Lo primero que quiso decir Valverde al llegar a la sala de prensa después de obtener los tres puntos, fue que aunque seguramente era poco para lo que se merecía, los puntos eran para Iñaki Azkuna. Por supuesto me uno a esa dedicatoria de parte del Club. Hubiese sido una pena que no se hubiese podido hacer. Azkuna, bilbaino de pro (a pesar de no ser de Bilbao, ya se sabe que el de Bilbao nace donde quiere…), se merecía eso y mucho más.
Los que no se merecen ni eso, ni nada, salvo el mayor de mis desprecios son los … que silbaron durante el minuto de silencio que se guardó antes del partido. Hay que decir que fueron pocos, muy pocos, ¿cinco, seis, siete… o diez? De todas formas los suficientes para agarrarme un cabreo de los sordos. Bueno sordo no, y mudo menos, porque cuando acabó el minuto y tras los respetuosos aplausos ofrecidos a nuestro alcalde, me levanté a chillar a los 4 ó 10 impresentables. Y me alegré infinito cuando comprobé que no me quedé sola, ya que el concierto de viento hacia ellos era generalizado. Hoy al leer la prensa, de todas formas, he sabido algo que ayer desconocía al estar en San Mamés, y era que uno de los grupos de la grada de animación había recomendado respetar el minuto de silencio. También que otros (no sé si los mismos, no lo especificaba el periódico) habían decidido no estar presentes y entrar en la grada una vez acabado el mismo. En ese periódico decían también que cuando entraron, el público les dedicó una sonora pitada. Como tengo posibilidad de explicarlo aquí, yo que quede claro que a ellos no les silbaba. Silbaba o chillaba contra los irrespetuosos que no son capaces de mantener el silencio, durante dicho minuto. Ni idea de sus motivos, de hecho me dan igual (a pesar de la curiosidad), pero me demuestran que son de lo peor. Por otro lado, los que no quieren escucharlo y entran después, me parece que son muy libres de hacerlo, esa es una opción, pero no es irrespetuosa. No quieren verlo y no lo hacen. Perfecto. Aunque no lo comparta, ellos sabrán. Yo a ellos no les chillo. Yo critico a los que en contra del sentimiento de 35.000 personas no son capaces de entender su dolor o simplemente su respeto hacia un hombre importante para la ciudad, y al que tras irse se le quiere hacer un pequeño homenaje. De hecho, pequeño para lo que se hubiese merecido. Se les debería caer la cara de vergüenza, aunque supongo que eso, la vergüenza, no saben ni lo que es. Ni vergüenza, ni educación. Vuelvo a decir, ellos sabrán, pero que se enteren que La Catedral les demostró el mayor de sus desagrados. No son ni queridos, ni bienvenidos si su comportamiento es el demostrado el sábado.
Sobre el partido en sí decir que el Athletic va firme y brillante (coincido con Txingurri) hacia su objetivo. El resultado es engañoso. Los rojiblancos tuvieron oportunidades a mansalva, incluso en ese primer tiempo que fue muy trabado y farragoso porque así lo planteó el Getafe. Muralla, autobús ante la puerta y si suena la flauta de la contra (que precisamente eso era lo que quería Contra, su entrenador), mejor que mejor. También en esa situación se podía haber metido algún gol más además de la maravilla que obtuvo Markel Susaeta. En el segundo tiempo, otras y mejores oportunidades, pero… o el último pase o la definición, eran defectuosas, lo que hizo que el Getafe estuviese vivo todo el partido a pesar de su propia inoperancia. Incapacidad sobre todo motivada por el trabajo de nuestros jugadores que presionan muchísimo y siguen yendo a por el gol con insistencia y trabajo espartanos. Eso sí, si llega a meter el gol en el minuto 87 Ciprián, en su oportunidad desde el borde del área, se nos hubiese quedado cara de tontos. Se puede, pero… no se debe fallar tanto. Y si tengo que elegir el mejor o los mejores de ayer, decir que me pareció un muy buen partido de Rico, desde el minuto uno al último. Así como de Iturraspe. Ambos más terrenales en los últimos partidos, en los que se les vio menos (bajaron prestaciones), volvieron ayer a un nivel sobresaliente. Laporte también muy bien, y Herrera y Susaeta, a los que critico bastante (porque espero mucho de ellos), también estuvieron bien.
Sobre los equipos tras nuestra estela, el Sevilla, a falta de lo que haga la Real en Almería, es el más cercano, está a 8 puntos. El Villarreal ha vuelto a perder, por lo que se retrasa a 10 puntos. Ya veremos la Real.
Y ya, mañana mismo, a jugárnosla con el Elche allí. ¡A por ellos, Athletic! Y así el buen resultado se lo volvemos a dedicar a Azkuna, que como ya dijo Valverde, se merece eso y mucho más. ¡Va por ti, Iñaki!