (El Imparcial). Pero, ¿qué está pasando? Ni siquiera los que estamos encima de la actualidad todos los días podemos explicar con claridad la relación entre ellos, y solo podemos elucubrar sobre las razones que podía tener Díez o que puede tener el PSOE. A mí, en medio de este barrizal, solo me surge una pregunta: ¿veremos a Leire Díez en Master Chef Celebrity o en Supervivientes? Ojo, que eso también tendrá su lectura.

No es “la desunión de la izquierda”

En medio del sainete, en El Plural leemos este aviso a navegantes: “Tezanos alude a la ‘desunión de la izquierda’ y da un toque de atención a Podemos y Sumar. El presidente del CIS advierte de que está división daría el Gobierno a PP y Vox”. ¿De verdad quieren hacernos creer que será la separación irreconciliable entre los dos partidos a la izquierda del PSOE la que va a propiciar un gobierno de Núñez Feijóo con el apoyo de Santiago Abascal? No. Pedro Sánchez y este PSOE de autor, también son los autores políticos (mucho más que el del PP) del crecimiento electoral de la oposición, pero también del crecimiento de EH Bildu y del BNG.

Esto, también

Si fuera español y del PP estaría muy enfadado con el PSOE por lo que está haciendo con RTVE. Además de por la doctrina clara introducida en casi todos los contenidos (el programa de Jesús Cintora eleva exponencialmente esa intención), especialmente por el tipo de espacios: ‘La familia de la tele’ es uno de los clavos en el ataúd de esta legislatura. Una mala idea esférica: igual de mala la mires por donde la mires. Por eso va mal y por eso el ente va a reorganizar la tarde para volver, casi, al punto de partida: “TVE tiene episodios de ‘El Cazador’ para cubrir un mes la franja que recorta a ‘La Familia de la tele’” (El Confidencial Digital).

¿Por qué?

Importa que cesen los ataques contra la población de Gaza cuanto antes, por supuesto, y que millones de personas no sientan cada día, cada hora, cada minuto, que pueden ver morir, con suerte, de un bombazo, sin suerte, quemadas vivos o de hambre, a las personas que más quieren. Pero también importa el porqué: ¿por qué el gobierno y el ejército israelíes está siendo tan cruel? ¿Por qué le importa tan poco que veamos los “disparos de Israel cuando multitudes abarrotaban un centro de ayuda humanitaria” (BBC)? ¿Por qué tantas personas se dejan liderar por Netanyahu y llegan al punto de radicalidad que estamos observando?

¿Qué cambio?

Si Pedro Sánchez es el presidente del gobierno solo porque no es Núñez Feijóo y porque prefiere aliarse con cualquiera antes que con Vox, literalmente. Pero Pedro Sánchez y este gobierno, que tiene que contentar a partidos tan diferentes, no está haciéndolo bien. Esta es la realidad por mucho que en medios afines al PSOE, como El Plural, vistan a la mona de seda: “Un año del reconocimiento de Palestina: cuando Sánchez inició el cambio de rumbo de Gaza en Bruselas”. ¿Qué cambio? ¿Qué rumbo? ¿Cómo está la población de Gaza un año después? Y sobre todo, la gran pregunta: ¿cómo puede alguien instrumentalizar el dolor ajeno así?

Un error tras otro

Se equivocaba Podemos con su recurso constante a “las cloacas” para tapar sus errores. Se equivocan el PP y su ejército mediático aireando audios que dicen más de las personas que los protagonizan que lo que dice su propio contenido. Y se equivoca el entorno del PSOE enfangando todo porque, ya, da igual: “RTVE difunde whatsapps de un capitán de la UCO y un confidente buscando trapos sucios del PSOE y Podemos” (El Nacional). No, no da igual. El ruido mediático de un lado y de otro solo genera hartazgo en la sociedad, cansancio, sensación de que la política es barro. Pero no lo es. ¿Por qué algunos quieren que lo parezca?

El enviado de Dios

Otro que se cree El Elegido es Donald Trump. Después de conocer que la justicia estadounidense ha dejado sin efecto los aranceles aleatorios que anunció, el presidente de EE.UU. ha publicado una imagen en su red social, Truth (“verdad”), en la que aparece caminando en la noche junto a la frase: “Está en misión de Dios y nada podrá parar lo que viene”. Pues muy bien. Lo que me sorprende es que haya alguien comprando esta mandanga, que crea que Trump sabe lo que hace o que tiene una misión diferente que la de enriquecerse aún más (ahí tenemos su gira por oriente medio, también para sus negocios particulares).

Elon Musk se va

No tengo pruebas pero tampoco dudas de que la relación entre Donald Trump y Elon Musk se basaba en que ambos creían que estaban aprovechándose del otro. Ahora su simbiosis, por lo menos la política (Musk tiene muchísimos intereses con sus diferentes empresas que facturan millones de dólares al gobierno estadounidense), se ha acabado: “Elon Musk anuncia su salida del Gobierno de EEUU tras admitir su ‘decepción’ con la política fiscal de Trump” (El Independiente). ¿Qué esperaría Musk de Trump para que este, que está beneficiando a los millonarios sin taparse, le haya decepcionado? ¿Qué estará diciendo Trump de Musk?

Un problema de matemáticas básicas

Naturalizar las equivocaciones es la mejor muestra de confianza en uno mismo y en las y los demás. Pero el caso de Pello Otxandiano y los problemas de matemáticas básicas que arrastra (porque no es la primera vez que Bildu publica imágenes con errores gruesos en las cifras), siendo como es, el tío que más lecciones da en Euskadi, es llamativo. Ayer confundió tres millones de euros para vivienda con tres mil millones. Una hora después borró los tuits, que estaban en euskera y castellano. Es decir: más de una persona vio esa infografía varias veces antes de publicarla. ¿También el ingeniero Otxandiano?

¿Qué quiso romper Eneko Andueza?

Eneko Andueza habla muy bien y sabe colocar su discurso. Otra cosa es que lo que diga sea adecuado. No puso en duda por error, ni porque se vino arriba para defender a Marisol Garmendia, eso de que igual el PNV no quiere seguir gobernando Euskadi con coalición. El secretario general del PSE lo soltó con toda la intención pero, ¿con qué intención? ¿Qué plato quiso romper Andueza? Sinceramente, no lo sé, pero las opciones que se me ocurren no me gustan: ¿tiene un plan para volar la primera legislatura del lehendakari Pradales antes de las elecciones municipales y forales? ¿En ese plan entra el gobierno de Pedro Sánchez?

Si esto pasase en Euskadi…

“Nuevo escándalo en RTVE por el trucaje de otras oposiciones. Los sindicatos de la entidad pública ponen en duda la prueba que implica a los cámaras”. Esta vez es la CNT la que denuncia que las pruebas de las y los primeros aspirantes pudieron ser vistas, por un canal interno, por quienes se examinaban más tarde. Esto sucede unos meses después de una filtración de las preguntas antes de la oposición de contenidos, y “de que RTVE haya invertido 168.000 euros en el desarrollo de un software para blindar la seguridad en sus oposiciones” (Vozpópuli). Según la CNT, lo sucedido es suficiente para “suspender las pruebas”.

Una provocación

¿Antonio Maestre pudo haber reaccionado mejor ante la provocación de Bertrand Ndongo? Sí, pero también peor. Porque el que trabaja para Periodista Digital buscó al que es periodista de verdad (aunque no te guste lo que dice y escribe, ni su estilo, pero es periodista), le avasalló, provocó el enfrentamiento, el contacto, el enfado, la agresión o la amenaza, y la imagen, por supuesto, porque estaba grabando todo. Eso no es periodismo, lo que hace Ndongo no es periodismo. Hay que dejarlo claro, y aunque Maestre no haya estado tan templado como en otras ocasiones, la solidaridad con él, con el bueno de esta película, es innegociable.

Nadie quiere estar con él

Por supuesto que hay buenos y malos. Y no debemos dudar en alinearnos con los primeros porque los segundos están exhibiendo al mundo su maldad y, además, se asocian entre ellos. No solo eso: tienen líderes a los que siguen orgullosos, como Netanyahu, Putin o Trump. Este último está equivocándose por completo (al final, nadie va a querer reunirse con él) pero no le importa: la última encerrona pública en la Casa Blanca, esta vez al presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, es vergonzante. De nuevo, el republicano se muestra fuerte con los débiles y débil con los fuertes (Putin o Netanyahu se ríen de él, y Xi Jinping le ha parado en seco).

¿A qué juega el PSE?

El PSE juega a ser progre (porque con el nivel de ejecución de las medidas que anuncia, al final, no lo es tanto), juega a pelear por el discurso buenista con EH Bildu y, en menor medida, con lo que queda de Sumar y Podemos en la CAV, y juega, por supuesto, a estar pero no estar junto al PNV. Pero sobre todo, el PSE juega con las personas migrantes, las instrumentaliza (como hace Bildu) con su discurso, las convierte en argumentos para poner en chapas, carteles y breves anuncios en Google. Al mismo tiempo, pretende acoger a esos seres humanos en macrocentros y señalar al lehendakari para desviar la atención. Ese es el juego.

El tema

El de cómo acoger a las personas migrantes, o el de cómo resolver su adaptación a nuestra sociedad y, sobre todo, su no-adaptación, es el tema central. No si lo que ha dicho el lehendakari Pradales (nada que no pensemos la mayoría) es más o menos racista que lo que dicen Andueza u Otegi (que ve a las personas migrantes como las que cuidan y sirven cañas, para alucine general). El tema es que no tiene nada de malo ese “a Euskadi se viene a trabajar” porque es lo que ha pasado siempre: el nuestro ha sido un país de acogida que hemos construido entre todas y todos sin excepción y, además, con orgullo.

Ni un paso atrás

Netanyahu, como Putin y como Trump, se ríen de nosotras y nosotros. Que personas tan malvadas hayan llegado a controlar el mundo (junto a ellos, los dictadores chinos y de Oriente Próximo) es la muestra más dolorosa de que nuestra civilización toca a su fin. Si sobrevivimos a ellos será un milagro. La maldad del primero es tan manifiesta que Alberto Soler en Nueva Tribuna nos desgarra con esto: “La obscenidad de la alegría bajo las bombas. Mientras sonaba la música, hubo quien no pudo dormir porque el cielo no dejaba de rugir”. Israel encontró en Eurovision otro agujero para trolear a Europa y sus valores. Ni un paso atrás.

Pero se lo regalan

RTVE ha regalado a Israel esa ventana: ha cebado un concurso que es una castaña y que un puñado de malas personas a disposición de un gobierno genocida (no lo digo yo, lo dice Amnistía Internacional) han manipulado para alegría israelí. Si yo fuese del PP, desde luego, estaría cabreadísimo por lo que está haciendo el PSOE con el ente público español. Ya no se trata de La Familia de la Tele, es que los Telediarios son islas y el resto de la programación (otros espacios informativos, incluidos) se vuelca en eventos españolísimos y horterísimas. En resumen: Broncano hace ya la misma gracia que Luis de la Fuente. Allá ellos.

Y ya

Una o uno del Athletic no le pregunta a Fernando Llorente qué le aconsejaría a Nico Williams después de que hayamos conocido que el Real Madrid baraja su fichaje. Ya está. La broma ya ha durado mucho. Si la UEFA se ha equivocado mandando al delantero como su embajador a Bilbao, no pasa nada. Pero que medios vascos y, lo que es peor, medios de Bizkaia le hagan caso, es un exceso (a menos que vaya acompañado por un señalamiento). Sobre todo: es hacerle el juego al Real Madrid y a los medios de la capital española que, sin ningún respeto al Athletic, piden su fichaje mañana por la mañana. Ya. Suficiente. Hasta aquí hemos llegado.