Necesita la desinformación

Trump necesita un mundo desinformado, así ha ganado las elecciones, por eso imprime velocidad a su riada de decretos: no hay manera de analizar e informar de sus consecuencias. Lo sabe (porque será irresponsable pero no es tonto) y por eso hace cosas como esta: “El Departamento de Estado ordena a embajadas y consulados que cancelen todas las suscripciones a medios”. Lo leemos en Voz.us, el digital que nos cuenta el trumpismo en castellano de España. Es evidente porque da esa orden, es evidente que una sociedad informada le molesta y por eso intenta evitarlo.

La verdad

“Europa en conjunto supera a EE.UU. en ayuda a Ucrania” (20 Minutos). Es importante que difundamos la verdad porque de las mentiras y las falsedades se encargan los malos: nada de lo que dijo Trump cuando el miércoles pasado lanzó el tablero internacional por la ventana de su residencia en Mar-a-Lago (es acojonante que este tío provoque crisis internacionales entre partida y partida de golf) era verdad. La verdad es que Europa ha gastado más en Ucrania que EE.UU. (132.000 millones de euros y 114.000 millones, respectivamente), algo que es lógico porque se trata de nuestra seguridad en nuestro continente. Así de claro.

Los nazis

Seguro que es casualidad, pero en la red social de la persona que hizo dos veces un gesto que se parecía mucho a un saludo nazi para celebrar la investidura de Donald Trump, casualmente, insisto, han publicado anuncios que “ensalzan a Hitler y recuperan propaganda pronazi noruega” (Maldita). Me refiero a Elon Musk y a X, por supuesto. “Uno de ellos, que defendía a Hitler, ya no está disponible. El otro, con un cartel de propaganda que en los años cuarenta usaba el partido pronazi noruego Nasjonal Samling, sigue publicado a 19 de febrero de 2025”. Los anuncios incumplían las normas de la plataforma, pero ahí están.

Ya no ligan

Voy a dejar de escribir sobre EE.UU. porque si andas tocando material tóxico te intoxicas. Voy con esto que he encontrado en Infobae y que me parece importante: “La sombra de la salud sexual en la generación que menos sexo practica: ‘Muchos jóvenes prefieren masturbarse antes que esforzarse por seducir a alguien’. La generación Z es la más sexualizada y la que menos sexo practica”. Se refieren a España y, si el mito sigue reproduciéndose, en Euskadi la situación será proporcionalmente más dura. No estoy intentando hacer chistes, al contrario. Me preocupa que se hable de una “recesión sexual” y del auge de la individualidad.

De profesión, sus cositas

A la nieta de Juan Carlos I y sobrina de Felipe VI, Victoria Federica de Marichalar, le va muy bien: participa en un programa de televisión (“por cada entrega de ‘El Desafío’ se embolsa 20.000 euros”, según Sport, que también se dedica a estas cosas), pero no es su única fuente de financiación. “Podría cobrar cerca de 4.000 euros por cada ‘historia’ publicada” y “en algunos eventos, ganaría 3.000 euros por posar en un photocall sin hacer declaraciones ante los medios de comunicación”. No está nada mal, la verdad. Sobre todo, no lo está si tenemos en cuenta que carece de profesión y mérito alguno para ganarlos salvo sus apellidos.

Yo lo voy a intentar

Donald Trump está en su derecho de rodearse de gilipollas y de tomar decisiones totalmente equivocadas. Y yo estoy en el mío de hacer boicot a los productos estadounidenses. Y lo voy a intentar. Evidentemente, con el trabajo que tengo, va a ser difícil: encontrar alternativas a X o Instagram es difícil. ¿La china TikTok es mejor? La alternativa a WhatsApp es rusa: Telegram. Algo podría hacer con el mail, pero llevo 12 años pagando a Google por servirme el mío. Mi página web está en WordPress y la red social a la que más tiempo he dedicado (18 años) es Flickr. Con todo, insisto: yo lo voy a intentar.

Siempre presente

Xavier Tomàs, uno de mis analistas políticos de cabecera, ahora en Bluesky, ha resumido muy bien “cuatro paradojas básicas” que definen nuestro tiempo: damos por hecho la democracia y la paz, también damos por hecho que algunos poderes contrarrestarán al político, buscamos soluciones simples y creemos que los más listos siempre están en el bando bueno. Nada de esto es cierto, lo estamos viendo: Putin y Trump son un riesgo para la paz y la democracia, están legitimados por las redes sociales y los poderes económicos, sus soluciones les sirven solo a ellos y las mentes más hábiles también están hoy a su servicio.

Los principios

Un compañero que sabe mucho más que yo me dijo el pasado viernes una frase estupenda: “Final solo hay uno, todo lo demás son principios”. Seguramente, la frase me gustó porque llevo años convencido del valor que tiene tener unos pocos principios firmes y basados en la bondad para, sobre ellos, construir. Sobre lo que no podemos construir es sobre esta inmundicia: “Un 65% de los israelíes apoya la limpieza étnica de Gaza. El colapso moral de un estado que se creó como respuesta a otra limpieza étnica, la de los judíos de Europa, es estremecedor” (Javier Espinosa en Bluesky).

Segunda parte

Precisamente por haber traicionado sus principios Enrique Dans cree que “el descenso a los infiernos” de Elon Musk es más pronunciado. Vende coches eléctricos para personas concienciadas con el medio ambiente y forma parte de un gobierno que apuesta por la contaminación. Y tiene una compañía para facilitar el acceso a Internet en espacios con más dificultades (desde la Ucrania invadida a países con pocas infraestructuras) y forma parte de ese gobierno que ha entregado Ucrania al invasor ruso y que va a ahondar en las desigualdades para beneficiarse económicamente.

Hemos venido a pasarlo bien

Soy consciente de que esta columna es un poco agria y de que tengo que redimirme. Y lo voy a hacer con esta web: itizso.itch.io/retrofab. Ya sé que parece un galimatías pero merece la pena escribir con cuidado cada letra y punto, y la barra, en el navegador de un ordenador (si no, en Microsiervos han puesto el link). Se trata de una web que recoge todas las “maquinitas” a las que hemos jugado o hemos visto jugar. Esas básicas con una cruceta y uno o dos botones, que hacía que nos arremolinásemos durante el recreo alrededor de quien había sacado una al patio. Cero nostalgia: la jugabilidad en la web es una maravilla.

«Con Trump, Putin logra lo que quería»

Lo suyo es sexo con amor: “Con Trump, Putin logra lo que quería: negociar sobre Ucrania directamente con EE.UU.”. Me vale con la primera parte del titular en la web de la BBC, la que he llevado al titular de la columna: Putin tiene por fin lo que lleva años buscando. Y no me refiero solo a Ucrania. Después de desestabilizar por la derecha y por la izquierda, de encontrar aliados pagados y otros por motivos ideológicos absolutamente equivocados, Putin por fin va recogiendo los frutos. El puto amo aquí no es Trump, que solo es otra alfil, es Putin. Él es el gran agitador, manipulador e interesado en un nuevo orden mundial.

Ambición y falta de empatía

Putin elige con tino a quién tocar, a quién hacer ofertas: necesitaba en el bloque del Oeste a ambiciosos sin escrúpulos y sabía que iba a ser fácil encontrarlos. Eso es Trump, en esencia, un tipo que no duda en coger lo que quiere porque está acostumbrado a hacerlo: “Las tierras raras de Ucrania, uno de los motivos de Trump para que se acabe la guerra con Rusia” (El Economista). Nuestra tragedia como civilización es haber creado un sistema capitalista en el que para enriquecerse algunos han aupado a personajes como Putin, Trump, Musk y les han regalado esa sensación de impunidad.

Sin sorpresas

Insisto: hemos aceptado vivir en un sistema perverso porque tenemos sensación de prosperidad, pero lo han generado quienes lo han usado para enriquecerse (mucho), y para lograrlo han tenido que convertir en insultantemente ricos y poderosos a otros que, ahora, simplemente, han llevado a otro nivel eso de hacer lo que les da la gana. “Los discursos de odio han aumentado en X un 50% desde que pertenece a Elon Musk”, leemos en El Nacional y no nos sorprende. Ahí está el síntoma, en que damos por normal algo que no puede serlo, en que no nos revolvemos, ni combatimos, ni abandonamos X, en que no hacemos nada.

Una buena noticia

Atribuyen a Benjamin Franklin eso de que “nunca hubo guerra buena ni paz mala”. No sé si lo dijo, lo escribió o todo es un error, pero la frase es indiscutible. Así que esta es sin duda una buena noticia: “Hamás e Israel alcanzan un acuerdo para mantener el alto el fuego” (Vozpópuli). Luego, iremos al detalle, a lo estable que puede ser ese alto el fuego, a la ambición de Netanyahu y de Trump, al papel de Hamás (desaparecido mientras el ejército israelí arrasaba en Gaza) y de cómo y quién va a ayudar en la reconstrucción de una Gaza para las y los gazatíes, y no para ricos que buscan un nuevo resort.

Sigue siendo el Golfo de México

Gracias a una de las últimas ocurrencias de Trump, la de cambiar de nombre el Golfo de México (a lo que ha accedido Google de manera acrítica), he descubierto la actividad en redes y la página web (muy interesante porque elige temas de actualidad para exponer sus contenidos) de la Enciclopedia Británica. En Bluesky avisan de que su institución no va a modificar el nombre de la masa de agua: lo rechazan porque “Golfo de América” es ambiguo, porque lleva llamándose “Golfo de México” más de 425 años y porque más allá de EE.UU. carece de sentido la modificación, según los ingleses.

El futuro de Internet

Yo veo como futuro de Internet lo que Enrique Dans ya ve en el presente. No puedo negarlo, me lleva años de adelanto (y por eso me resulta tan interesante): “Un internet cada vez más hostil hacia los humanos, plagado de spam optimizado para las búsquedas en Google, de artículos patrocinados llenos de estupideces y con títulos repletos de clickbait, de anuncios inútiles y de basura generada mediante inteligencia artificial generativa”. Él aboga por que Internet siga consistiendo en “diálogos entre personas” y por eso afirma que seguirá gestionando su bitácora y sus redes de manera personal y artesana. Me sumo.

No pasa por el Metaverso

El futuro de Internet no pasa por el Metaverso. No, por lo menos, como está concebido hoy. En 3D Juegos lo explican muy bien: primero hablan de que 2025 va a ser un año clave para el proyecto de Zuckerberg que hace aguas por todos los sitios. Después recuerdan que, en este tiempo en el que Meta lo intentaba con empeño, hay dos proyectos similares que sí han triunfado: Roblox y Fortnite, para los que no hacen falta esas gafas de 400 € que hay que tener para acceder al universo paralelo de Meta. Y hace ya unos cuantos años, Second Life tuvo más éxito que el Metaverso.

En época de aranceles…

Parece que Trump se ha pensado mejor lo de los aranceles a Canadá y México, pero por si acaso se pone chulo con Europa, nos vamos preparando: en Xataka han publicado una lista de “61 alternativas europeas a Google, X, Gmail, Chrome, Maps, DropBox, Google Drive, WhatsApp y otros servicios populares”. Algunas de ellas las conozco de primera mano y el manejo y la fiabilidad son equiparables a los de los servicios estadounidenses, y en los ordenadores es muy fácil utilizarlas. Pero mientras sigamos teniendo móviles de Apple o de Android, vamos a tener dificultades para evitar las que nos resultan más accesibles.

No vuelve YouTube porque nunca se fue

Por muchas herramientas que aparezcan y nos fascinen, y por muchos cambios que algunos pongan en marcha en viejas plataformas, seguimos buscando y usando refugios, también digitales: Microsoft, Facebook (Andoni Ortuzar ha publicado en esta red sus últimas cartas, puede que las más importantes de su carrera política) o YouTube son fortalezas difíciles de derribar. Ahora vemos, después de la eclosión de Twitch (que no fue para tanto) y TikTok (que sí tiene mucho volumen, pero de porquería), que streamers e influencers refuerzan su presencia en YouTube: “De Ibai a Emma Chamberlain”, titulan en Público.

Ya veremos

Ya he sobrevivido a otros impactos de asteroides fulminantes contra la Tierra. De hecho, ni recuerdo cuántos han sido ya. Ahora viene otro: “La NASA alerta sobre el asteroide 2024 YR4: riesgo de colisión con la Tierra en 2032” (The Objective). Pues bueno, pues vale, pues me alegro, como escribía Ivà en Makinavaja. Ojo, no estoy despreciando la labor de NASA y ESA, al contrario: su trabajo es monitorizar y avisar, y lo están haciendo a la perfección. Lo que me hace tirar de sorna es más el mensaje alarmista de los medios (va un poco de autocrítica, sí), cosa que no hace Brenda Alonso en el digital citado, la verdad.

«La industria de la guerra»

Joseba Permach puede tuitear sobre la industria de la guerra porque sabe del tema. Quienes tenemos memoria le recordamos justificando los asesinatos a personas no pensaban como él. Hoy en X, cómo no, ha encontrado el altavoz de los fascistas y en la UPV/EHU un lugar que le acoge y premia, qué desgracia. Pero debemos marcarle de cerca: quien ríe (en forma de retuit, no hace falta ir más allá) sus gracias es idiota o estaba de acuerdo con lo que dijo e hizo Joseba Permach cuando ETA disponía del plomo y la plata en Euskadi. Por cierto, la inversión europea en armamento ha servido para defendernos de Putin. ¿En qué lado está él?

Fascismo

Me mojo, alguien tiene que hacerlo: no hay diferencia entre la Euskadi idílica que planteaban esos a los que justificaba Permach después de asesinar y la Gaza idílica que plantea Trump. Una Riviera lograda con la eliminación del adversario y al que no le guste que se vaya del pueblo. Así son los fascismos, que no importan que sean de derechas o de izquierdas, de un pueblo pequeño o de un enorme estado de estados: buscan la «“»liquidación» (EPE). «¿Y si dejamos de imaginar, los mandamos a casa y empezamos a hacer algo diferente?», termina su hilo el profesor de Economía Aplicada. Algo parecido piensa Trump sobre Gaza.

¿Qué puede salir mal?

Después de conocer el plan de Donald Trump para Gaza leí esto en Euronews: “EE.UU. podría revelar el plan de paz de Trump para Ucrania la próxima semana”. Zelenski tiene que estar preocupado. Yo lo estoy, desde luego, porque la invasión rusa sobre Ucrania es un ataque en el borde exterior de la Unión Europea, y lo que pase allí aumenta o reduce nuestro riesgo. En plata: cuanto más lejos esté Putin (ese al que ni condenan ni rechazan en una parte muy importante de las izquierdas vasca y española), mejor. Pero Trump es capaz de cualquier cosa y aprovechará esta oportunidad para perjudicar a la Unión Europea.

Son sus decisiones (y las mías)

Donald Trump ha demostrado, vía decreto, su transfobia. También lo han hecho en Iusport, el digital sobre la industria del deporte, en el que han titulado: “Trump firma una orden para vetar a los hombres en las categorías femeninas”. Son sus decisiones (las de Trump y las de quien redacta, aprueba y publica la noticia citada) y yo tomo las mías: aborrecer al político ultra y poner por última vez, al menos por un tiempo, un pantallazo de ese medio. De lo suyo gastan y mi atención y mi cariño suman poco, lo sé. Pero cuantos más seamos los que tengamos claro quién es el enemigo, más daño haremos.

Cuidado con la pureza

Yo soy antifascista en todo momento y lugar. Esa es la única manera de ser antifascista. Pero no soy puro: me equivoco, juzgo, señalo e intento comprender. No va conmigo ni guardar las esencias ni los linchamientos: en el digital de Pablo Iglesias les parece fatal que Pedro Vallín vaya al programa de Antonio García Ferreras. Señalan al ex de La Vanguardia (que tiene que seguir facturando) como próximo a Yolanda Díaz y le echan en cara que se jactara de los errores de Al Rojo Vivo. Recuerdan la amistad entre Vallín e Iglesias pero no que el líder de los morados también participó en el mismo programa.