Pero, ¿por qué es peligroso TikTok?

Es incoherente: EE.UU. quiere bloquear TikTok en todo el país pero el equipo de campaña de Joe Biden ha abierto hace un par de semanas una cuenta en esta red social pensando en las elecciones. Y la Unión Europea tiene prohibido que sus europarlamentarias, europarlamentarios y asistentes, instalen TikTok en su móvil, pero ha creado una cuenta institucional para acercarse a la juventud. ¿Por qué es tan peligroso? Porque la dictadura china puede reclamar a la empresa cualquier información en cualquier momento, también de sus usuarios y usuarias. También de Biden y de la Unión.

El doble rasero

Curiosamente, la misma dictadura china que se comporta como tal exige a EE.UU. que deje actuar al libre mercado y no censure TikTok en su territorio. Hay que tener la cara dura. Pero es posible tenerla más: la dictadura china censura contenidos en TikTok para evitar que sea la fuente de guano sin fin que es en el resto del mundo, empezando por Euskadi. Pero no nos pongamos demasiado graves, sobre todo quienes ya hemos visto hasta nacer y morir a Facebook: “TikTok se está convirtiendo en una app ‘de viejos’ en China. Lo que lo peta entre los jóvenes es Xiaohongshu” (Xataka).

¡Sigue, Elon, sigue!

Primero fue la seguridad, despidiendo al departamento casi al completo. Después se cargó la marca. Y ahora está acabando con el sistema de anuncios de X: “Se ha cargado la publicidad en Twitter hasta llegar a los fraudes que usan a Broncano y Sobera como reclamo”, leemos en El Blog Salmón. Quienes usamos habitualmente esta red social hemos visto decenas de anuncios con informaciones falsas y supuestas malas noticias sobre estos dos presentadores, y hasta los chistes al respecto. Yo solo espero que Elon Musk no deje de tomar decisiones sobre su red social.

Pero esta es la grave realidad

Podemos tomarnos con humor que X esté lleno de errores. Pero lo cierto es que ese pozo de lodo maloliente, sin control alguno, solo puede ir a peor. Al respecto, el portugalujo Raúl Díaz, conocido guionista de comedias, se puso serio y acertó: “Debería darnos que pensar la cantidad de gente que, por salud mental, decide salirse de Twitter (llámalo X). Que hayamos hecho de este sitio algo perjudicial para el equilibrio de cualquiera, pero, sobre todo, de gente a la que podemos identificar por su nombre y apellido”. Hablamos de acoso, hablamos de persecución, hablamos de amenazas gravísimas sin consecuencias.

Buscando alternativas

Pero, ¿cuánta gente está en TikTok o Twitter? Según el gráfico que muestran en Trecebits, estos son los datos de España, que pueden ser extrapolables a Euskadi: WhatsApp es la plataforma más usada, un 91% de personas de 16 a 64 años la utiliza al menos una vez al mes. Le sigue Instagram: el 76.9. Se mantiene Facebook con el 69,7. TikTok y X ocupan el cuarto y quinto puesto con el 51,2 y el 45,4, respectivamente. A partir de ahí encontramos Telegram (43,9), Messenger (36,7), Pinterest (31,5) y Linkedin (31,1). Esta es la foto hoy, y este, el dato más relevante: “Ya es internauta el 96% de la población”.

Aunque sea verdad

Porque conozco de las campañas y el funcionamiento de los entes públicos, me cuesta creer que alguien se pusiera en contacto con Silvia Intxaurrondo para ofrecerle una buena renovación solo unas horas después de su ya famosa, pero también profesional y acertada entrevista a Núñez Feijóo. Pero aunque fuese cierto lo que publica El Mundo (soy suscriptor y he leído las piezas íntegramente), en tiempos y cantidades, es obligación de la dirección del medio cuidar su marca para que no parezca que está intentando cobrar una factura política. Y esto lo digo también por experiencia propia, porque sé lo indigesta que es la carne de perro.

La herencia política de Aznar

La herencia política de José María Aznar es una manipulación histórica, una incomprensión extraordinaria y un dolor multiplicado, como podemos comprobar, 20 años después, en Público: “El abogado con más víctimas del 11-M en el juicio: ‘Fue doloroso ver cómo las utilizaron políticamente’”. 192 personas fallecidas y más de 2.000 heridas, y sus familias, han sido revictimizadas una y otra vez en todo este tiempo, con algunos comentarios lacerantes de periodistas muy conocidos, de una manera absolutamente injusta (y no es palabra baladí en este caso especialmente), por aquella mentira de Aznar.

Ricardo somos casi todos y todas

De una mentira histórica como la de Aznar, a una engañifa actual: el “Caso Koldo” afecta negativamente a la confianza de toda la ciudadanía en las instituciones, pero esa ciudadanía no lee periódicos ávidamente ni devora informativos. César Calderón la describe muy bien en The Objective, personificándola en su amigo Ricardo, que “no lee mucha prensa que no sea deportiva ni escucha demasiada radio (era de la SER pero ahora es de Alsina)” tampoco “tiene Twitter ni piensa tenerlo” pero “ha visto cómo ante sus ojos aparecían de forma caótica un aluvión creciente de macarras” que “se lo estaban llevando crudo”.

Una batalla muy, muy lejana

El tuit de Iñaki Olabe sobre la campaña de Trump contra Biden me parece que resume muy bien lo que pensamos muchas y muchos: “Francamemte es increíble que los Demócratas no hayan encontrado un candidato decente para frenar el tsunami populista”. Los republicanos, ya con la nominación solo a falta de formalizar, han lanzado un spot muy sencillo y evidente: un vídeo con los lapsus y los momentos de desorientación de Joe Biden que recuerdan que estamos hablando de un presidente y candidato a la reelección con limitaciones. Pese a que la diferencia de edad no es tanta (81 años de Biden y 77 de Trump), la energía de ambos sí lo es.

Ramadan Mubarak

La felicitación del Athletic a la comunidad musulmana por el inicio del Ramadán es absolutamente pertinente, se pongan como se pongan los racistas. La comunidad musulmana es una más en Bilbao y en Euskadi. En concreto, en la capital, se ganan la vida con nuestra comida, literalmente. Podemos invisibilizar a este grupo poblacional, escondiéndolos en las cocinas de los restaurantes y bares de pintxos, y podemos quedarnos con los delincuentes con los que comparten origen (que son malos musulmanes, además), o podemos naturalizar la convivencia y que compartamos aficiones como el fútbol.

No solo es el cielo, también es el mar

No me escondo: sí, hablo de emergencia climática. Sí, creo que es indemorable la intervención en los sectores productivos. Sí, es imprescindible que un organismo internacional empiece a recaudar dinero de quienes se han hecho ricos destruyendo nuestro planeta y generándonos necesidades, para crear puestos de trabajo encaminados a encontrar, esta vez, soluciones. Y sí, no solo debemos mirar al cielo porque no llueve: “Algunos expertos en clima abogan por un objetivo diferente: en su lugar, quieren establecer límites para la subida del nivel del mar”, explican en National Geographic. En EE.UU. el nivel del mar ha subido ya 30 cm.

Eskerrik asko, Lehendakari

Empezando por EGI, terminando por personas anónimas, evidentemente simpatizantes de EAJ-PNV, y pasando por supuesto por quienes han colaborado con él desde 2012, no son pocas ni pocos quienes han publicado en sus redes sociales su agradecimiento al lehendakari Iñigo Urkullu por su labor al frente del Gobierno Vasco. 12 años que empezaron en medio de una crisis y que, tras una fase de recuperación, han terminado enlazando una pandemia mundial y la invasión de Rusia sobre Ucrania. Un período intenso de la historia global que él ha liderado desde este rinconcito llamado Euskadi que, objetivamente, está hoy mejor que entonces.

El eterno retorno

Esta semana Sumar y Podemos han confirmado que su confluencia en Euskadi es imposible. Es decir: han decidido presentarse como caballos perdedores. ¿Quién quiere subir a uno de ellos? Aunque nadie negará que han corrido mucho, tanto que todo nos parece ya un retorno constante, eterno, como el del filósofo. Hasta esta noticia en The Objective, que va más allá de las elecciones vascas, suena a sobada: “Podemos prevé una lista europea de Sumar repleta de ‘traidores’ del partido morado”. ¿Y quién no lo prevé? Pero que en Podemos se lo hagan mirar: ¿cuánto capital humano dilapidaron o despreciaron?

Hablando de campañas…

Vamos a tener mucho tiempo para analizar las identidades digitales de las candidatas y los candidatos a lehendakari, y para averiguar si se han lanzado a TikTok o no. De momento, y mirando procesos más lejanos, sí sabemos que Joe Biden ha abrazado esa red social después de haber señalado sus peligros incluso a nivel institucional. Con un presidente y candidato de 81 años, el partido demócrata quiere acercarse a la juventud que, por lo que cuentan en El Independiente, rechazan en mayor medida a Trump. Así que buscarán la movilización de ese segmento a golpe de meme y refrito. ¿Esto es lo que funciona?

Nadie paga voluntariamente

Sigo pensando que el internet comercial es lo peor que nos ha pasado como especie: un agujero negro de recursos y tiempo disfrazado de entretenimiento y acceso universal a la información. Una mierda voraz que hay que alimentar, por ejemplo, con imágenes. La mayoría son robadas vilmente para cuestiones irrelevantes. Pocas y pocos pagan por ellas pero menos hacen donaciones: en Photolari cuentan el experimento de Alexandre Rotenberg, que decidió hacer accesible temporalmente su archivo a cambio de donaciones voluntarias, en vez de cobrar una tarifa por imagen, como solía hacer. Para sorpresa de nadie recaudó cero euros.

2.0

Ser candidato a lehendakari no es fácil. Serlo con alguna posibilidad de gobernar, aunque necesites tres carambolas, es aún más difícil. Y el número de personas que se prestan a ello es muy reducido. Así que reconozco a Pello Otxandiano su valentía, pero me pareció que quien tenía miedo con la designación era Bildu y no solo por la voz temblorosa de Otegi. Otxandiano no es una apuesta ganadora: demasiado joven y demasiado de Sortu (estuvo en la dirección que dio paso a la actual, con David Pla y Elena Beloki). Y que sea demasiado de Sortu invita a pensar que la nueva deriva de americana sobre camiseta no satisface plenamente.

No pueden esconderse

Las y los fascistas pueden disfrazarse pero nunca dejan de serlo: Santiago Abascal alertaba de que “en un momento dado el pueblo querrá de colgar de los pies a Pedro Sánchez”. Su conocimiento de la historia y su fundamento político puede resumirse en ese entrecomillado de El Independiente. En el mismo digital destacan que “el PP critica a Abascal” (con cuyos votos cuenta para alcanzar al gobierno de España) y que “acusa” a Sánchez “de buscar polémicas”. Porque Abascal tiene delito (si no lo es, debería de serlo), pero quien le critica con la boca pequeña y señala a la víctima tiene también lo suyo.

¿En qué lado estás?

Esto es muy fácil: ¿estás con Ucrania o estás con Rusia? ¿Estás con Gaza o estás con Israel? ¿Estás con la población civil agredida y masacrada o estás con la potencia militar que lanza misiles contra edificios civiles? EE.UU. está contra Rusia y con Israel. Para el gobierno del país (demócrata, no lo olvidemos) tendrá su coherencia, pero para el resto del mundo es una puta (sí, he escrito “puta”) vergüenza. No hablo del veto en la ONU a una resolución formal, es que manda 14.000 proyectiles para tanques y sin aprobación del Congreso. Ya, ni las formas. “Show must go on”, tuitea Mikel Ayestarán sobre la noticia de El País.

18.000 personas muertas

18.000 personas muertas. Lo escribo con horror, con dolor, pero no puedo dejar de hacerlo: 18.000 personas muertas. Solo en Gaza. A manos de Israel. Bomba tras bomba. Disparo tras disparo. 18.000 personas muertas. Por mucho que Hamás controle la comunicación que sale de la franja, hemos visto lo que hemos visto: niñas y niños asesinados por una maquinaria de matar liderada por un gobierno extremista que cuenta con el primo del Zumosol, ahora llamado Joe Biden. Nadie puede justificar este ataque atroz, y quien lo haga formará parte de un nuevo colaboracionismo, esta vez, sionista, sorprendentemente.

¿Esto está bien?

Me lo pregunto de verdad porque yo para estas cosas soy extremadamente cuidadoso y a veces me paso de precavido. Me refiero a la presentación del libro de Pedro Sánchez, ‘Tierra Firme’, en horario laboral de mañana, con el nombre de la editorial bien visible, presentada por Jorge Javier Vázquez y retransmitida por streaming por “la cuenta oficial del Gobierno de España”. ¿Quién saca beneficio de este sarao? ¿Podemos pensar que hay elementos de esta presentación pagados con dinero público, es decir, nosotras y nosotros, o cómo se nos ocurre hacerlo? ¿Podemos criticar lo desacertado de todo lo anterior?

Muy buena gente

“Vox ordena a sus concejales boicotear los actos oficiales del 25-N, día contra la violencia machista”, leo en El Diario y pienso en lo que me decía el otro día un buen amigo: Vox puede parecernos lo que sea, pero son coherentes y demuestran que son tan malas personas en los gobiernos como parecen en la oposición. Negar la violencia machista no solo es negar una evidencia: es romper un consenso y poner en duda bases del sistema democrático. Es atacar lo que somos (personas capaces de empatizar y llamar a las cosas por su nombre) y lo que no somos (bestias), y ante eso solo cabe una posición: la oposición frontal y activa.

¿Dónde no hay talento?

Andaba otro buen amigo mío trasteando en la web del Parlamento Vasco (hay páginas con información valiosísima pero encontrar los tesoros requiere tiempo) y encontró un link que no pudo evitar enviarme. Cuando lo abrí, me sorprendí igual que hizo él: Lore Martínez, de Bildu, planteaba así una pregunta al Gobierno: “La carencia de talento existente en la CAV es notable”. ¿Dónde nota falta de talento? ¿En su entorno? ¿Hay carencia de talento en todas esas empresas punteras que ponen a Euskadi al mundo? ¿En las y los trabajadores que son fichados por multinacionales? ¿El funcionariado vasco carece de talento?

Correcto

Igual que la unidad de acción de EH Bildu con ERC ha mejorado la política en fondos (las y los vascos han descubierto el posibilismo) y formas (también han descubierto las sonrisas para las fotos y las americanas que ahora no se quitan), la unidad de acción entre EAJ-PNV y Junts per Catalunya será positiva. Estoy completamente seguro. El regreso a la arena política de las y los catalanes, propiciada por unos números endiablados en el Congreso y la necesidad del PSOE, es una gran noticia, que además lo haga de la mano de las y los de Ortuzar la mejora por lo que dijo el lehendakari Agirre: “Euskadi, siempre con Catalunya”.

El misterio del aceite español

Hablemos también de España: en Reuters recogen para el resto del mundo que en ese país, el que más aceite de oliva produce, algunos supermercados guardan las botellas bajo llave por el incremento desmedido de los precios. Un misterio, el de este ascenso asceta, que se extiende, para nuestra desgracia, también a Euskadi (donde producimos aceite, por cierto). Albares tiene trabajo acumulado desde la anterior legislatura: mejorar la imagen de España y de quienes recogen y elaboran uno de sus mejores productos. Pero Pablo Bustinduy, al frente de Consumo, también tendrá algo que hacer y que decir urgentemente.

La gerontocracia

Ya que miro al exterior, lo hago un poco más allá: esta semana hemos visto a Joe Biden llamar Britney Spears a Taylor Swift. Un lapsus, sí, pero en su caso es otro más. Y en la esquina contraria, Donald Trump va cada vez más a su aire pero sigue manteniendo serias opciones para ser el candidato republicano a la presidencia. Eso pondría a las y los estadounidenses ante una tesitura terrorífica: elegir en 2024 entre un presidente (que lo normal es que se presente a la reelección) que hoy tiene 81 años y un aspirante que también lo fue y que hoy tiene 77 años. Entiendo que los 50 sean los nuevos 40, pero esas edades son excesivas para el cargo.