No voy a decir que me sorprendió que el Athletic, el sábado, jugase un gran partido contra el Barcelona porque mentiría.
Los partidos contra los grandes, a los nuestros les motivan y, por lo general, siempre los juegan bien. Otra cosa muy distinta es el resultado, ya que normalmente solemos perder. Pero ayer lo que sí me sorprendió fue la calidad del juego y lo que les duró. Recuerdo que contra el Elche jugaron bien los 20 primeros minutos y agur. El otro día no. Yo no hacía más que mirar el reloj y pensar,… Vamos 40 y seguimos dominando, vamos 55 y el partido está de nuestro lado, vamos 65 y seguimos genial… El Athletic consiguió que el Barcelona pareciese un equipo pequeño. Sí tenían más posesión ellos, pero insulsa y nada provechosa. Estaban, no sé, acobardados,… La presión alta de los rojiblancos no les permitía jugar a su juego, y les agobiaba de tal manera que sus pérdidas o nuestras recuperaciones eran continuas. Además, tras recuperar, el área estaba en mente y la verticalidad fue la característica principal. Una gozada verles jugar así. Pena esa falta de puntería, calidad,… que nos lastra e impidió que acabásemos el primer tiempo con un dos a cero… o un tres a uno, porque Braithwaite, también, tuvo una clarísima.
Tras el descanso el cuento no cambió mucho, salvo porque Íñigo Martínez metió un golazo de cabeza, tras saque de córner de Muniain. Buen pase, pero el gol espectacular. Entrando con todo, como un toro y girando la cabeza para ponerla en el palo largo… Una maravilla. Encima el Athletic no se echó para atrás. Perfecto. Pena que seguimos concediendo fallos horrorosos, como la pérdida de Dani García, que acabó en el gol de Memphis Depay. Repito fue por error nuestro, no por sus aciertos. Y a punto estuvieron de dar la vuelta al marcador, con el regalo en ese momento de Íñigo Martínez, pero, gracias a Dios, el mismo jugador tiró excesivamente cruzado. No hubiese merecido para nada el Barcelona llevarse semejante premio. Incluso el empate fue un premio excesivo para los merecimientos de los dos. Pero siendo el Barcelona suele ser lo que ocurre. Menos mal que no fue así.
A pesar del sabor agridulce del empate, los brotes verdes fueron muchos. Oihan Sancet seguramente hizo el mejor partido desde que está en el Athletic. Una gozada verle recibir el balón en el área, darse la vuelta y chutar al larguero, rapidísimo, sin dar tiempo de nada al defensa. No sé si estaba muerto físicamente cuando le sustituyeron, pero no me gustó el cambio, porque seguía aportando muchísimo.
Iñaki Williams también estuvo muy bien. Participó, dio mucho trabajo a la defensa, hizo huecos a los compañeros,… Pena esa falta de gol, porque de nuevo le pusieron un balón inmejorable y tardó en reaccionar lo suficiente para perder toda la ventaja y con ello la posibilidad de remate. Pena, repito, porque hizo un muy buen encuentro y se hubiese merecido un golito.
Dani García mejoró, a pesar del error, buen partido el suyo. Vencedor también. Lekue, Balenziaga, también bien.
Los dos centrales, Íñigo y Vivían, que es difícil que les quiten el puesto, tal y al nivel al que están.
Julen Agirrezabala tiene que estar encantado con como le están saliendo las cosas.
Y Berenguer como siempre aportando. Un acierto su fichaje, a pesar de mi crítica inicial. Nos está dando verticalidad, desborde, y gol, de él, o de sus compañeros.
Quizá lo mejor que podemos decir del Athletic del sábado es que funcionó coralmente, todos a una, todos con el mismo objetivo, solidarios a tope y no dejando a los culés ser ellos mismos en ningún momento. Chapeau.
Y después de esto, y como siempre, la pregunta es que qué Athletic veremos en Vigo… El de Elche, o el de ayer de La Catedral. Esperemos que la respuesta sea la segunda porque demostraron que saben hacerlo. Así que, Athletic, ahí te quiero ver. ¡A por el Celta! Y…
¡Aúpa Athletic!
P.D.: ¡Qué gozada que hubiese público de nuevo en San Mamés! ¡Genial! Pero… me parece lamentable, reprobable, y diría que incluso impresentable, que 1.200 socios a los que les tocó entrada en el sorteo no fueran al partido. IMPRESENTABLE. Seguro, que alguno fue por causa mayor, seguro, y de esos no digo nada, pero todo ese 11,4% de los agraciados que no fue, no fue por causa mayor, así que, repito. LAMENTABLE. No estuve en el campo porque no me tocó entrada. Si me hubiese apuntado sola por antigüedad me hubiese tocado pero primé el apuntarme con la familia, para sentir todos lo mismo y, como casi siempre, el sorteo no me tocó. Una faena pero… me aguanté, o mejor dicho, nos aguantamos, como el resto de socios que no fueron afortunados. Pero el enterarme que 1.200 socios no fueron, a pesar de tener entrada, me lleva, además de a enfadarme bastante, a pedir al club que sean sancionados de alguna manera, y no me refiero a la económica mencionada (que el partido se lo dan por visto a efectos de la cuota), sino a otra cosa, como por ejemplo que no puedan participar en otros sorteos. Igual así la próxima se lo pensaban antes de hacerlo. Ahí que ser muy egoísta para actuar así (repito que no me refiero a los que haya sido por fuerza mayor). PENOSO.
Para otro día dejo las características del sorteo, cómo se entró y se salió del campo y otras cosas varias….