¡Qué gozada de Athletic!

Otra vez en el primer tiempo haciéndonos cruces y pensando que cómo era posible ir perdiendo ese partido contra el Valladolid. Eso siempre te hace ponerte en lo peor y acordarte, por ejemplo del cercano partido del Benito Villamarín donde increíblemente salimos derrotados.

¡Ibai ya lleva seis goles! (Foto: Athletic-Club)
¡Ibai ya lleva seis goles! (Foto: Athletic-Club)

Algunos dirán que el 4 – 2 final es por San Mamés que parece que funciona como talismán. Yo aunque no voy a negar lo anterior, le voy a dar un poco más de mérito al equipo. Como el mismo Valverde ha dicho quizá éste ha sido uno de los partidos más completos del equipo en La Catedral y desde el minuto uno hasta el noventa. Las oportunidades de nuevo se han ido sucediendo sin pausa y siendo un continuo atacar y percutir sobre puerta contraria. Otra vez el equipo dominaba el partido, tenía el control del balón y encima creando oportunidades y entrando en el área con cierta facilidad y combinando con calidad, sin tomarse un pequeño descanso. Incluso se han sacado sólo en el primer tiempo la friolera de 10 corners, los de Beñat desde la izquierda bastante más peligrosos que los de Susaeta por la derecha. Aunque el más peligroso de todos el único sacado por Ibai (los galones son los galones y estando Beñat y Susaeta no se los dejan sacar, pena porque los pone genial). Las oportunidades se sucedían, pero no se acertaba o más bien habrá que decir que el mejor del Valladolid estaba siendo el portero Diego Mariño. Encima, para empeorar lo increíble, en un despiste nuestro y tras un fuera de juego de ellos llega el gol en el primer acercamiento al área de los de Pucela. El árbitro no ha estado muy fino, y nada bien auxiliado por los linieres. Aparte del gol en fuera de juego hay dos manos en el área del Valladolid, sobre todo una de ellas clarísima, que nos deberían haber permitido empatar el partido en el primer tiempo. Pero… con que los árbitros sean malos ya se cuenta así que…sólo quedaba seguir trabajando la segunda mitad como locos.

Y así han salido los jugadores, pero seguía siendo la noche del portero vallisoletano. Le saca una mano increíble a Ibai ante un balón tirado a colocar que se colaba cerca del palo y con mucha fuerza. Más tarde con el pie, hace lo mismo con otra muy difícil por bajo de Iraola, a modo de portero de balonmano. Parecía que no era nuestro día. Pero en éstas que Aduriz vuelve a chutar desde el borde del área, rechaza Diego hacia su derecha llegando el balón a Ibai, que esta vez, de nuevo tirando a colocar, al palo contrario, tiene la “fortuna” de conseguir el empate. Estaba abierta la lata y tal como estaba el Athletic era casi imposible que se cerrara.

Otra vez Ibai pone un centro preciso a Aritz que pica el balón al centro del área pequeña para que De Marcos, demostrando una vez más que tiene llegada, entrase de cabeza a empujar a la red. Segundo, pero a por más. Otra jugada en la que participan los mismos protagonistas de este segundo gol pero en otro orden. Aduriz que baja el balón y se lo pone a Ibai por la izquierda, éste se aprovecha de la pantalla que De Marcos le hace al defensor, para meterse al área sin gran oposición y volver a colocar el balón lejos del alcance del hasta ahora héroe del partido (pero más, ya es que no se podía parar).

Ander Herrera pone la guinda de cabeza. Y el segundo gol del Valladolid se queda como una anécdota que quizá no debería haber ocurrido pero vamos a dejarlo en mérito del serbio Rama que se inventa un eslalon entre los rojiblancos para fusilar a Iraizoz. Con 4 goles a favor se permiten estos despistes pero… ante otro equipo y en situación más equilibrada (pensemos en el jueves) te puede costar carísimo.

Nombres propios a destacar, a parte del bi goleador Ibai Gómez, quiero mencionar a Beñat que me ha vuelto a gustar. Pena que Valverde ha decidido cambiarle por De Marcos, al poco del segundo tiempo, porque me hubiese gustado verle más minutos. Sigo pensando que nos puede aportar mucho. De hecho, como mayor piropo que se le puede decir en el partido de ayer decir que no eché de menos a Mikel Rico, y si tenemos en cuenta el estado de forma de Rico… el mérito es de Beñat.

Y ahora al Calderón, y a ver si los madrileños se dedican a jugar sólo y no a dar cera como lo hacen habitualmente. Y en el caso de que repartan como lo suelen hacer que el árbitro no lo permita, como lo hizo el otro día en el partido que tuvieron los colchoneros contra el Sevilla (demasiado pedir, ¿verdad?). ¡Qué bueno pero qué cerdo es Diego Costa! (Fazio tampoco se quedó corto…). Volviendo al Athletic, que nuestros chicos no caigan en sus provocaciones (Godin también es un experto) y que se dediquen a jugar como lo están haciendo últimamente. Traer un buen resultado de allí sería importantísimo para poder seguir adelante en la Copa. ¡A por ellos!

 

Ganar al Betis todo menos fácil

Ya están solventados los octavos, eso sí, con más apuros de lo imaginado, tras lo visto en el partido de ida y por ser el rival el colista. Como un gol metía al Betis en la eliminatoria, hasta el pitido final no hemos podido respirar tranquilos. Si nos fijamos en las oportunidades que ellos han tenido hay que reconocer que han sido más bien pocas, por no decir poquísimas. Pero… cualquier fallo… cualquier despiste,… Además no nos podíamos olvidar del viento. ¡Qué vendaval! Controlar y dirigir el balón en esas condiciones es mucho más difícil. Si en el primer tiempo era fuerte el viento en el segundo lo ha sido mucho más. Incluso ha habido una aficionada herida con uno de los carteles de publicidad. Esperemos que no haya sido nada.

Mikel Rico imparable
Mikel Rico imparable (foto: Athletic-Club)

Escribir este comentario y no hablar sobre Mikel Rico es imposible. Nos está dejando a todos con la boca abierta. Él, al acabar el partido, ha dicho que San Mamés coreando «Mikel, Mikel» le ha puesto la carne de gallina. A mí la carne de gallina me la ha puesto su primer gol. ¡Qué maravilla! El desmarque es increíble, buscando el espacio libre, aprovechando que los defensas siempre están más pendientes de Aduriz. Ante el preciso pase de Iraola, su control con la derecha para bajar el balón y dejarlo muerto a sus pies, es digno de cualquier mega crack. Luego, se lo pasa a la izquierda con una tranquilidad impropia de un no delantero, y ante la salida del portero cruza el balón al palo contrario. ¡Qué gozada! No contento con meter ese golazo, en el segundo tiempo, además de recuperar el montón de balones, como en todos los partidos, vuelve a llegar al borde del área a pillar un balón suelto para golpearlo, ahora con la derecha, con toda su alma y colocado. Eso sí, aquí teniendo la fortuna de que toca en un defensor, para que entre pegado a la cepa del poste, imposible para Sara, el portero. Repito la frase dicha al inicio del comentario, nadie esperaba lo que está ofreciendo Mikel, por lo menos a nivel de goles. Sí que sabíamos el trabajo, el sacrificio que ofrecía porque por ellos era destacados en su anterior etapa en el Granada pero… esa capacidad de llegar, y ese olfato para estar colocado como lo está, no. Bienvenidos sean y que le duren mucho. De todas formas, de lo bien que está jugando Mikel, creo que en parte tiene mucha «culpa» Iturraspe y su también enorme momento de forma. Es otro imán para los balones, con capacidades más defensivas, lo que le permite a Rico, como dijo el otro día Txingurri, desordenarse más (desordenarse dentro de un orden), pero siendo muy aprovechable ese tipo de juego para el equipo. Pues Valverde, Mikel, sólo tengo que decir que… ¡Viva este  “desorden”!

Y ahora, después de que venga el Valladolid, tenemos que pensar en la siguiente eliminatoria contra el Atlético de Madrid. A priori muy apetecible de ver porque creo que los dos equipos están en muy buen momento de forma. Aunque en Liga ellos estén muy por encima, en la Copa todo es posible en 180 minutos y más siendo el partido de vuelta en La Catedral. ¡A por ellos!

 

¡Por fin, Athletic!

Da gusto escribir tras una victoria como ésta (3 – 0) y encima frente al Atlético de Madrid. Ya era hora.  Las dos jornadas anteriores se habían dado unos pequeños pasitos que nos hacían ser optimistas, pero que no eran como para echar cohetes, porque encima no habían venido acompañados de puntos, y la alegría definitiva, está claro, que te la dan los puntos. Y si encima de conseguirlos se ve buen partido, miel sobre hojuelas.

A pesar de... no pudieron pararles

Como llevo una temporada larga criticando a Gorka no puedo hacer otra cosa que empezar diciendo que hizo un buen partido, con dos paradas importantes, tanto por los momentos en los que se dieron, como por su calidad. Sacar el tiro de Raúl García a la base del poste era muy muy difícil. En este caso, como en el del Athletic, también he de decir, que ya era hora que hiciese un buen partido. Fenómeno y que siga así.

En segundo lugar quiero resaltar la victoria porque el Atlético estuvo muy bien. El 3-0 no refleja el hecho de que también nuestros chicos pasaron sus apurillos para conseguirlo. Viendo el resultado (sin ver el partido) puedes pensar que fue fácil, y nada más lejos de la realidad. A los de la capital les sobra calidad, y quizá sólo detalles fueron los que influyeron en el resultado final. Por ejemplo, que Iraizoz respondiera en esos dos momentos como lo hizo, fue crucial. Si no llega a ser así quizá ahora estaríamos hablando de otro resultado.

Un recuerdo especial para el árbitro, que como siempre, tiene que aportar su granito de arena particular y si es Muñiz, el granito se suele convertir en paladas y paladas. Para empezar yo vi tres penaltis. El primero el que hicieron a Aduriz nada más empezar, que seguido remató De Marcos al cielo. ¿Dejó ley de la ventaja?  Me extraña mucho. El segundo las manos de Juanfran, también ante Aduriz (más difícil de ver). Y el tercero, por supuesto, también a Aritz, al que el Cata Díaz le intentó arrancar la cabeza, no me acuerdo si en un corner o en una falta lateral. Imposible de no ver. Por supuesto no pitó ninguno. Tampoco vio violencia en la entrada del “Cebolla” Rodríguez a Ekiza. Vaya salvajada. Ni cómo Juanfran le agarró de la camiseta a Muniain. Ni a Godín haciendo de todo, ni a Raúl García dando patada por detrás,… vamos que no vio casi casi ni el partido. Este árbitro desde luego es un amigo para el Athletic.

Para acabar, como ya comenté la semana pasada, al Athletic, a nuestros jugadores no se les ha olvidado jugar al fútbol, al revés, lo siguen haciendo muy bien y vistoso, porque vaya maravilla de dos contraataques, culminados en gol, que nos brindaron. Así da gusto empezar la semana. Que sigan haciendo lo mismo, en Valladolid, este viernes. Se lo agradeceremos.

 

Mejoría clara en el Athletic pero…

Quien lea mis comentarios habitualmente quizá piense que no sé hablar de otra cosa, es probable que crea que tengo una fijación con algún jugador, seguramente observará que me repito,… Sí, no lo puedo negar, en mi descargo diré que ya me es muy difícil ver los partidos esperando la anchoa de Iraizoz.  Pero, seguro que tú, lector, también tiemblas y agudizas la vista cuando ves el balón cerca del portero. Y esto es grave. Es muy grave. 

¡Así no hay manera!

Mi cabreo aumentó ayer porque su recital comenzó nada menos que en el segundo 48 de partido (todo un record), con una salida a destiempo que provoca un penalti claro. Pensé: ¡adiós partido!  Pero, gracias, no sé a quién (bueno sí, a los jugadores y a su esfuerzo) me equivoqué, porque fueron capaces de sobreponerse al nuevo varapalo del primer minuto y remontar en el Benito Villamarín contra un Betis que está en puestos Champions. Pero el resultado final no es capaz de tapar ciertas actuaciones. Reconozco que el cambio de portero es una decisión arriesgada pero, no se puede jugar sin portero o peor, con uno que te complica la situación desde el minuto uno. Llevamos así toda la temporada. Además, por si fuera poco el error comentado, poco después nos deleitó con dos salidas de puños terroríficas, en una de las cuales me pareció que ni tocó el balón. POR FAVOR, ¡CAMBIO EN LA PORTERÍA YA! Es complicadísimo poder ganar los partidos así. ¿No se ha sustituido a Amorebieta? ¿Por qué a Iraizoz no?

A partir de ahí hubo 30 minutos de absoluto desconcierto, con entregas de balón continuas a los contrarios, pero… nuestros jugadores volvieron a aparecer. Volvieron a combinar como el año pasado, aunque con menos puntería.

El segundo tiempo fue la confirmación de lo anterior. A nuestros chicos no se les ha olvidado jugar al fútbol. Saben pasar el balón y combinar con verticalidad. Y personalizando, estoy de acuerdo con Bielsa en que Muniain mejoró, pero siguió cometiendo muchos errores, y puede y debe aportar muchísimo más (sus juramentos al ser sustituido me volvieron a enfadar bastante). Susaeta y De Marcos deben afinar la puntería porque la cantidad de ocasiones que fallan es desesperante. De este último decir, también, que  volvió a demostrar ayer que su puesto no es de lateral, sino en el centro del campo donde mejoró mucho.  Gurpe se volvió a lesionar (está teniendo muy mala suerte). Ekiza para mí de lo mejorcito ayer (salvo en el desconcierto inicial), demostró que con partidos se va asentando y seguro que va a ir a más. Laporte comenzó el hombre bastante flojo con muchas entregas peligrosas a contrarios pero… se fue entonando a la vez que el equipo y acabó a muy buen nivel. Su cabalgada hacia el área fue espectacular, pena de placaje… porque me hubiese gustado ver cómo acababa la jugada. Sobre Aritz me voy a permitir hacer una rogativa: “Virgencita, virgencita, consérvame a Aduriz y que siga como está”.

Para acabar decir, que fue una pena que no se llevaran la victoria, que fue más que merecida, ya que en el segundo tiempo dominaron de cabo a rabo al Betis. Pero bueno, la victoria llegará con el Atlético de Madrid. ¡Qué así sea!

 

 

Jaivitada (sic) del Sr Martínez

Lo de este verano y mi capacidad de sorpresa no tiene límite. Ayer si alguien al leer la noticia del nuevo jugador hipercarísimo del Bayern (Javier Martínez), me dice que pensó que era cierta, le diría: …pero ¡Qué dices! Y resulta… que es cierta, que Javi de madrugada fue a las instalaciones de Lezama, y entró, no se sabe si saltando vallas o no, para recoger sus objetos personales… ¿?

A ver cómo lo digiere Jupp...

 

Increíble. LLevo más de una semana sin escribir en este blog, pero es que cada día que pasa, hay algún nuevo desastre y ya el anterior se queda obsoleto. La semana pasada fue lo del circo y que el Club no fuese a la hora convenida de la función de tarde, y que a la siguiente función no fueran los jugadores que tenían que ir: ¿quién es el artista que se encarga de esas cosas? ¿Se puede solucionar peor? Y, claro, como no nos enteramos de quién es la culpa, cada uno parece sacudir al que más le conviene según sus preferencias… ¿quizá la culpa también era de Llorente? Sin saber cómo fue, yo también me hago mi película particular, para sacar algo positivo, pero sólo lo puedo ver en Ibai Gómez, que me lo imagino corriendo por Santutxu para llegar a la función porque le avisaron sin tiempo (digo yo que sería así, por lo que gracias, Ibai)

La anterior «fiesta» la tuvimos con los del Frente Atlético en Lezama… ah… que no… que no eran del Frente Atlético… que eran aficionados del Athletic… Glubs… ¡qué bien! Bueno, pues esos que fueron a montarla en Lezama como si fuese el campo de entrenamiento del Atlético de Madrid. Faltaba el trajeado con el pasamontañas. Otro ridículo que alimentó los telediarios locales y nacionales. ¡Genial!

Y, como fin de fiesta (porque espero que así sea, ya que no estoy para soportar más bochornos), lo del fin de semana Javi entrando de madrugada a por sus pertenencias ¿?¿?¿? ¿En Alemania hay cambio de hora? ¿No podía haber ido de día? ¿Era necesario pasar sin avisar? ¿No podía haber enviado a alguien a por todo? Y si decide ir él, ¿no podía haber utilizado el paraguas tan chulo que utilizó para el reconocimiento médico?… Éstas y muchas más son las preguntas que se me ocurren… y todas ellas me llevan a una conclusión: ¡Tenía que estar borracho para hacer semejante mamarrachada!

Y ahora, a divulgar la información a los cuatro vientos y que los alemanes la digieran como puedan, total,… el jugador es suyo y sólo han pagado 40 millones de euros… (Eso sí,… espero que fuese sólo y no le acompañase ningún amigo… porque… ¡Qué cruz!)