Decoroso no es

Yo no sé si Begoña Gómez ha hecho algo ilegal. Sí sé que las acusaciones de Manos Limpias han acabado en nada, salvo excepciones. También sé que el PP lleva años eligiendo a pésimos compañeros de viaje. Y de lo que no tengo duda es de que la mujer de Pedro Sánchez ha cometido (y por lo que leemos, no solo una vez) el injustificable error de no ser exquisita en su labor profesional: “Begoña Gómez pidió a Telefónica, Indra y Google tecnología gratuita para su Master”, leemos en El Independiente. También podemos leer que estas empresas le prestaron esa ayuda sin contraprestación, al menos, económica.

“La presidenta”

A Patxi López le reconozco el enorme mérito de haber crecido: se ha convertido en un orador hábil que, aunque sigue gritando en el estrado o el atril (algo que no me gusta en ningún caso), coloca bien los mensajes y los golpes de efecto. Pero a veces sigue haciendo de esas que le hicieron popular cuando fue candidato y lehendakari: “La presidenta del gobierno”. Así llamó a Begoña Gómez. Ese “lapsus”, como lo califican en LaSexta, me parece significativo: en el entorno de Sánchez, el matrimonio son un todo a salvar, un paquete a proteger de la inundación o la quema. Su suerte parece ligada a la del PSOE. Pero, ¿por qué?

“All eyes on Rafah”

Quien tenga Instagram habrá visto la imagen en varias stories: un campamento inacabable y un mensaje construido con lo que parecen lonas blancas, “All eyes on Rafah”. Una manera de llamar la atención sobre la masacre despiadada que el gobierno y el ejército israelíes están cometiendo sobre población civil bombardeada una y otra vez. Según Euronews, la imagen original está creada con una inteligencia artificial, la publicó un usuario de Malasia y la han compartido “más de cuarenta millones” de personas hasta el momento. Personas que son sensibles y empáticas. Personas que no son Santiago Abascal.

Las vías diplomáticas y pacíficas

Ante la evidencia de que el mundo necesita defenderse de monstruos como Benjamin Netanyahu o Vladímir Putin, tuits como este de Oskar Matute después de plantar a Zelenski y despreciar la ayuda militar a Ucrania adquieren otro sentido: “Aumentar el gasto militar a espaldas del Congreso solo beneficia a las grandes potencias y a los intereses de la industria armamentística. Reforzar la vía bélica y el envío de armas solo logrará prolongar la guerra. La solución vendrá por vías diplomáticas y pacíficas, siempre”. El tuit le ha quedado estupendo para la galería, como siempre. La realidad, por desgracia, es otra.

Antifascistas en todo lugar y momento

Uno es antifascista en todo momento y lugar o no lo es. Sugerir que Vladímir Putin tiene que poder avanzar por territorio ucraniano sin resistencia no es ser antifascista. No hay que ir más lejos ni más cerca. Y reconocer a una o un fascista es tan fácil como necesario es reconocer a una o un antifascista su labor: lo fueron los dirigentes del Borussia Dortmund durante que plantaron cara al nazismo. El finalista alemán de la Champions League puede lucir con orgullo su historia, especialmente en esta Europa que no teme a los ultras. Apoyar esta noche a quien defendió hasta las últimas consecuencias la humanidad es una obligación moral.

Debe de ser la nueva política

Reírse de un partido que ofrece su mano tendida para aprobar los presupuestos de un gobierno en el que tienes una vicepresidencia y cuatro ministerios, eso debe de ser la nueva política. Se ve que no solo no lo hemos captado hasta ahora sino que, cuando por fin la apreciamos con nitidez, no somos capaces de comprenderla. Yo, por lo menos, me declaro incapaz de seguir el razonamiento que expone Pablo Echenique en uno de sus últimos tuits, en el que intenta hacer un chiste a costa de Ciudadanos y de que Arrimadas siga intentando negociar. O yo no entiendo nada o no lo hace Echenique.

Sí, la pandemia cuesta mucho dinero

Tengo la sensación de que, en cualquier momento, alguien va a destapar un caos absoluto en la Comunidad de Madrid por la gestión de la pandemia. Y no es menos cierto que Díaz Ayuso ha usado la crisis para buscar todo tipo de titulares, pero no creo que sea justo este de El Boletín: “Telefónica e Indra se embolsan otros 789.000 euros del Gobierno de Ayuso para el rastreo”, porque las citadas son dos empresas capacitadas para el trabajo y porque la pandemia está siendo carísima para todos. Sin excepción. Tanto dice de quien lo hace buscar una excusa estúpida como buscar una acusación estúpida.

Y va Aznar, y dice…

“Tiene una cara de inútil que no puede con ella”, eso es lo que José María Aznar ha dicho de Pedro Sánchez en una entrevista a Expansión y que recogen digitales como InfoLibre. Después de ese titular me dan igual el resto de respuestas porque Aznar ha dejado claro que él no ha acudido a la conversación con el periodista dispuesto a hablar de España, del gobierno ni de política, él ha ido a jugar y a hacerse con el escaparate final a base de ocurrencias de sobremesa nocturna y botella de whisky abierta sobre el mantel. De su reputación gasta Aznar, pero también de la del PP y de la de España, esta vez.

Revolucionarios, sí, pero con colchón

Fui a un colegio concertado, estudié en una universidad pública, soy trabajador autónomo y tengo una casa (con hipoteca) y una furgoneta familiar. Ni soy pobre ni soy rico: soy clase media en Bizkaia de libro. Así que no puedo ir de obrero ni a comer a restaurantes de 50 € el cubierto cada día cuando no hay pandemia. Desde mi posición y aspiraciones ajustadas tengo claro lo que no soporto: a quienes van de pobres y a quienes van de revolucionarios cuando tienen un colchón bien mullido sobre el que caer si les va mal. Por fin, 40 años después, vemos a Alaska y Bosé, y a todos los que ellos representan, como son.

Guardiola, el City y el catalán

El nacionalismo necesita a más personas como Pep Guardiola: un número uno mundial en su trabajo y con una notoriedad a la altura. Una persona y un profesional, además, comprometido con aquello en lo que cree hasta tal punto que ha provocado (o impulsado, pero me da lo mismo) que el Manchester City ponga en marcha un canal de información en catalán en Twitter. Así nos hemos enterado de su renovación en un equipo con las más altas aspiraciones: ganar la mejor liga y la mejor competición continental. ¿Que no le dan bola en España por sus ideas? A él le da igual. Y a los que le seguimos, también.

Ahora, Zaplana

20170425_zaplana

En el PP tienen un problema. Un problema que, además, salpica y universaliza el color marrón porque las noticias sobre España en el mundo estos días son sobre la investigación por corrupción en el seno del partido en el gobierno. Y porque cualquiera que se acerque al PP acaba igualmente manchado, bien para negociar unos presupuestos, bien para articular una ley incluso necesaria. Ayer, a la hora en la que escribía estas líneas, era Zaplana el gran nombre propio del PP para mal.

Pero no todo vale

En el gran pozo de lodo que parece ser la “Operación Lezo” que ha provocado las detenciones de estos días de personas vinculadas al PP, también sobresale una empresa: Indra, concesionaria de la gestión de las elecciones. Eso ha dado pie a Garzón, Rufián y Espinar, entre otros, a poner en duda los resultados. Pero como bien les recordaba Marcelino Madrigal en Twitter: ni IU, ni ERC, ni Podemos pusieron una sola reclamación. Sembrar ahora dudas es tirar piedras contra el tejado de la democracia, de la que viven.

Las ideas hay que tenerlas claras

Evidentemente, tengo que hablarles de las elecciones en Francia, donde han pasado a la segunda vuelta Marine Le Pen y Emmanuel Macron. Ante la disyuntiva, Jean-Luc Mélenchon, la opción de Podemos en la primera, tiene que preguntar a las bases, ¡toma ya! El diputado socialista Ignacio Urquizu lo expresaba perfectamente: “Hay una parte de la izquierda que sigue sin entender nada. Ni Hillary era igual que Trump ni Macron es lo mismo que Le Pen”.

Patxi López, tan cerca, tan lejos

Según El Independiente, si Susana Díaz gana las primarias socialistas el ex lehendakari pondría proa a Bruselas donde, con el beneplácito de la andaluza, podría comandar un equipo en el que encontraría a fines como Elena Valenciano o José Blanco que, además, ya se han posicionado con Díaz. En la misma pieza insisten en que el equipo de campaña de López asegura que esta vez es cierto que no hay acuerdo, pero también recuerdan que el vasco no ha criticado a su rival, mejor colocada.

No, no tienes derecho a tener razón

El tuit de Pedro Duque: “Se puede decir que la Tierra es plana porque hay libertad de expresión, pero ningún derecho ampara tener razón”, no se acota solo en el caso de la reciente tesis doctoral que ha querido probar que no vivimos en una esfera achatada por los polos. Twitter es así: la libertad de expresión y de elección, para algunos, conlleva el derecho a tener razón solo porque ejercen esas libertades con insistencia. Pero me temo que, otra vez, está en lo cierto el astronauta.

Rodrigo Rato, Marca España

20151006_rodrigo

Un ex ministro de Economía y Hacienda, para colmo, vicepresidente de asuntos económicos del hombre que se atribuye a sí mismo el milagro económico español (Aznar) haya defraudado a Hacienda, puede ser un buen ejemplo de lo que es la “Marca España”… Para desgracia de quien se lo trabaja. Pero España lleva en el pecado la penitencia: exportar talentos como Rato que no tienen ningún escrúpulo para enriquecerse y defraudar a las instituciones que han defendido.

España hace millonarios

España es una máquina de hacer millonarios, sobre todo, con dinero público. La superempresa Indra, inmersa en un ERE, sigue firmando ceses con indemnizaciones de 4,5 millones de euros. Eso es lo que ha cobrado Juan Carlos Baena, su director financiero, según ‘El Confidencial’. Otro tanto cobraron Santiago Roura y Emilio Díaz, cada uno. Da la “casualidad” de que el primero está imputado por la “operación Púnica”. En total, Indra podría haber desembolsado 40 millones en grandes indemnizaciones desde 2012.

Las reservas de EE.UU.

Estados Unidos podría tener guardados 700 millones de barriles de petróleo como reserva, “en cuatro discretos puntos”. Aún hay más: esta reserva “está enterrada en una red de 60 cavernas subterráneas talladas en roca de salina”. La historia, más bien el “historión”, lo hemos encontrado en la versión en castellano de la web de la BBC, donde cifran el origen en la crisis de 1973, y explican que esos contenedores les han servido para operar con seguridad en el Exterior.

Un mercado poco sostenible

Si Apple detecta problemas con su asistente de voz (que se ha quedado un poco atrasado, es cierto), los soluciona comprando una empresa que haya desarrollado mejor ese software (‘What’s New’). Por cierto, hizo lo mismo la primera vez: la popular Siri fue desarrollada por un tercero y asimilada por Apple. Este gigante, como Google o Facebook, van comiéndose a empresas emergentes y dejando solo tierra quemada (con mucho dinero, es cierto) tras de sí.

Consejos tengo

Ya sé que me salgo del camino, pero creo que este tipo de informaciones también son valiosas (además de las de Rato e Indra): cómo liberar espacio en el Gmail. Lo hemos encontrado en ‘El blog de ChristianDvE’. Y los consejos son, además de sencillos, muy útiles, se lo aseguro: vaciar la papelera y la papelera de reciclaje, ordenar los mails por peso y borrar los que más llevan, borrar los más antiguos… En la bitácora también explican cómo hacerlo fácilmente.

Con el dinero de todos

20150912_todos

Yo les dejo las líneas de ‘El Confidencial’. Pongan ustedes la opinión: “Cuando el PP llegó a la Moncloa, los ministros de Economía y de Hacienda, Luis de Guindos y Cristobal Montoro, anunciaron medidas para castigar las millonarias indemnizaciones que perciben los directivos de las empresas. Cuatro años después, Indra, la empresa que tiene al Estado como principal accionista, acaba de abonar unos 12 millones de euros a tres directores generales a los que despidió hace una semana. Según han confirmado fuentes próximas a la compañía tutelada por el Ministerio de Defensa, Santiago Roura, Emilio Díaz y Emma Fernández, los miembros del comité de dirección que dejaron el grupo el pasado jueves, recibirán una media de cuatro millones de euros por cabeza”.

¿Quién es Tebas?

Nos hemos quedado con la boca abierta después de descubrir, en ‘Extraconfidencial’, quién es, empresarialmente hablando (en lo político le conocemos bien), Javier Tebas: “El presidente de la Liga de Fútbol Profesional tiene montado todo un emporio de sociedades muy diversas bajo su dominio, en las que aparece como administrador, consejero, socio o apoderado (…) Tebas figura en más de 20 empresas en el Registro Mercantil español, desde fábricas de armas hasta empresas audiovisuales, pasando por asesorías y sociedades de exportación. Su emporio en el mundo del fútbol español está basado en cuatro puntos fundamentales: su presidencia en la Liga de Futbol Profesional; su relación con las televisiones; su presencia en Sudamérica y en el mercado asiático (Spanish Soccer International Marketing AIE); y, por último, su relación con las empresas del negocio de intermediación de deportistas (Bahía Internacional)”.

En las antípodas, Innenarity

Todo lo contrario a lo que representa Tebas lo podemos encontrar en Daniel Innenarity. El filósofo presenta su ensayo ‘La política en tiempos de indignación’, y en ‘Vozpópuli’ le han hecho una entrevista con respuestas tan interesantes como: “En España la gente se agita y discute y las cenas acaban siempre mal, en peleas de cuñados, pero eso no significa que seamos una sociedad politizada. El debate público es un debate de tertulianos y nosotros somos un público pasivo” (…) “El ejemplo de Grecia es bueno para mostrar cómo la intervención de la gente en determinados momentos puede empeorar las cosas”.

El modelo de ‘Telecinco’, ¿se agota?

Que algunos espectadores estemos agotados y no recordemos la última vez que vimos un programa de ‘Telecinco’ no significa que el modelo televisivo de esta cadena esté agotado, como bien apunta Borja Terán en ‘La Información’, contradiciendo a quienes afirman que los de Mediaset son casi parte del pasado: “Cuando parece que empieza el desgaste, la cadena principal de Mediaset siempre da un giro de tuerca en el momento adecuado y vuelve a consolidar su sello televisivo. Como si tal cosa”.

Y Apple llegó al ordenador

Parece un chiste pero no lo es: Apple ha estirado tanto el iPad que ha acabado haciendo de esta herramienta algo muy parecido a un ordenador portátil (‘Xataka’). La nueva “tableta” de los de la manzana se abre, tiene teclado y sirve para trabajar. Aún no ha salido al mercado pero yo ya tengo uno que hace lo mismo encima de mi mesa desde hace años. ¿Pierde Apple con esto su seña de identidad? No porque lo que sigue haciendo es caro y “mola” (como dice un buen amigo mío) a partes iguales.