Así sí Athletic. Así sí.
Así se juega un derbi. Saliendo a comerte a los rivales a los que no les dejas ni respirar y mucho menos sacar el balón con un poquito de criterio. Asfixiados pasaron los blanquiazules todo el primer tiempo. La Real era un muñeco ante los rojiblancos. Y esto que estoy diciendo se puede ver claramente demostrado en las estadísticas. 10 tiros del Athletic frente a ninguno de la Real. Ahí es nada. La Real parecía una mera comparsa que se tenía que limitar a conseguir un penalti inventado por el árbitro de turno, que pitan facilísimo siempre en nuestra contra, pero que esta vez el VAR echó por tierra. Falta fuera del área. Y seguido otra parada del VAR para ver si es penalti una posible mano de Íñigo Córdoba. ¿Por qué revisan esa jugada y no revisaron la semana pasada la mano en el área del Getafe? Vaya usted a saber.
La Real no hizo más y nosotros sí. dos goles como dos soles. Un Capa en estado de gracia que, de nuevo en un saque de banda, tras una internada, pone un perfecto balón que Iñaki se limita a empujar a la red. Y Raúl García, que no quiere que Aduriz sea el único que hace maravillosos goles, se inventa un tiro medio vaselina desde el borde del área, que es una pasada. Un grande, Raúl es un grande.
Y en el segundo tiempo, aunque los rojiblancos no pudieron mantener el ritmo de la primera parte, no sufrieron tampoco mucho ya que la Real su primer tiro a puerta lo hizo en el minuto 83 y el segundo, en el minuto 97. Nada más. Bueno, entre medio hubo un gol anulado por claro fuera de juego. El Athletic tuvo más oportunidades que la Real también en este segundo tiempo, con otros cinco tiros a puerta. Pena, que alguna de las jugadas no estuviesen bien finalizadas porque les podían haber caído unos cuantos goles más. Pero tampoco hay que pasarse. Un dos a cero está fenomenal. Sobre todo porque leyendo la prensa donostiarra esta semana pasada parecía que el partido lo tenían ganado ellos sin jugar, por la enorme calidad de sus jugadores, que… nuestros jugadores, con un buen partido, no les han dejado demostrar. Calidad que sí hemos visto en Capa, Yuri, Dani y Raúl García, que han estado inmensos los cuatro.
Bien Athletic, muy bien. Y ahora llegamos al parón plenos de moral, que siempre viene bien.
¡Aúpa Athletic!