Imposible. Llevamos 20 años sin ganar en el Camp Nou y ayer no fue distinto. Estuvimos cerca del empate pero no lo logramos.
Un Barça muy superior en el primer tiempo, que jugó frente a un Athletic, desconocido hasta ahora con Marcelino, nos pudo hacer un roto, pero la vuelta del mejor Unai Simón lo impidió, ya que desbarató varias de las ocasiones culés. Ya tenía ganas de volver a ver a este Unai, que esta Liga parecía que lo habíamos perdido. La semana pasada contra el Getafe ya estuvo providencial deteniéndole el penalti a Mata, y ayer estuvo igual unas cuantas veces. Seguramente ésta es con diferencia la mejor noticia de ayer. Muy bien.
Repito que el Barcelona fue muy superior en la primera parte pero, curiosamente, si no es gracias al amigo Mateu Lahoz, no hubiesen conseguido su único gol. Ya sabíamos todos antes del partido que esto podía ocurrir. No era una premonición, era una certeza. Sus estadísticas con los rojiblancos son casi imposibles, por los horrorosos números que tiene. De 36 partidos, 23 derrotas, 7 empates y 6 victorias. Con la de ayer 24 derrotas. Y para seguir en su línea de «derribo» al equipo se inventó una falta al borde del área, medida perfecta para Messi, cuando el balón ya estaba en otra punta del campo, porque vio un contacto entre Vencedor y Leo. Vamos… la falta la traía preparada ya desde casa. Lugar perfecto para el mejor jugador del mundo, que volvió a hacer una maravilla, colocando el balón donde no llega nadie. Gracias Mateu, no esperaba menos de ti. Teniendo en cuenta que éste fue el único gol del Barcelona en el primer tiempo, podíamos haber llegado al descanso con empate. Es indecente lo de este trencilla con el equipo. Tiene peores números que Undiano Mallenco, con eso lo digo todo. Y encima se oye por ahí, que probablemente arbitre la final de Copa. ¡Qué horror!
Así llegamos al descanso, y en el segundo tiempo si «compareció» el Athletic de Marcelino, el descarado que solo piensa en ir hacia arriba. Y conseguimos no solo meterles miedo, sino también empatar, en una de las aproximaciones. Fue gol en propia de Jordi Alba, pero estaba ahí De Marcos, si no para meterlo él. Perfecto Raúl García en la asistencia. A partir de ahí fue un toma y daca. Unai nos seguía manteniendo en el partido y nosotros le metíamos más miedo al rival. Pena que a alguna de las muchas internadas de Yuri, con pases atrás, no consiguiera llegar Williams. Pena. Ellos con una gran jugada, consiguieron, otra vez por medio de Griezmann, ponerse de nuevo por delante. Lo seguimos intentando pero no fue posible. Repito una pena, porque en el segundo tiempo se hizo un trabajo enorme. El Barça pudo matar más, pero no lo hizo, gracias a Simón.
Así perdemos otra vez, en Barcelona, pero nos quedamos con la buena imagen del segundo tiempo y con que podemos competir con cualquiera por bueno que sea. Y con esta idea iremos a Sevilla a jugar el importantísimo partido de este jueves en Copa, contra el Betis. Partido fundamental, primordial,… en el que hay que ir con todo para intentar meternos en semifinales de Copa. Ahí es nada. Así que… ¡A por el Betis! Y…
¡Aúpa Athletic!
P.D.: Poco os he dicho de lo que pienso de Mateu Lahoz, pero ha sido porque puede ser hasta delito. Pero si queréis conocer sus datos horrorosos con el Athletic no tenéis más que ver las estadísticas que estos días ha publicado la cuenta de Twitter Adurizpedia (es un artista), cuyo enlace os lo pongo aquí para que clickéis y lo consultéis.